Mi blog sobre Economía

viernes, 29 de julio de 2011

Acerca de Doing Business

El Proyecto Doing Business proporciona una medición objetiva de las normas que regulan la actividad empresarial y su puesta en práctica en 183 economías y ciudades seleccionadas en el ámbito subnacional y regional.
El Proyecto Doing Business comenzó en 2002 y analiza y compara las normas que regulan las actividades de las pequeñas y medianas empresas locales en 183 economías. El modelo de Doing Business y el modelo de costo estándar son las únicas herramientas de carácter homogéneo que estudian un amplio número de jurisdicciones para cuantificar el impacto de la legislación local en la actividad empresarial.
Al recopilar y analizar detalladamente datos cuantitativos para comparar en el tiempo los marcos reguladores de distintas jurisdicciones, Doing Business estimula cierto tipo de competencia entre las economías analizadas. También ofrece índices ponderables para reformar y constituye un recurso útil para miembros de la academia, periodistas, investigadores del sector privado y otras personas interesadas en el clima empresarial de cada país.
Además, Doing Business ofrece detallados reportes del ámbito subnacional, que cubren de manera exhaustiva la regulación y las reformas de las empresas en diferentes ciudades y regiones de una economía o país. Estos reportes proporcionan datos sobre la facilidad para hacer negocios, clasifican cada localidad y recomiendan reformas para mejorar los resultados en cada una de las áreas de los indicadores. Algunas ciudades pueden comparar sus regulaciones empresariales con otras ciudades vecinas y con las 183 economías que ha clasificado Doing Business.
El primer informe Doing Business, publicado en 2003, cubría cinco grupos de indicadores en 133 economías. El informe 2011 cubre once grupos de indicadores en 183 economías. El proyecto se ha beneficiado de la información aportada por gobiernos, la academia, profesionales en ejercicio entre otros. Sin importar los años que han pasado y las distintas adiciones, es importante resaltar que el objetivo del proyecto sigue siendo el mismo: proporcionar una base de datos objetiva para analizar, comprender y mejorar las normas que regulan la actividad empresarial.

jueves, 28 de julio de 2011

La Depresión Menor

Esta es una época interesante, y lo digo en el peor sentido de la palabra. Ahora mismo, estamos viendo no una sino dos crisis inminentes, cada una de las cuales podría provocar un desastre mundial. En Estados Unidos, los fanáticos de derechas del Congreso pueden bloquear un necesario aumento del tope de la deuda, lo que posiblemente haría estragos en los mercados financieros mundiales. Mientras tanto, si el plan que acaban de pactar los jefes de Estado europeos no logra calmar los mercados, podríamos ver un efecto dominó por todo el sur de Europa, lo cual también haría estragos en los mercados financieros mundiales.Las élites políticas de ambos lados del Atlántico hacen caso omiso a las lecciones de la historia
Solamente podemos esperar que los políticos congregados en Washington y Bruselas consigan esquivar estas amenazas. Pero hay una pega: aun cuando nos las arreglemos para evitar una catástrofe inmediata, los acuerdos que se están alcanzando a ambos lados del Atlántico van a empeorar la crisis económica casi con toda seguridad.
De hecho, los responsables políticos parecen decididos a perpetuar lo que he dado en llamar la Depresión Menor, el prolongado periodo de paro elevado que empezó con la Gran Recesión de 2007-2009 y que continúa hasta el día de hoy, más de dos años después de que la recesión supuestamente terminase.
Hablemos un momento sobre por qué nuestras economías están (todavía) tan deprimidas. La gran burbuja inmobiliaria de la década pasada, que fue un fenómeno tanto estadounidense como europeo, estuvo acompañada por un enorme aumento de la deuda familiar. Cuando la burbuja estalló, la construcción de viviendas cayó en picado, al igual que el gasto de los consumidores a medida que las familias cargadas de deudas hacían recortes.
Aun así, todo podría haber ido bien si otros importantes actores económicos hubiesen incrementado su gasto y llenado el hueco dejado por el desplome de la vivienda y el retroceso del consumo. Pero ninguno lo hizo. En concreto, las empresas que disponen de capital no ven motivos para invertir ese capital en un momento en el que la demanda de los consumidores es débil.
Los Gobiernos tampoco hicieron demasiado por ayudar. Algunos de ellos -los de los países más débiles de Europa y los Gobiernos estatales y locales de EE UU- se vieron de hecho obligados a recortar drásticamente el gasto ante la caída de los ingresos. Y los comedidos esfuerzos de los Gobiernos más fuertes -incluido, sí, el plan de estímulo de Obama- apenas bastaron, en el mejor de los casos, para compensar esta austeridad forzosa.
Así que tenemos unas economías deprimidas. ¿Qué proponen hacer al respecto los responsables políticos? Menos que nada. La desaparición del paro de la retórica política de la élite y su sustitución por el pánico al déficit han sido verdaderamente llamativas. No es una respuesta a la opinión pública. En un sondeo reciente de CBS News/The New York Times, el 53% de los ciudadanos mencionaba la economía y el empleo como los problemas más importantes a los que nos enfrentamos, mientras que solo el 7% mencionaba el déficit. Tampoco es una respuesta a la presión del mercado. Los tipos de interés de la deuda de EE UU siguen cerca de sus mínimos históricos.
Pero las conversaciones en Washington y Bruselas solo tratan sobre recortes del gasto (y puede que subidas de impuestos, es decir, revisiones). Esto es claramente cierto en el caso de las diversas propuestas que se están tanteando para resolver la crisis del tope de la deuda en Estados Unidos. Pero es igual de cierto en Europa.
El jueves, los "jefes de Estado y de Gobierno de la zona euro y las instituciones de la UE" -este trabalenguas da idea, por sí solo, de lo confuso que se ha vuelto el sistema de gobierno europeo- publicaban su gran declaración. No era tranquilizadora.
Para empezar, resulta difícil creer que la compleja y estrambótica ingeniería financiera que la declaración propone pueda resolver realmente la crisis griega, por no hablar de la crisis europea en general.
Pero, aunque así fuera, ¿qué pasará después? La declaración pide unas drásticas reducciones del déficit "en todos los países salvo en aquellos con un programa" que debe entrar en vigor "antes de 2013 como muy tarde". Dado que esos países "con un programa" se ven obligados a observar una estricta austeridad fiscal, esto equivale a un plan para que toda Europa reduzca drásticamente el gasto al mismo tiempo. Y no hay nada en los datos europeos que indique que el sector privado vaya a estar dispuesto a cargar con el muerto en menos de dos años.
Para aquellos que conocen la historia de la década de 1930, esto resulta demasiado familiar. Si alguna de las actuales negociaciones sobre la deuda fracasa, podríamos estar a punto de revivir 1931, el hundimiento bancario mundial que hizo grande la Gran Depresión. Pero si las negociaciones tienen éxito, estaremos listos para repetir el gran error de 1937: la vuelta prematura a la contracción fiscal que dio al traste con la recuperación económica y garantizó que la depresión se prolongase hasta que la II Guerra Mundial finalmente proporcionó el impulso que la economía necesitaba.
¿He mencionado que el Banco Central Europeo -aunque, afortunadamente, no la Reserva Federal- parece decidido a empeorar aún más las cosas subiendo los tipos de interés?
Hay una antigua cita, atribuida a distintas personas, que siempre me viene a la mente cuando observo la política pública: "No sabes, hijo mío, con qué poca sabiduría se gobierna el mundo". Ahora esa falta de sabiduría se pone plenamente de manifiesto, cuando las élites políticas de ambos lados del Atlántico malogran la respuesta al trauma económico haciendo caso omiso de las lecciones de la historia. Y la Depresión Menor continúa.
Paul Krugman es profesor de Economía en Princeton y premio Nobel 2008. © 2011. New York Times Service. Traducción de News Clips.

miércoles, 27 de julio de 2011

Aplicaciones para manejar su empresa desde cualquier lugar

Por Sarah Needleman


Si usted es un emprendedor, seguro el término "trabajo de oficina" no es parte de su vocabulario.
Lo más probable es que usted esté constantemente moviéndose, atendiendo clientes, reuniéndose con proveedores y vigilando a su competencia. Si usa un teléfono inteligente, una tableta o una laptop (o los tres), quiere poder hacer su trabajo donde sea que vaya, desde almacenar datos y elaborar la nómina de sus empleados hasta aceptar pagos con tarjeta de crédito.
La buena noticia es que hoy hay aplicaciones de software para prácticamente todo eso. Cada vez más, los desarrolladores de aplicaciones diseñan programas móviles para los propietarios de pequeñas empresas, un reconocimiento de que los negocios modernos se conducen en movimiento, señala Ramon Ray, editor de Smallbiztechnology.com, un sitio web sobre tecnología.
A continuación, cuatro herramientas de tecnología móvil que pueden hacer la vida más fácil a los emprendedores.
1. Conservar las facturas
Guardar y organizar facturas — ya sean impresas o digitales— puede ser un fastidio. Ahora, servicios en Internet como Shoeboxed, Expensify, ExpenseCloud y ScanDrop le dejan almacenar y organizar en línea datos sobre facturas. Sólo necesita un aparato móvil con acceso a Internet y cámara.
En general, funciona así: toma fotografías de los recibos impresos y los envía por correo electrónico al proveedor del almacenamiento o simplemente los manda por e-mail si ya están en formato digital.
Las tarifas por el servicio varían. Por ejemplo, Shoeboxed cobra entre US$9.95 al mes para almacenar hasta 50 facturas y US$49.95 mensuales por hasta 500 recibos. Esos precios incluyen la transferencia de los datos a informes de gastos u otros.
ExpenseCloud no cobra el almacenamiento. Pero los usuarios pueden integrar sus datos en software de contabilidad como QuickBooks o NetSuite por entre US$3.99 y US$10 mensuales, dependiendo del número de usuarios con acceso.
2. Acceder, compartir y almacenar datos
Ya debe haber escuchado de la "computación en nube", la práctica de acceder a datos y compartirlos con cualquier aparato que tenga acceso a Internet. Con esta tecnología no necesita estar atado a su computadora o servidor, ni preocuparse por la pérdida de su información digital si su oficina sufre daños o robos.
Una serie de compañías dan estos servicios, incluyendo Microsoft Corp. y Amazon Inc., así como firmas pequeñas como Rackspace Hosting Inc. El alcance de sus ofertas varía al igual que su precio.
Por ejemplo, la versión para pequeños negocios de Microsoft Office 365 incluye 10 gigabytes de espacio compartido de almacenamiento, 500 megabytes de espacio individual y buzones de correos de 25 gigabytes por US$6 por usuario por mes.
3. Nóminas digitales
Puede pagar a sus empleados a través de Internet desde su teléfono móvil con aplicaciones gratis de empresas que elaboran nóminas como Intuit, SurePayroll, ADP Inc. y Payrollguru.
Los servicios de aplicaciones funcionan muy parecido a como lo hacen sus versiones "de escritorio". La mayoría le permite revisar y aprobar pagos, manejar depósitos directos, calcular impuestos, confirmar si se han retirado fondos y más. Algunos tienen características especiales, como la opción de ver las fotos de los empleados.
Los precios —usted debe ser un cliente de la empresa para usar las aplicaciones— usualmente dependen de cuántos empleados tenga y la frecuencia con que les paga. Por ejemplo, si una empresa tiene cinco empleados a los que se les paga bimensual, los servicios de SurePayroll costarían US$40 por nómina.
4. Pagos con tarjeta
Cuando hace una venta, ahora puede aceptar pagos con tarjetas de crédito desde su teléfono inteligente. Con servicios como Square y GoPayment de Intuit, agregue gratis lectores de tarjetas a su teléfono que le permiten aceptar pagos con las principales emisoras, como Mastercard y Visa. Los aparatos son compatibles con aplicaciones gratis de teléfonos inteligentes que automáticamente envían recibos a los consumidores vía e-mail. Cada servicio cobra una comisión por transacción: 2,75% en el caso de Square y 2,7% en el de GoPayment. Con GoPayment, también puede pagar una tarifa mensual de US$12.95 al mes para fijar una tarifa por transacción de 1,7%.
También puede utilizar los servicios descritos sin los lectores de tarjetas, ingresando manualmente la información de las tarjetas de crédito, pero las comisiones de transacción son más altas. Otra opción es utilizar un servicio web como Paypal.com o su aplicación gratis para teléfonos inteligentes. Por cada transacción, PayPal le cobra a los comerciantes 30 centavos, más una cuota que va de 1,9% a 2,9% por cobro, dependiendo el número de pagos recibidos por mes.

martes, 26 de julio de 2011

En el trabajo del futuro, ¿el “Gigonomics” se volverá una realidad?


Quizá suceda en un lustro. O en una década. Pero, más allá de la fecha, lo cierto es que tarde o temprano el mundo del trabajo tal como se lo conoce hoy dejará de existir.
Si bien los cambios en el escenario laboral son constantes, los expertos coinciden en que al ritmo que avanza la tecnología, algunas profesiones y oficios desaparecerán, mientras que otras se modificarán para adaptarse a las nuevas realidades.
Por el lado de la demanda, en el futuro cercano la mayor generación de puestos de trabajo seguramente pasará de las grandes corporaciones a las micropyme y los emprendimientos.
Y, visto desde la oferta, ya se está produciendo un cambio en el paradigma de la dependencia -el hecho de que en una empresa asegure el sueldo todos los meses-: están naciendo cada vez más emprendedores y se vaticina que en los próximos años cada profesional deberá fabricar su propia marca y su empleabilidad.
Además, según anticipan los conocedores del mercado de trabajo, en el futuro será cada vez más difícil que la gente se comprometa con una marca u organización. La tendencia será más bien a hacerlo con un proyecto.

El mundo " Gig"

En un artículo del diario español Expansión, José Manuel Casado, presidente de la consultora 2C, sostiene que "habrá un modelo de trabajo muy distinto al que hemos conocido hasta ahora".
Y explica que "en unos casos como consecuencia de la situación, y en otros porque los mejores profesionales aprovechan la situación para transformarla en oportunidad y hacer realidad sus sueños, se está creando un mercado Gig".
El experto español habla de Gigonomics para referirse a un cambio de la economía compuesto por freelance, proyectos Gig y trabajos a tiempo parcial combinados con reducción de los prepuestos corporativos, outsourcing y el fin de la lealtad a las empresas.
"Será una economía en la que casi nadie tendrá un trabajo real; en la que cada trabajador es un Gig, un profesional que colabora a corto plazo con empresas mediante contratos para hacer proyectos concretos. El trabajo es una mezcla de colaboraciones con distintas compañías", señala el consultor en Expansión.

En la perspectiva del especialista, "se da una evolución natural que permite al profesional ser su propio dueño y a la vez dotar a la empresa de una mayor flexibilidad al poder disponer del talento especializado para iniciativas concretas".
Según su visión, esto será cada vez más importante en aquellas organizaciones de conocimiento que trabajen por proyectos, como los estudios de abogados, las consultoras o las ingenierías.
El mercado laboral es una estructura dinámica con permanentes modificaciones y la historia demuestra que el avance tecnológico siempre ha jugado un papel principal.
La incorporación de tecnología por parte de las empresas supone modificaciones en lo laboral: la máquina puede suplantar al hombre en aspectos mecánicos o técnicos pero debe de ser operada por personal especializado.
Allí hay modernización, tecnología y búsqueda del conocimiento para la aplicación de la nueva maquinaria. Pero ahí también se juega su papel la capacitación y el uso de técnicas administrativas innovadoras que tengan en cuenta la creatividad para el desarrollo y la valorización de los talentos.
En este contexto, desde la consultora de RRHH Bayton, Juan Carlos Martínez destaca que "las compañías deben especializarse en aquellas cuestiones que atañen a su estrategia. Todo aquello que demande un conocimiento alterno debe delegarse ya que de esta manera podrá encaminarse toda su capacidad de gestión a los asuntos vitales de la organización e incorporar a terceros que ejecuten profesionalmente las tareas para las que sean más eficaces y eficientes".
Para el gerente de Relaciones Institucionales de la firma de selección de personal, los proyectos "Gig" o esta nueva estructura freelance llamada "Gigonomics" son producto de la personalización y la especialización profesional de determinadas tareas que la empresa por sí misma no debe desarrollar. En otras palabras, se trata de la construcción de profesionales que pasan a prestar servicios en las compañías por un tiempo determinado, con un contrato para un proyecto concreto.
De acuerdo a su descripción, "los 'gigonomics' son talento aplicado a objetivos puntuales, organizan su propio trabajo y son sus propios dueños".
En opinión de Diego Kirschenbaum, director de la consultora Capital Humano, el Gigonomics es y será parte de una nueva generación que se está tomando el trabajo de otra manera.
Y aunque el consultor cree que llevado al extremo este esquema es casi imposible, destaca que será útil en la medida en que a las organizaciones les permita bajar costos y a la gente le rinda.
"Hoy ya se ve un claro paradigma en el que las empresas están tratando de tercerizar o achicarse. El escenario ideal sería que del otro lado encuentren profesionales que quieran y busquen ser autónomos", sostiene Kirschenbaum.
Y añade: "El fenómeno del Gigonomics implica mucho más que trabajo part time. Se trata de un fuerte cambio que ya se está impulsado desde las personas pero no aún desde las empresas, que todavía están viendo qué hacen con la Generación Y".
"Para que el Gigonomics suceda, no sólo las personas tienen que cambiar sino también las compañías", advierte Pablo Molouny, gerente general del portal de empleos Trabajando.com.

Y, en esta línea, añade: "Una empresa tiene que estar dispuesta a tener un nivel de outsorcing y de colaboradores de alta calidad, no sólo sobre la base o medio de la pirámide, que es lo que sucede hoy, ya que lo que plantea este fenómeno es reducir considerablemente el tamaño de la pirámide".
En definitiva, compañías pequeñas, especializadas y muchísima gente trabajando freelance.
Según el Gigonomics, la persona es la protagonista de la nueva era del trabajo. Tiene que tener el afán de superarse a sí misma, generar su propia marca y sus propios procesos de mejora interna constantes.
Así, para Molouny, la pregunta clave es si las compañías están listas para un cambio semejante.
"Esta tendencia lleva a pensar por un lado, un grado de competitividad mucho más alto de las personas pero, a su vez, fuertes cambios estructurales a nivel corporativo. Esto último va a ser más lento, porque las organizaciones tardan más en absorberlos y porque en su mayoría aún están manejadas por personas que son de otra generación", explica.

En peligro de extinciòn

Con la inclusión de la tecnología en el mundo del trabajo se va consiguiendo mayor eficiencia. ¿La contracara? La disminución -e incluso desaparición- de algunos puestos y la transformación de ciertos oficios o profesiones.
Aquellas estructuras de los años '50 ,con empresas con cientos de empleados para tareas administrativas, liquidación de haberes, contaduría y tesorería, en donde los balances, los libros y la contabilidad era llevada en forma artesanal, es un modelo impensable en estos tiempos.
Los "trabajos para siempre" fueron desapareciendo y las organizaciones buscan nuevos profesionales que se desempeñen en su especialidad.
"Hay determinadas profesiones y oficios en virtual desuso y otras que se ven en problemas pero gracias a la transformación logran sobrevivir", dice Martínez, desde Bayton.
"Es cierto que las profesiones cambian y aparecen nuevas", confirma Gabriel Schwartz, director de Psicología Laboral Consultores.
Y completa: "En nuestro país, el avance de la tecnología hizo crecer a diseñadores gráficos, analistas de sistemas y operadores de programas de gestión, técnicos de todo tipo, comercializadores online, mientras que al mismo tiempo van desapareciendo ilustradores, vendedores, oficios como el de herrero o carpintero y médicos de familia".
En opinión de Schwartz, "habrá menos profesiones generalistas y más especialistas".
En tanto, el vocero de Bayton detalla que "las tareas de corrector editorial fueron suplantadas por los editores de texto, los blogs y las redes sociales atentan contra la profesión periodística y los sistemas informáticos y los home banking sucumben los recursos humanos bancarios".
"Decenas de oficios -continúa- han prácticamente desaparecido pues no pudieron soportar los cambios, es muy difícil encontrar boticarios, peleteros, afiladores, sastres, orfebres, marchantes, taquígrafos y mecanógrafos, carboneros y cazadores".
Gustavo Aquino, profesor de la escuela de negocios ESADE y experto en gestión de talento, menciona que los obreros sin especialización y los administrativos de base están cayendo en desuso.
"Hoy es muy difícil encontrar avisos que pidan administrativos, sino que generalmente piden analistas, un licenciado en administración de empresas. Al que completaba planillas se lo comió el SAP, el Oracle, el ERP", asevera Aquino.
A su vez, el profesor de ESADE hace hincapié en que desapareció el dibujante en las empresas de ingeniería, en las constructoras y en los estudios de arquitectura. Ellos fueron reemplazados por un programa -CAD- que lo manejan directamente los ingenieros o arquitectos.
"Los pagos de servicios a través de Internet impactan sobre la cadetería o el envío de correspondencia, al que a su vez se lo comió el e-mail. Y el clásico agente de viaje también está en peligro, por la contratación directa a través de Internet", añade.
Asimismo, relata Martínez desde Bayton, los editores de libros y discos luchan contra la piratería que los obliga a perder fuentes de trabajo a diario en sus locales y las tecnologías inteligentes desplazaron miles de puestos a nivel mundial en compañías de seguros.
Las que están en auge


 Pero así como hay profesiones y oficios en desuso, nacen otras oportunidades de desarrollo profesional a partir de las condiciones del nuevo entorno global.
Con el ingreso de la Generación Y al mercado laboral y la relevancia que en los últimos años viene cobrando el marketing digital y las profesiones de IT, están surgiendo nuevas especialidades, muchas que están vinculadas a las redes sociales como community manager, programadores, desarrolladores, líderes de proyectos, analistas funcionales, expertos en seguridad informática, consultores SAP, administradores de redes y webmasters
.En la Argentina, explican desde Bayton, hay necesidades que datan de los últimos años en el área técnica y tecnológica. Hoy en día hay una gran demanda de ingenieros y técnicos. Otro sector con alto pedido de personal es el de las ciencias de la salud, especialmente en Enfermería.
Todos los análisis realizados por diferentes casas de estudios concuerdan que los sectores llamados a tener un gran apogeo económico en las próximas décadas son el ambiental, forestal, textil y el petroquímico.
Y las nuevas tendencias sociales dan lugar a carreras no tradicionales con un promisorio futuro, cuyos perfiles se modifican a gran velocidad. Alguna de ellas son Ingeniería Ambiental, Mecatrónica, Robótica, Biotecnología e Ingeniería en Alimentos.

lunes, 25 de julio de 2011

Enfrentarse a la crisis de la deuda en Europa

Si se tiene en cuenta sólo el saldo neto entre las sumas prestadas y las reembolsadas desde la implantación del Plan Brady, los países en desarrollo transfirieron a los acreedores el equivalente a más de seis planes Marshall, es decir cerca de 600.000 millones de dólares. ¿No se tendría que evitar que suceda algo similar? ¿Por qué se debe aceptar que los derechos económicos y sociales de los pueblos sean una vez más sacrificados en el altar de los banqueros y de otros actores de los mercados financieros? Es necesario auditar las deudas, con participación ciudadana, con el fin de anular la parte ilegítima. Si no se toma esta opción, las víctimas de la crisis sufrirán a perpetuidad una doble condena en beneficio de los culpables, los banqueros.
Uno de los avatares de la crisis del sector financiero que comenzó en 2007 en Estados Unidos, y que se extendió como reguero de pólvora en Europa, es la energía que desplegaron los bancos del oeste europeo (sobre todo alemanes y franceses, |1| pero también belgas, neerlandeses, británicos, italianos, luxemburgueses, irlandeses…) para utilizar los fondos prestados o donados masivamente por la Reserva federal y el BCE. Con ellos lograron aumentar, entre 2007 y 2009, sus préstamos a varios países de la zona euro (Grecia, Irlanda, Portugal y España), de los que obtuvieron espléndidos beneficios producidos por unos altos tipos de interés. Como ejemplo: entre junio de 2007 (comienzo de la crisis de las subprime) y septiembre de 2008 (quiebra de Lehman Brothers), los préstamos bancarios privados de Europa occidental a Grecia habían aumentado en un 33%, pasando de 120.000 millones a 160.000 millones de euros. Los banqueros de Europa occidental se dieron codazos para otorgar préstamos a la Periferia de la Unión Europea, que deseaba endeudarse. No contentos de arriesgarse en forma extravagante al otro lado del Atlántico en el mercado de las subprime con el dinero confiado por los ahorradores, repitieron la misma operación en Grecia, en Portugal, en España… Efectivamente, la pertenencia a la zona euro de algunos países de la Periferia convenció a los banqueros de los países del Oeste europeo de que los gobiernos, el BCE y la Comisión Europea los ayudarían en caso de problemas. Y no se equivocaron.
Cuando la zona euro fue sacudida por fuertes turbulencias, a partir de la primavera de 2010, el BCE prestaba con un interés ventajoso del 1% a los bancos privados, que a su vez exigían a países como Grecia un interés netamente superior, entre el 4 y 5% para préstamos a tres meses, y alrededor del 12% para los títulos a 10 años. Los bancos y los otros inversores institucionales justificaron tales exigencias por el riesgo de cesación de pagos que pesaba sobre los llamados países de riesgo. Una amenaza tan fuerte que los tipos de interés aumentaron considerablemente: el préstamo concedido por el FMI y la Unión Europea a Irlanda en noviembre de 2010 alcanzaba el 6,7%, contra el 5,2% concedido a Grecia seis meses antes. En mayo de 2011, el tipo de interés para Grecia, para préstamos a 10 años, sobrepasaba el 16,5%, lo que obligó a este país a tomar préstamos a tres o seis meses, o dirigirse al FMI o a otros países europeos. Desde entonces, el BCE debe garantizar las acreencias tenidas por los bancos privados comprándoles los títulos de los Estados… a los que, en principio tiene prohibido prestar directamente.
Para tratar de disminuir los riesgos, los bancos franceses disminuyeron en 2010 su exposición en Grecia, que se redujo en un 44%, pasando de 27.000 millones a 15.000 millones de dólares. Los bancos alemanes efectuaron un movimiento similar: su exposición directa bajó un 60% entre mayo de 2010 y febrero de 2011, pasando de 16.000 millones a 10.000 millones de dólares. Fueron el FMI, el BCE y los gobiernos europeos los que reemplazaron progresivamente a los bancos y otras entidades financieras privadas. El BCE posee en forma directa 66.000 millones de euros de títulos griegos (o sea, el 20% de la deuda pública griega) que adquirió en el mercado secundario a los bancos. Aunque, hasta mayo de 2011, el FMI y algunos gobiernos europeos ya habían prestado 33.000 millones de euros, sus préstamos continuaron aumentando. Sin embargo esto no se detiene allí, el BCE aceptó de los bancos griegos 120.000 millones de euros en títulos de la deuda griega como garantías (colaterales) de préstamos que había otorgado con un tipo de interés del 1,25%. El mismo procedimiento se reprodujo con Irlanda y Portugal.
Nos encontramos, por lo tanto, con todos los ingredientes de la gestión de la crisis de la deuda del Sur, mediante el Plan Brady. |2| A comienzos de la crisis que estalló en 1982, el FMI y los gobiernos de las grandes potencias, Estados Unidos y Gran Bretaña a la cabeza, fueron al rescate de los bancos privados del Norte que se habían arriesgado enormemente prestando, en forma compulsiva, a los países del Sur, sobre todo en América Latina. Cuando países como México se encontraron al borde de la cesación de pagos como resultado del efecto combinado del aumento de los tipos de interés y del descenso en los ingresos por exportaciones, el FMI y los países miembros del Club de París les concedieron préstamos con la condición de que continuaran reembolsando sus deudas y que aplicaran planes de austeridad (los famosos planes de ajuste estructural). Pero, como el endeudamiento del Sur aumentaba por el efecto de bola de nieve (como está pasando en este momento en Grecia, Irlanda, Portugal, y en otros países de la UE), pusieron en marcha el Plan Brady (llamado así por el secretario del Tesoro estadounidense de esa época) que implicó una reestructuración de la deuda de los principales países endeudados mediante un intercambio de títulos. El volumen de la deuda se redujo en un 30% en ciertos casos y los nuevos títulos (los títulos Brady) garantizaron un tipo fijo de interés de cerca del 6%, lo que fue muy favorable para los banqueros. Eso también aseguró la prosecución de las políticas de austeridad bajo el control del FMI y del Banco Mundial. Sin embargo, a largo plazo, el monto total de la deuda aumentó y las sumas a reembolsar fueron enormes. Si se tiene en cuenta sólo el saldo neto entre las sumas prestadas y las reembolsadas desde la implantación del Plan Brady, los países en desarrollo transfirieron a los acreedores el equivalente a más de seis planes Marshall, es decir cerca de 600.000 millones de dólares. ¿No se tendría que evitar que suceda algo similar? ¿Por qué se debe aceptar que los derechos económicos y sociales de los pueblos sean una vez más sacrificados en el altar de los banqueros y de otros actores de los mercados financieros?
Según los bancos de inversiones Morgan Stanley y J.P. Morgan, en mayo de 2011, los mercados consideraban que había un 70% de probabilidad de que Grecia entrara en cesación de pagos, contra un 50% de dos meses antes. El 7 de julio de 2011, Moody’s colocó a Portugal en la categoría de deudas de alto riesgo. Unos días después, los especuladores atacaban a Italia. Por lo tanto, tenemos una razón suplementaria para pedir la anulación: es necesario auditar las deudas, con participación ciudadana, con el fin de anular la parte ilegítima. Si no se toma esta opción, las víctimas de la crisis sufrirán a perpetuidad una doble condena en beneficio de los culpables, los banqueros. Se ve perfectamente en Grecia: las curas de austeridad se suceden sin que mejore la situación de las cuentas públicas. Pasará lo mismo con Portugal, Irlanda, España,... Una gran parte de la deuda es ilegítima puesto que proviene de una política que ha favorecido a una ínfima minoría de la población en detrimento de una aplastante mayoría de ciudadanos y ciudadanas.
En los países que firmaron acuerdos con la Troica, las nuevas deudas no son sólo ilegítimas sino también odiosas, y esto se debe a tres razones:
1) Los préstamos están plagados de condiciones que violan los derechos económicos y sociales de una gran parte de la población.
2) Los prestamistas hacen chantaje a esos países (no hay una verdadera autonomía de voluntad del que necesita el préstamo).
3) Los prestamistas se enriquecen en forma abusiva imponiendo tipos de interés prohibitivos (por ejemplo, Francia y Alemania toman préstamos al 2% en los mercados financieros y prestan a más del 5% a Grecia y a Irlanda; los bancos privados obtienen préstamos al 1,25% del BCE, y prestan a Grecia, Irlanda, Portugal a más del 4% a 3 meses). Estos países o los de Europa del Este (y fuera de la UE, países como Islandia), es decir aquellos que son sometidos al chantaje de los especuladores, del FMI y de otros organismos, como la Comisión Europea, conviene que recurran a una moratoria unilateral del reembolso de la deuda pública. Es un medio inevitable para conseguir crear una relación de fuerza favorable. Esta propuesta es cada vez más popular en los países más afectados por la crisis.
También, se debería efectuar, bajo control ciudadano, una auditoría de la deuda pública. El objetivo de la auditoría es conseguir una anulación/repudio de la parte ilegítima u odiosa de la deuda pública y reducir fuertemente lo que reste de deuda.
La reducción radical de la deuda pública es una condición necesaria pero no suficiente para que los países de la UE salgan de la crisis. Es necesario completarla con toda una serie de medidas de gran amplitud en los diferentes ámbitos (fiscalidad, transferencia de las finanzas al dominio público, resocialización de otros sectores claves de la economía, reducción del tiempo de trabajo con el mantenimiento de los salarios y contratación compensatoria, etc.). |3|
La flagrante injusticia que domina las políticas regresivas actualmente implantadas en Europa alimenta la poderosa movilización de indignados en España, en Grecia o en otros lados. Gracias a estos movimientos, que se inspiraron en los levantamientos populares de África del Norte y del Próximo Oriente, estamos viviendo una aceleración de la historia. La cuestión de la deuda pública debe ser afrontada de manera radical.

Damien Millet es portavoz del CADTM Francia (http://www.cadtm.org/), Eric Toussaint es presidente del CADTM Bélgica. Conjuntamente dirigieron la obra La deuda o la vida que será próximamente publicado por Icaria Editorial, Barcelona, en octubre de 2011.
Traducido por Griselda Pinero - http://www.cadtm.org/ – Julio 2011
Notas:
|1| A fines de 2009, los banqueros alemanes y franceses poseían el 48% de los títulos de la deuda externa española (los bancos franceses el 24%), 48% de títulos de la deuda portuguesa (los bancos franceses el 30%) y el 41% de los títulos de la deuda griega (los franceses a la cabeza con el 26%).
|2| Eric Toussaint, Banco Mundial. El golpe de Estado permanente, El Viejo Topo, Mataró, 2007, capítulo 15.
|3| Véase http://www.cadtm.org/Ocho-propuestas-urgentes-para

viernes, 22 de julio de 2011

Las personas de la tercera edad impulsan el boom emprendedor

Encore_Business
Por Anne Tergesen

Con los ahorros para el retiro vapuleados y altas tasas de desempleo, los estadounidenses más mayores —y más ingeniosos— se están convirtiendo en emprendedores.
De acuerdo con la Fundación Ewing Marion Kauffman, una organización sin fines de lucro, los individuos de entre 54 y 64 años representaron 22,9% de los emprendedores que fundaron empresas en 2010, frente a 14,5% en 1996. Desde 2007, según la fundación, este grupo ha creado nuevas empresas a un ritmo mayor que cualquier otro. La información, escribe el director de investigación de Kauffman, Dane Stangler, indica que "Estados Unidos podría estar en la cúspide de un boom de expansión emprendedora, no a pesar del envejecimiento de la población, sino a causa de ello".
Sin embargo, las tasas de fracaso de los nuevos emprendimientos son altas, de hasta 90% según algunas mediciones.
En consecuencia, nos encontramos con Eric Ries, emprendedor residente en la Escuela de Negocios de la Universidad de Harvard, para hablar de su próximo libro, "The Lean Startup", cuya publicación está programada por Crown Publishing Group para el 13 de septiembre. A continuación, algunos fragmentos.
P: El estereotipo de un emprendedor tiende a ser el de un joven genio de la tecnología. Sin embargo, las estadísticas cuentan una historia diferente. ¿Qué está pasando?
R: La idea de que uno tiene que ser un joven veinteañero recién salido de la universidad para ser un empresario exitoso no es cierta. Emprendedores de mayor edad superan a los más jóvenes en términos de sus tasas de éxito. Todo lo que uno necesita es perspicacia y la voluntad para poner a prueba sus ideas.
P: ¿Cómo puede un emprendedor reducir las probabilidades de fracaso?
R: La visión emprendedora es muy importante, pero es importante probarlo tan pronto como sea posible con datos empíricos. Un buen lugar para hacerlo es el sitio web kickstarter.com, que ayuda a conseguir financiación para los proyectos. Antes de enfrentarse con las dificultades y los costos de producir un producto, uno puede cotizarlo a un precio específico en kickstarter y ver si la gente hace pedidos por adelantado. Si uno nunca llega a producir el producto, el sitio web devuelve el dinero a los clientes. Observando las órdenes por adelantado, uno puede calcular la demanda para su idea. Si sólo le pregunta a la gente si piensa que algo es una buena idea o si pagaría por el producto, la mayoría no va a ser capaz de dar una respuesta precisa. La gente es muy impredecible. Con kickstarter, ellos envían el dinero por adelantado, por lo que uno puede ver cómo se comportan realmente.
P: ¿Es importante escribir un plan de negocios?
R: Creo que los planes de negocios son obsoletos. No es que la planificación no sea valiosa. Pero el objetivo debe ser el uso de herramientas tales como kickstarter para investigar la demanda, en lugar de especular sobre la demanda en un plan de negocios. Uno debería hacer este tipo de experimentación cuanto antes sea posible para no perder tiempo ni dinero en el desarrollo del producto. La tasa de fracasos de nuevas empresas es astronómica. Podemos hacerlo mucho mejor.
P: ¿Qué pasa si uno quiere probar un servicio, en lugar de un producto?
R: En lugar de construir una versión grande y cara de su servicio, es mejor elaborar la versión más pequeña y más simple que le permita comenzar a probarla con potenciales clientes. Por ejemplo, algunos emprendedores que conozco en Austin, Texas, tenían una idea de un servicio para ayudar a los padres con la planificación de las comidas que incorpora las preferencias alimentarias de los miembros de la familia, proporciona recetas y hace un seguimiento de las listas de las compras. En lugar de gastar dinero en el desarrollo de software, pasaban tiempo con clientes cada semana en el supermercado. Ayudaban a sus clientes a hacer la planificación de sus comidas a mano. Escribían los menús en papel y, a medida que mejoraban en satisfacer las necesidades de estos clientes, añadían otras nuevas. Cuando tuvieron una masa crítica, comenzaron a automatizar el servicio, desarrollando el software. La lógica es que si nadie está dispuesto a pagar por la versión de prueba, nadie va a pagar tampoco por el software. La idea es lograr que sólo 10 clientes lo prueben y ver cuánta gente pagaría por ello. Estas técnicas son muy simples.
P: ¿Qué pasa si uno ofrece un servicio, tal como trabajos de carpintería, y sabe que hay un mercado? ¿Cómo se puede hacer la prueba para saber si el negocio tendrá éxito?
R: Conozco a alguien que inició una empresa de diseño interior para el hogar. Sabía que la gente gastaría dinero en reamoblar su casa, pero no si lo contratarían a él. Habló entonces con clientes potenciales para averiguar por qué querían remodelar. Resultó que muchos clientes potenciales en la zona donde se encontraba eran mujeres. Él sabía que ellas no sólo pagando por una remodelación del hogar, sino la sensación de control que un diseñador podría crear para ellas en sus ambientes. Probó eslóganes para su negocio hasta que dio en el blanco, lo que le permitió promocionarse como una persona que ofrecía algo que no podía conseguirse en cualquier lado. El eslogan que él eligió era "a diferencia de su marido, nosotros escuchamos".
P: ¿Debería uno gastar dinero en el diseño de un sitio web para su empresa?
R: Se puede crear un sitio web por muy poco o nada de dinero. Manténgalo básico y simple y no se distraiga con tarjetas profesionales o papelerío. Antes uno tenía que vestirse de traje y repartir tarjetas personales. Todo eso ha quedado en el pasado. Hay empresas como unbounce.com que permiten crear páginas web para que la gente pueda suscribirse a su servicio o producto. [Ries, que es asesor de unbounce.com, posee una participación accionaria en la empresa.] Por ejemplo, si uno planea lanzar un servicio de limpieza y organización, puede crear una página dirigida a las mamás y puede crear una página por separado para las empresas. Esas páginas web se verán muy diferentes, pero ello permite probar ambas versiones y ver cuál funciona mejor.

jueves, 21 de julio de 2011

Los retos de China en su camino a la supremacía

¿Cuándo exactamente dominará China el mundo?
[china]La hora de la verdad parece acercarse con cada minuto que pasa. Para 2050, China se convertirá en la economía más grande del mundo, según el banco británico HSBC. En realidad lo será en 2040, dice Deutsche Bank, o 2030, de acuerdo con el Banco Mundial. Goldman Sachs apunta a 2020 y el Fondo Monetario Internacional afirma que la economía de China superará la de Estados Unidos en 2016.
Pero no nos apuremos. Existe una considerable dosis de caos subyacente al milagro chino. Considere los eventos más recientes:
• En Hunan, los agricultores que fueron obligados a abandonar sus tierras por urbanizadores ambiciosos descubrieron que las autoridades no están de su lado. Un campesino se prendió fuego y las protestas se propagaron rápidamente de pueblo en pueblo.
 
A medida que más chinos se jubilan, la necesidad de pensiones y seguros de salud representará costos sin precedentes para el Estado. En la foto, un joven transporta a sus abuelos en un triciclo en las afueras de Beijing.
• Un derrame químico en un río cortó el suministro de agua a Harbin, una ciudad de cuatro millones de habitantes, lo que generó la ira de la población.
• Disturbios en la provincia de Sinkiang se salieron de control y condujeron a un bloqueo de Internet en una zona casi del tamaño de Colombia.
• En la ciudad costera de Xintang, los guardias de seguridad enviados para disolver una protesta de trabajadores migrantes empujaron a una mujer embarazada al piso, desencadenando una agitación popular que sólo fuerzas paramilitares en vehículos blindados pudieron controlar.
Los servicios de seguridad de China son los mejores del mundo en contener manifestaciones de gran escala y estas protestas no representan ninguna forma de oposición coherente al Partido Comunista. La mayoría de las manifestaciones están dirigidas a funcionarios locales y están alimentadas por agravios locales. Además, tres décadas de crecimiento de dos dígitos ha permitido al liderazgo chino acumular vastas reservas de paciencia popular.
Pero este es un país que mide su incidencia anual de protestas de gran escala en decenas de miles. Para 2006, la Academia de Ciencias Sociales de China registró unos 60.000 "incidentes masivos", un eufemismo oficial para referirse a demostraciones de ira popular en las que participan 50 personas o más. En 2007, la cifra creció a 80.000. Aunque esos números ya no se hacen públicos, información filtrada puso la cantidad para 2008 en 127.000. Es casi seguro que la cifra actual sea más alta.
Es cierto que no hay evidencia creíble de que China está al borde de una crisis, pero toda esa ira pública apunta a desafíos enormes hacia el futuro. Potencias emergentes como India, Brasil y Turquía pueden continuar creciendo durante los próximos 10 años con la misma fórmula básica que impulsó el crecimiento de China durante la última década. China, por otro lado, debe adoptar reformas altamente ambiciosas y complejas que le permitan convertirse en una potencia moderna, y los dirigentes del país lo saben.
La crisis financiera dejó claro que la dependencia de China de los consumidores en Estados Unidos, Europa y Japón crea una vulnerabilidad peligrosa. Aquellos que insisten en que es posible delinear la curva exacta del crecimiento chino parecen asumir que los líderes del país pueden cambiar de forma estable el modelo de expansión nacional hacia un mayor consumo interno, al transferir reservas enormes de riqueza de las poderosas compañías estatales a millones de nuevos consumidores.
Esa es una presunción bastante optimista. A pesar de los mejores esfuerzos de los estrategas políticos en Beijing, la participación del consumo por hogar en el crecimiento de China, de hecho, se movió en dirección contraria, en parte porque hay políticos poderosos dentro de la élite que han ganando bastante dinero con el viejo modelo como para acoger uno nuevo.
Es más, a medida que la brecha entre ricos y pobres sigue ampliándose, la agitación social seguramente llevará a restricciones más severas a la libertad de expresión y de reunión. Esto podría resultar en una reacción violenta si las expectativas sobre un mayor éxito material no se cumplen. Más peligrosas para el partido en el poder son las facciones dentro del gobierno que pueden no estar de acuerdo con la forma en la que el Estado responde a una agitación organizada súbita.
La demografía china será otro desafío. La fuerza laboral del país se está volviendo más cara a medida que China se urbaniza y sube escalones en la cadena de valor de la manufactura. La población también está envejeciendo, ya que la política del hijo único y otros factores dejan a menos jóvenes disponibles para unirse a la fuerza laboral. A medida que más chinos alcanzan la edad de jubilación, la necesidad de expandir y reforzar una red de seguridad social formal para proveer pensiones y cuidado de salud a cientos de millones de personas sumará costos sin precedentes.
Dado que buena parte del crecimiento de China aún viene de proyectos de infraestructura y otras inversiones dirigidas por el Estado, el impacto en un medio ambiente ya exhausto podría llevar el sistema al límite. La degradación de la tierra, la calidad del aire y la escasez de agua son problemas urgentes y que van en aumento. La capacidad de China para tolerar un ambiente en deterioro es mayor que en la mayoría de los países emergentes (sin mencionar al mundo desarrollado), pero las probabilidades de que un incidente ambiental provoque un evento peligrosamente desestabilizador crecen cada día.
También está la inflación, que alcanzó en mayo su punto máximo en 34 años, según la Oficina Nacional de Estadística de China. Los precios de los alimentos subieron 11,7%. Una política monetaria sobreexpansionista, un alza en los precios del transporte ligados a la urbanización y aumentos de los salarios a gran escala son apenas algunas de las variables que aseguran que el gobierno tendrá mayores dificultades para contener la inflación a futuro.
Finalmente, a medida que la demanda popular juega un papel más importante en la forma en que los estrategas políticos toman decisiones, los ciudadanos descontentos pondrán a prueba la habilidad del Estado para implementar políticas estratégicas. Eso también podría limitar el crecimiento de China a largo plazo.
Incluso si los líderes alcanzan un progreso en la reforma interna, encontrarán que el entorno internacional es menos conductivo a expansiones económicas fáciles. El auge de los precios del petróleo, el gas, los metales y los minerales que el país necesita para alimentar su economía pesarán sobre su crecimiento. Los esfuerzos de otras economías emergentes añadirán presión en los alimentos y precios de otras materias primas, suprimiendo tasas de crecimiento y minando la confianza de los consumidores, que ha sido la fuente primordial de estabilidad política y social en China.
Los desafíos colosales que le esperan ofrecen buenas razones para dudar de las proyecciones a largo plazo sobre la supremacía económica y dominio global de China.
—Bremmer es presidente de Eurasia Group, una firma de consultoría especializada en cálculo de riesgo político.
 

martes, 19 de julio de 2011

Observando la grieta en los cimientos del dólar

Por Nicolas Hasting

dollar0606Moody's acaba de colocar una grieta colosal en los cimientos del dólar.
La advertencia el miércoles de la agencia calificadora de crédito de que podría retirar la calificación de "Aaa" a la deuda soberana de Estados Unidos posiblemente no ha infligido mucho daño a la moneda estadounidense hasta el momento.
Pero, debido a que las negociaciones en el Congreso de Estados Unidos para elevar el límite de endeudamiento del país antes del 2 de agosto no muestran señales de progreso, la rebaja en la calificación podría convertirse en una realidad.
Para el dólar, esto se traduciría en un desastre.
La calificación de "Aaa" sobre los bonos del gobierno de Estados Unidos es una de las principales razones por la que muchos inversionistas, incluidos otros grandes bancos centrales, mantienen esos activos en dólares. Si se le retira la calificación de primer nivel, muchos se verán forzados a vender. La diversificación de los flujos hacia otras importantes monedas, que ha sido la principal fuente de debilitamiento del dólar en los últimos años, sólo acelerará esa tendencia.
Esta grieta en los cimientos del dólar aparece en momentos en que la confianza en la moneda estadounidense estaba comenzando a aumentar nuevamente.
La profundización de la crisis de la deuda en la zona del euro, la amenaza de una intervención en la moneda por parte de Japón, y las expectativas de que la recuperación económica de Estados Unidos está finalmente comenzando a ganar impulso, habían ayudado a alentar el interés en la moneda estadounidense.
El índice del dólar es una muestra de ello.
Después de caer a un mínimo de cerca de tres años de 72,70 el 4 de mayo, el índice ha recuperado terreno hasta 76,72 a comienzos de esta semana. Ahora se ubica en 75,05.
Pero la advertencia de Moody's podría cambiar todo.
En sí misma, la amenaza de una rebaja en la calificación no es sorpresiva o nueva. No obstante, aparece en momentos en que las negociaciones entre demócratas y republicanos sobre cómo elevar el límite de endeudamiento no están mostrando señales de progreso.
En todo caso, las conversaciones parecen haberse estancado y los comentaristas de Washington ahora sugieren que es posible que no se cumpla el plazo después de todo, dada la distancia entre las posiciones de ambas partes.
En otras palabras, el riesgo para el dólar ha crecido pronunciadamente.
Lo que en algún momento parecía una propuesta poco probable es ahora una posibilidad más real, con flujos masivos de divisa en juego.
Sólo basta mirar a China. Las cifras de esta semana mostraron que sus reservas en moneda extranjera han crecido a US$3,2 billones, y tanto como un 70% de ellas aún están en dólares.
Una rebaja en la calificación por parte de Moody's significa que Beijing se sentirá menos intimidado por el dólar de lo que ha estado en los últimos años.
Uno de los asesores del banco central de chino, Xian Bin, dijo el jueves que el país necesita acelerar la diversificación para cubrirse de los riesgos asociados a la divisa estadounidense.
Pero incluso sin una rebaja real en la calificación, es posible que el dólar encuentre que respaldo se desvanece poco a poco a medida que se acerca el plazo del 2 de agosto sin señales concretas de un acuerdo en el Congreso.
En efecto, Moody's y el forcejeo de los políticos le habrán infligido un daño mucho más serio a las perspectivas para el dólar de lo que parece en este momento.
 

lunes, 18 de julio de 2011

Como un monstruo a lo Frankenstein, los engendros financieros de los CDS están fuera de control

Cuando Mary Shelley inventó a su famoso personaje de Frankenstein no imaginó nunca que esta metáfora podía emplearse para elaborar un alambicado ardid que equivaldría a poner una bomba de tiempo en el sistema financiero mundial. Pues bien, tal como describimos en el concepto de los Credit Default Swaps o Derivados de incumplimiento crediticio, conocidos también como activos tóxicos, o “armas financieras de destrucción masiva”, estos instrumentos han escapado al control de sus creadores para dar paso a una contundente vida propia. Una vida mucho más grande que toda la economía real del planeta, aunque no tienen nada que ver con la economía real dado que no son más que oscuros papeles manejados por oscuros burócratas.
Lo curioso del caso, es que esto se sabe desde hace tres años y las autoridades europeas han sido incapaces de controlar a los CDS. Han intentado controlar los pequeños incendios de los déficit de Grecia o Irlanda, pero no se interesan por maniatar a los verdaderos pirómanos que desatan los incendios grandes. Por eso se encuentran en un camino sin salida, cuya turbulencia sólo ayuda a propagar el fuego. Este es el lúgubre fantasma que recorre Europa, y pese a que las autoridades saben que están en un pantano, no pueden hacer nada para remediarlo. El engendro financiero, a lo Frankenstein, se les ha escapado de las manos.
Los swaps de incumplimiento crediticio (CDS) suman actualmente más de 61 billones de dólares (US$61.000.000.000.000), es decir, más que toda la economía mundial, ver gráfica. Estos swaps tienen el extraño mérito de acelerar el proceso de destrucción económica, como quien lanza bombas molotov a un incendio.
Tanto es así, que el año pasado, Angela Merkel comparó el mercado de CDS con quien asegura la casa de un vecino (con los CDS no se necesita ser el dueño del bien asegurado), recordando que “quien compra un seguro para la casa de su vecino tiene un gran interés en que la casa se incendie, e incluso le prende fuego”. Pero luego de estas expresiones todo siguió igual.
Que la mujer más poderosa de Europa no pueda detener el mercado de los CDS demuestra que estamos bajo la dictadura de la oligarquía financiera. Es decir, estamos en manos de los especuladores. Las imágenes de Charlie Chaplin en El Gran Dictador, son una inocentada al lado de esta operación real.

¿De dónde vienen los CDS?

Los Credit Default Swaps nacieron en 1990 tras el derrame petrolero del Exxon Valdez del 24 marzo de 1989 en Alaska. Fue tal el nivel de pérdidas que ocasionaron las 37.000 toneladas de petróleo vertidas a lo largo de 2.200 kilómetros de costas, que los ingenieros financieros de Goldman Sachs idearon esta fórmula mágica para no paralizar el sistema financiero. El accidente del Exxon Valdez no sólo provocó una catástrofe ecológica y cuantiosas pérdidas de crudo, sino que ocasionó gran daño en la cadena de suministro y hubo múltiples demandas que aletargaron aún más la normalización del proceso.
La idea de este seguro buscaba agilizar los trámites e impedir que se paralizaran los flujos financieros que amplificaban el daño a la cadena de suministro. Si se producía un incumplimiento que obligaba un no pago, el seguro respondía y así el sistema seguía funcionando mientras se reparaban los daños puntuales. La idea tiene el gran mérito de reanimar un sistema que colapsa (como en Frankenstein), mediante el inmediato estímulo financiero. Todo habría resultado perfecto, si el sistema no se hubiese prestado para abusos. Y como los CDS no tienen ninguna forma de control o regulación, todas las formas de abuso se hicieron presentes. Una de las principales formas de abuso es que cualquiera que disponga de diez millones de dólares (es decir, bancos o grandes inversionistas), pueden asegurar la casa del vecino para luego prenderle fuego. Es lo que ocurre con las apuestas a los impagos soberanos de Grecia, Irlanda y Portugal. Mientras más se apuesta, más alta es la probabilidad de impago dado que los bonos de deuda soberana están indexados a los CDS.
Como se trata de instrumentos algo complejos y a los que sólo acceden los grandes inversionistas (el monto mínimo de un CDS es de 10 millones de dólares), estos instrumentos tardaron bastante en darse a conocer. Hacia 1995 su volumen de operaciones no alcanzaba los 200.000 millones de dólares, y aunque para 1999 llegaba a 500.000 millones de dólares, su despegue definitivo se produce el año 2003. A partir de ese momento los CDS comienzan a duplicarse cada año dado que se convierten en la herramienta favorita de los especuladores (ver gráfica).
Ahora el mundo se encuentra dominado por CDS y es insólito que en las pruebas de solvencia no se haya medido a fondo el impacto de los CDS para la banca de los países en problemas. Cómo el mecanismo de los test se realizaron el año 2008, cuando aún no se develaba el peligro expansivo de los CDS, no se tomaron en cuenta. Pero no tomarlos en cuenta al cabo de tres años de alto daño acumulado refleja una grave falta.
Si la única manera de controlar un incendio es cortando el suministro de oxígeno, al parecer la única manera de controlar a los CDS será cortando el suministro financiero. Y como los bancos centrales siguen auspiciando el suministro financiero para el desarrollo de esa farsa y falsa economía, sólo el colapso total de los bancos centrales y del sistema financiero podrá derrocar a los CDS de su tiranía, y devolver al mundo a una economía real. Como lo he advertido en otros post, la actual crisis sólo parará cuando el actual sistema financiero sea destruído. La realidad de Europa y de Estados Unidos (la hegemonía del actual sistema) va en esa dirección. Al inocente y descontrolado Frankenstein, también hubo que destruirlo.

Marco Antonio Moreno

viernes, 15 de julio de 2011

El cuentapropismo con voz de mujer

Por Patricia Grogg

Café! ¡Las jabas, aquí las jabas! (bolsas) ¡Queso crema del bueno...! Las voces, todas femeninas, se confunden entre el ruido y las ofertas habituales en cualquier mercado cubano. Elisa, de 64 años, estuvo entre estas mujeres hasta que fue multada por comercio ilegal. "Lo pagué caro", dice. Alguien le aconsejó a Elisa que sacara una licencia para seguir vendiendo las bolsas de un material plástico que hacía su sobrina en una máquina de coser prestada. "Pero ya estoy muy vieja para eso. ¿Y qué hago si después no puedo pagar los impuestos?", se pregunta. Sin esperar respuesta, se pierde entre la gente que sopesa precios y calidades entre uno y otro puesto de la feria agropecuaria.

Alejandrina es otra trabajadora autónoma que comenzó a coser ropa para sus amigas hace 10 años. "Hasta ahora nadie me ha dicho que tengo que inscribirme como cuentapropista. No me decido porque los impuestos están violentos", comenta.

En cambio, Felicia sacó su licencia de peluquera en los años 90 y asegura que "todo sigue igual" para ella.

El trabajo por cuenta propia, ampliado en 2010 de 157 a 178 oficios y actividades como alternativa a la disminución del empleo estatal, no es nuevo en el escenario cubano. Aunque la política para su aplicación en la década del 90, signada por el comienzo de la crisis que siguió a la caída del campo socialista, fue diferente a la actual.

Los afiliados al trabajo autónomo pasaron de 50.000 a 121.000 en 1994, un año después del decreto ley que permitió su ampliación. La cifra más alta registrada oficialmente fue de 165.000 suscriptos en 2005. Sin embargo, según investigadores, ese crecimiento estuvo "acotado" por una gran cantidad de prohibiciones.

"El débil marco legal para la actuación efectiva de los cuentapropistas los ha llevado a subsistir en medio de la ilegalidad", afirman los economistas cubanos Omar Everleny Pérez Villanueva y Pável Vidal en un amplio estudio sobre el tema. Además, esta actividad estuvo signada por su declarado carácter temporal y la no aceptación ideológica dentro del modelo económico que impera en Cuba.

En los años 90, muchas mujeres aprovecharon el sector no estatal de la economía, pero generalmente subordinadas, como ayudantes familiares, muchas veces no recibían remuneración alguna y permanecían invisibilizadas. Según datos oficiales, las mujeres eran hasta 2007 alrededor de la cuarta parte de los trabajadores por cuenta propia registrados.

Según estudiosas del tema, en esta segunda oleada de reformas en el trabajo autónomo podría aumentar la franja de informalización precarizada, que ya existe, ocupada fundamentalmente por mujeres. Lo más visible es el cuentapropismo de altos ingresos, que no es mayoritario.

"Pero además el listado es eminentemente masculino", consideró una de las fuentes consultadas.

Al respecto, la investigadora y profesora universitaria Luisa Iñiguez apunta que en la Habana, donde la población económicamente activa femenina es casi 50 por ciento del total, solamente 38 por ciento de las solicitudes como cuentapropistas habían sido presentadas por mujeres hasta el 31 de enero pasado.

Ese dato ya está indicando una desventaja en cuanto a la incorporación de mujeres al trabajo por cuenta propia, comentó la experta al ser consultada por IPS durante un seminario organizado por el Centro de Estudios de la Economía Cubana, con apoyo conjunto de la Fundación Friedrich Ebert y la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación.

Por mera observación es posible constatar que en el trabajo autónomo ellas ejercen ocupaciones consideradas tradicionalmente femeninas. En ese sentido, es más frecuente verlas como procesadoras y vendedoras de alimentos, en renta de habitaciones, bordadora tejedora, manicura, peluquera, asistente para el cuidado de niños y niñas y en el servicio doméstico.

Las mujeres son casi la mitad de la población cubana de 11,2 millones de personas, su trabajo remunerado se concentra fundamentalmente en el sector estatal y civil, donde abarcan 42,7 por ciento del total, y llegaron en 2009 a constituir 59 por ciento del personal de administración, según la Oficina Nacional de Estadísticas.

La mayor apertura y flexibilización del trabajo por cuenta propia integra las reformas de la actualización del modelo económico cubano y fue concebida por el gobierno para favorecer alternativas a la racionalización de más de un millón de empleos del sector estatal entre 2011 y 2015, cuyo cronograma inicial, que debió comenzar en octubre del pasado año, se ha ido posponiendo.

Según Pérez Villanueva y Vidal, "los cálculos originales al parecer no previeron, entre otros elementos, que los espacios legales abiertos al cuentapropismo podían ser ocupados, antes de que se concretara la racionalización del empleo estatal, por personas que no tenían vínculos laborales previos, estaban jubilados y/o ya realizan estas actividades desde la informalidad".

Datos estadísticos citados en la investigación indican que 68 por ciento de las 221.839 nuevas licencias otorgadas y en proceso de hacerlo hasta abril correspondían a personas que no tenían vínculo laboral y 16 por ciento procedían de jubilados y trabajadores estatales. Ni los informes oficiales ni el artículo de ambos economistas brindan datos con enfoque de género.

Por otra parte, muchas de las licencias han sido entregadas a personas que ya ejercían, aunque sin la autorización. Pérez Villanueva y Vidal coinciden en señalar que el microcrédito y el mercado mayorista de insumos, claves para hacer crecer el sector no estatal, pueden incentivar también la legalización pues para acceder a ellos el cuentapropista debe estar registrado y pagar sus impuestos.

Otros analistas alertan que, si 64,7 por ciento de los graduados universitarios y 66,4 por ciento de la fuerza técnica y profesional del país son mujeres, las opciones en oferta para el trabajo privado resultan tan precarias y pobres en conocimiento como para los hombres. Tanto es así que, de las licencias otorgadas hasta mayo último, solo siete por ciento fueron concedidas a universitarios.

jueves, 14 de julio de 2011

La crisis ideológica del capitalismo occidental

Tan solo unos años atrás, una poderosa ideología – la creencia en los mercados libres y sin restricciones – llevó al mundo al borde de la ruina. Incluso en sus días de apogeo, desde principios de los años ochenta hasta el año 2007, el capitalismo desregulado al estilo estadounidense trajo mayor bienestar material solo para los más ricos en el país más rico del mundo. De hecho, a lo largo de los 30 años de ascenso de esta ideología, la mayoría de los estadounidenses vieron que sus ingresos declinaban o se estancaban año tras año.
Es más, el crecimiento de la producción en los Estados Unidos no fue económicamente sostenible. Con tanto del ingreso nacional de los EE.UU., yendo destinado para tan pocos, el crecimiento solo podía continuar a través del consumo financiado por una creciente acumulación de la deuda.
Yo estaba entre aquellos que esperaban que, de alguna manera, la crisis financiera pudiera enseñar a los estadounidenses (y a otros) una lección acerca de la necesidad de mayor igualdad, una regulación más fuerte y mejor equilibrio entre el mercado y el gobierno. Desgraciadamente, ese no ha sido el caso. Al contrario, un resurgimiento de la economía de la derecha, impulsado, como siempre, por ideología e intereses especiales, una vez más amenaza a la economía mundial – o al menos a las economías de Europa y América, donde estas ideas continúan floreciendo.
En los EE.UU., este resurgimiento de la derecha, cuyos partidarios, evidentemente, pretenden derogar las leyes básicas de las matemáticas y la economía, amenaza con obligar a una moratoria de la deuda nacional. Si el Congreso ordena gastos que superan a los ingresos, habrá un déficit, y ese déficit debe ser financiado. En vez de equilibrar cuidadosamente los beneficios de cada programa de gasto público con los costos de aumentar los impuestos para financiar dichos beneficios, la derecha busca utilizar un pesado martillo – no permitir que la deuda nacional se incremente, lo que fuerza a los gastos a limitarse a los impuestos.
Esto deja abierta la interrogante sobre qué gastos obtienen prioridad – y si los gastos para pagar intereses sobre la deuda nacional no la obtienen, una moratoria es inevitable. Además, recortar los gastos ahora, en medio de una crisis en curso provocada por la ideología de libre mercado, simple e inevitablemente solo prolongaría la recesión.
Hace una década, en medio de un auge económico, los EE.UU., enfrentaba un superávit tan grande que amenazó con eliminar la deuda nacional. Incosteables reducciones de impuestos y guerras, una recesión importante y crecientes costos de atención de salud – impulsados en parte por el compromiso de la administración de George W. Bush de otorgar a las compañías farmacéuticas rienda suelta en la fijación de precios, incluso con dinero del gobierno en juego – rápidamente transformaron un enorme superávit en déficits récord en tiempos de paz.
Los remedios para el déficit de EE.UU. surgen inmediatamente de este diagnóstico: se debe poner a los Estados Unidos a trabajar mediante el estímulo de la economía; se debe poner fin a las guerras sin sentido; controlar los costos militares y de drogas; y aumentar impuestos, al menos a los más ricos. Pero, la derecha no quiere saber nada de esto, y en su lugar de ello, está presionando para obtener aún más reducciones de impuestos para las corporaciones y los ricos, junto con los recortes de gastos en inversiones y protección social que ponen el futuro de la economía de los EE.UU. en peligro y que destruyen lo que queda del contrato social. Mientras tanto, el sector financiero de EE.UU. ha estado presionando fuertemente para liberarse de las regulaciones, de modo que pueda volver a sus anteriores formas desastrosas y despreocupadas de proceder.
Pero las cosas están un poco mejor en Europa. Mientras Grecia y otros países enfrentan crisis, la medicina en boga consiste simplemente en paquetes de austeridad y privatización desgastados por el tiempo, los cuales meramente dejarán a los países que los adoptan más pobres y vulnerables. Esta medicina fracasó en el Este de Asia, América Latina, y en otros lugares, y fracasará también en Europa en esta ronda. De hecho, ya ha fracasado en Irlanda, Letonia y Grecia.
Hay una alternativa: una estrategia de crecimiento económico apoyada por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional. El crecimiento restauraría la confianza de que Grecia podría reembolsar sus deudas, haciendo que las tasas de interés bajen y dejando más espacio fiscal para más inversiones que propicien el crecimiento. El crecimiento por sí mismo aumenta los ingresos por impuestos y reduce la necesidad de gastos sociales, como ser las prestaciones de desempleo. Además, la confianza que esto engendra conduce aún a más crecimiento.
Lamentablemente, los mercados financieros y los economistas de derecha han entendido el problema exactamente al revés: ellos creen que la austeridad produce confianza, y que la confianza produce crecimiento. Pero la austeridad socava el crecimiento, empeorando la situación fiscal del gobierno, o al menos produciendo menos mejoras que las prometidas por los promotores de la austeridad. En ambos casos, se socava la confianza y una espiral descendente se pone en marcha.
¿Realmente necesitamos otro experimento costoso con ideas que han fracasado repetidamente? No deberíamos, y sin embargo, parece cada vez más que vamos a tener que soportar otro. Un fracaso en Europa o en Estados Unidos para volver al crecimiento sólido sería malo para la economía mundial. Un fracaso en ambos lugares sería desastroso – incluso si los principales países emergentes hubieran logrado un crecimiento auto-sostenible. Lamentablemente, a menos que prevalezcan las mentes sabias, este es el camino al cual el mundo se dirige.

Joseph E. Stiglitz es profesor de la Universidad de Columbia, Premio Nobel de Economía y autor de Freefall: Free Markets and the Sinking of the Global Economy

miércoles, 13 de julio de 2011

10 Consejos para vender tus ideas al estilo de Steve Jobs

10 Consejos para vender tu ideas estilo de Steve JobsSteve Jobs es considerado como uno de los más grandes lideres empresariales de todos los tiempos, gracias a su capacidad innovadora que lo llevó a desarrollar, a través de sus empresas, varios de los productos más populares de la época.

Mac, Ipod, Iphone y Ipad son algunos de los desarrollos tecnológicos producto de las ideas de este hombre. Su capacidad empresarial es indiscutible, y era un genio transmitiendo sus ideas.

Steve Jobs compartió para la Revista Business Week sus técnicas para prepararse cuando va a vender sus ideas, 10 sencillos pero muy útiles consejos.

1. Planee sus presentaciones con papel y lápiz. Antes de crear la presentación, en un tablero, haga una lluvia de ideas de lo que va a contar. Todos los elementos de las historias que Jobs vende son premeditados, planeados y conectados antes de crear cualquier diapositiva.

2. Ponga una oración a cada idea. Piense que está creando una frase para escribir en su twitter, es decir, de máximo 140 caracteres. Un ejemplo es: “The world’s thinnest notebook” (El portátil más delgado del mundo)

3. Cree un villano. Esta figura permitirá que la audiencia gire alrededor del héroe (usted y su producto o servicio). No debe ser necesariamente su competidor, en cambio, use un problema que su producto esté solucionando.

4. Enfóquese en los beneficios. Su audiencia solamente necesita saber cómo lo que usted está ofreciendo mejora sus vidas. Cada uno de sus posibles clientes tiene unas necesidades y para usted deben ser lo más importante.

5. Presentaciones de tres partes. Según Jobs, así tenga una infinidad de cosas que decir sobre su idea, la audiencia sólo es capaz de retener tres o cuatro puntos de lo que usted diga. Diga lo más importante, pues lo demás lo olvidarán.

6. Venda sueños, no servicios. El presidente de Apple, no vende computadores, él vende la promesa de un mundo mejor. Cuando Jobs lanzó el iPod en 2001, dijo: “In our small way we’re going to make the world a better place” (De nuestra pequeña manera, haremos del mundo un lugar mejor).

7. Diseñe diapositivas visuales. En las presentaciones de Steve Jobs solo se verán fotografías e imágenes. Entre más simple la presentación, será mejor y la idea se quedará más fácil en la mente de sus posibles clientes.

8. Haga que los números se entiendan. Dentro de sus presentaciones, ponga las cifras grandes en un contexto relevante para su audiencia. Busque analogías y comparaciones para que la cifra tome relevancia para su audiencia.

9. Use términos sencillos. El lenguaje de uno de los hombres más influyente del mundo es simple. No use términos raros, sea claro y directo.

10. Practique, practique y practique. Jobs gasta horas ensayando cada fase de sus presentaciones. Piense que va a presentarse en una obra de teatro. El éxito de toda presentación depende de los esfuerzos que haga antes de hacerla.

martes, 12 de julio de 2011

Descansar no es una opción, es una necesidad

Por Sarah E.Needleman

El mes pasado, Brandy Greygor hizo algo impensable para una emprendedora que recién comienza con su negocio: se tomó unas vacaciones de una semana.
"Lo necesitaba porque estaba agotada", dice Greygor, una madre de 35 años con dos niños que también trabaja medio tiempo para una empresa de consultoría desde su casa en Kentucky.
Pero no fue fácil separarse del negocio de venta minorista de accesorios que lanzó hace casi un año para complementar sus ingresos, Sassy Mama Boutique. "Mi preocupación era que recibiría pedidos cuando estaba de vacaciones y no iba a poder satisfacerlos", explica.
Ya sea quedándose en casa o viajando, tomarse un descanso cuando está creando un negocio es clave, dicen los expertos. Los emprendedores tienden a trabajar intensas y largas horas al comienzo y pueden fácilmente terminar agotados. Además, desviarse de una rutina normal es una oportunidad para pensar respecto a un negocio desde un nuevo punto de vista, lo que puede ser útil para decidir en qué dirección llevarlo.
"Hay que tomarse algo de tiempo libre", dice Mark Green, un consultor de pequeñas empresas en Oregón. "De otra forma, uno está simplemente yendo de una tarea a otra sin despejar la mente", opina.
Pocos meses después de inaugurar en 2009 YourLittleFilm.com, un negocio de edición de videos, Logan Hale se tomó tres días de vacaciones. Se quedó en un terreno de camping cerca de su casa de Los Ángeles y pasó el tiempo caminando, meditando y comiendo en una pequeña cafetería. El siguiente verano, hizo lo mismo y volverá a hacerlo este año.
Cada escapada, dice Hale, de 34 años, le permite volver renovado y con una estrategia clara en su mente para llevar su compañía al siguiente nivel. Por ejemplo, dedicó la primera pausa que se tomó a analizar maneras de ejecutar su plan de negocios, que hasta ese momento era simplemente una idea en etapa de prueba. Al año siguiente, se concentró en expandir el mercado que estaba compuesto por familias para incluir a clientes corporativos. Y en su próximo descanso planea analizar cómo hacer crecer su negocio para que sea algo más que un emprendimiento de una sola persona.
"Cuando estoy trabajando y mi cabeza está hundida en la laptop día tras día, siento que estoy constantemente mirando árboles y nunca viendo el bosque", cuenta Hale, un ex organizador de eventos independiente que sufrió con la recesión. Pero una vez que está solo y fuera de su casa puede "obtener esa perspectiva", explica.
Para algunos emprendedores, una manera simple de descansar es tomar un poco de tiempo libre cuando hacen viajes de negocios. Eso es lo que hace Walt Ribeiro, cuando va a conferencias y exposiciones por su trabajo en su empresa de Nueva York, que vende partituras para orquestas y grabaciones de canciones populares a las que les hace arreglos.
Durante un reciente viaje a Mineápolis, Ribeiro cenó en un famoso restaurante y recorrió el sistema de puentes peatonales interconectados que tiene la ciudad. El emprendedor, de 27 años, lanzó su negocio en 2009, previendo que iba a ser despedido de una compañía dedicada a organizar premiaciones, lo que ocurrió un mes después. Dice que todavía no puede costear unas vacaciones tradicionales y que encontraría muy difícil volver a trabajar en su nueva empresa luego de desconectarse por más de unos pocos días.
Otra forma de mantener las cosas en orden en una nueva empresa durante las vacaciones es aprovechar la tecnología moderna. Con los teléfonos inteligentes y otros aparatos móviles que se conectan a Internet, usted puede revisar su correo electrónico, actualizarse en las redes sociales y realizar otras tareas desde donde lo necesite.
Mientras tanto, tenga presente que las vacaciones pueden incluso presentar oportunidades para hacer contactos, dice Andy Birol, un consultor de pequeñas empresas en Pittsburgh. "Usted está rodeado de personas que no tienen su cabeza hundida en su trabajo y que están igualmente abiertas a nuevos estímulos", señala. "He cerrado negocios en un jacuzzi en Bermuda y he conocido clientes en un tren que me llevaba al glaciar Joseph, en Nueva Zelanda".
Greygor, la minorista de accesorios, colocó una nota en su página de Internet explicando que todos los pedidos serían enviados el día que regresara. La pequeña empresaria justo recibió más pedidos la semana que estuvo de vacaciones que antes. Los envió en cuanto volvió y ni un solo cliente se quejó por la demora.
"Después de todo… el mundo no se termina cuando se va de vacaciones", dice.