Mi blog sobre Economía

sábado, 4 de julio de 2015

Ocurrió el 4 de julio

Jorge Gómez Barata

El 4 de julio de 1776 debutó Estados Unidos, que en menos de un siglo se convirtió en el fenómeno político más relevante de la era moderna. Aquel día comenzó la primera revolución en el Nuevo Mundo, y se emitió uno de los documentos políticos más avanzados de todos los tiempos: la Declaración de Independencia. 

Los precursores y forjadores de los Estados Unidos actuaron con altura y lucidez, y en épocas en que la integración no era regla, unieron trece enclaves, virtualmente otros tantos países, para constituir con ellos una sola nación; la primera República democrática moderna, y el primer Estado de Derecho asentado sobre la base de una Constitución que ha soportado la prueba del tiempo, y 225 años después sigue vigente.

El protagonismo de los Estados Unidos, desde hace más de 100 años la primera superpotencia mundial, provoca que admiradores y detractores pasen por alto sus modestos orígenes, y omitan el hecho de que todo procede de una revolución, a la vez liberal, anticolonialista, antimonárquica y republicana. 

Surgida de las necesidades locales y de las urgencias de la lucha liberadora, la Declaración de Independencia traspasó el espacio de América del Norte y del tiempo en que fue redactada, alcanzando universalidad y trascendencia. 

Aquel significado no se impuso, ni se debió al potencial económico, al poderío militar o a la influencia política que entonces no existían, sino al alcance y la fuerza de las convicciones contenidas en ella, y a la capacidad de convocatoria derivada de sus afirmaciones, la principal: “…Todos los hombres son creados iguales…dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables, entre ellos la vida, la libertad, y la búsqueda de la felicidad…”

La Declaración suma méritos imperecederos al subrayar la función del poder político: “…Para garantizar esos derechos se instituyen los gobiernos, que derivan sus poderes legítimos del consentimiento de los gobernados…” Su mensaje no puede ser más revolucionario: “…Cuando una forma de gobierno se vuelva destructora de estos principios, el pueblo tiene el derecho a reformarla o abolirla…” 

Así nacieron juntos el derecho a la rebelión contra el despotismo y la injusticia, y la necesidad de una institucionalidad legítima, responsable, y duradera. 

No obstante la grandeza de sus propósitos originales, Estados Unidos no hizo justicia a los pueblos originarios y demoró en abolir la esclavitud, para lo cual fue precisa la determinación de Abraham Lincoln y una devastadora guerra civil. Aunque sus élites avanzadas lucharon contra el racismo, los resultados fueron magros. 

No exageró Frederick Douglas cuando en 1882, en el Corinthian Hall, preguntó a los presentes: ¿Qué significa, para el esclavo estadounidense vuestro 4 de julio?”. “…Yo respondería ―sentenció―, un día que le revela la inmensa injusticia y crueldad de la que es víctima constante…” Lamentablemente algunas madres afroamericanas pudieran hacerse hoy preguntas análogas. 

En la zaga de la revolución americana vinieron las luchas por la independencia en Hispanoamérica, donde se fundaron no una, sino veinte repúblicas deudoras del paradigma y del espíritu de 1776. 

Pasó el tiempo y renombradas empresas norteamericanas exhibieron una ilimitada e inescrupulosa voracidad, hubo administraciones que cedieron a las mezquindades de la política pequeña, fueron intervencionistas y realizaron acciones reprobables e injustas. Las hubo que comprometieron el honor del país, e incluso toleraron la tortura. 

Otras, como las de Franklin D. Roosevelt, empeñaron el poderío y el prestigio de la nación para liderar la coalición antifascista. Algunas como la de James Carter corrigieron equívocos al devolver a Panamá la soberanía sobre el Canal. Barack Obama rectifica la política hacia Cuba, trabaja para que el bloqueo sea levantado, y para que la cárcel de la base de Guantánamo sea historia.

Ocho de sus mandatarios pagaron con sus vidas la consagración al servicio público. Con luces y sombras crecieron los Estados Unidos, y con arcilla de todas partes se modeló el pueblo norteamericano, una entidad multicultural y multiétnica, y la más cosmopolita de las comunidades humanas, que con aportes diversos se hizo a sí misma. 

De ese modo prosperaron filias y fobias, hubo tensiones y desencuentros, pero nunca fueron puestas en dudas las verdades evidentes plasmadas en la Declaración de Independencia. Ojalá su espíritu prevalezca siempre.

Proyectos novedosos para este verano capitalino

Tres proyectos novedosos facilitarán la comercialización de las ofertas gastronómicas y recreativas. Réplicas de los restaurantes La Torre y El Aljibe encabezan el programa estival

Por Minerva Hernández Basso

Para mantenerse más cerca de los vacacionistas de La Habana, durante el verano, la Sucursal Palmares Centro, perteneciente al Grupo Extrahotelero del mismo nombre, ubicará algunas instalaciones temporales en escenarios de la ciudad preferidos por los capitalinos.

Tres proyectos especiales fueron ideados para esta ocasión con múltiples ofertas gastronómicas y recreativas que pudieran tener buena acogida, según manifestó a la prensa Magalys Vicente Destón, directora general de dicha Sucursal, quien subrayó el gran interés de la entidad por facilitar el acceso a sus propuestas en las áreas citadinas de gran afluencia de público. 

El llamado Proyecto Malecón tendrá tres puntos fundamentales. En primer lugar destaca la réplica del restaurante-bar La Torre, que se ubicará en una instalación transitoria en forma de carpa, con decorados que se ajusten a la realidad de ese enclave. Explicó la Directora que ese minirestaurante estará amenizado con distintas presentaciones artísticas que se correspondan con la calidad del recinto actual y donde se ofrecerán platos similares a los de la casa original.

La carta menú contará con tres entrantes, cinco platos principales, ensaladas de estación y dos tipos de postres, todo esto -dijo la Directora- “sin perder las perspectiva de hacer que el pueblo conozca y disfrute de la comida internacional y la presentación gourmet que caracteriza a La Torre”. 

Con mucho deseo y empeño se trabajará en ese pequeño restaurante de cinco mesas, aunque los profesionales de la culinaria y la gastronomía que allí se desempeñan no tienen experiencia del trabajo en instalaciones temporales, reconoció Katiuska Criado Rodríguez, su administradora, quien considera como una buena oportunidad para dar promoción a este centro pues la población aún no sabe de su apertura luego de la reparación.

Se trata de un sitio emblemático, ubicado en el piso 33 del afamado edificio Focsa, en El Vedado habanero, desde cuyas ventanas de cristal se pueden disfrutar de fantásticas vistas de la capital en todas sus coordenadas. “Vamos a bajar 121 metros de altura donde está La Torre para ubicarnos en el centro de la diana del verano y brindar el mismo trato con la excelencia de la instalación”, apuntó la Administradora. 

También en el Malecón se montará un bar con animación para presentar la coctelería cubana acompañada con picaditas, o saladitos, como también se les llama a ese tipo de plato. Igualmente, se expondrán fotos de todas las instalaciones de la Sucursal y se presentarán grupos musicales de pequeño formato que habitualmente amenizan sitios como la Bodeguita del Medio y el Floridita.

Asimismo, prestará servicios una réplica de Al Paso, una marca de Palmares que identifica a los puntos de ventas de confituras y bebidas refrescantes. En opinión de Magalys Vicente se trata de “una propuesta muy atractiva que ubica a la Sucursal, por primera vez, en el Malecón habanero”. 

Habitualmente Palmares Centro presta servicios en unas 126 instalaciones de diferentes vertientes como restaurantes, complejos turísticos, centros nocturnos, gastronomía ligera y en un pequeño campo de golf. Dicha infraestructura se extiende por los municipios de La Habana Vieja, Centro Habana, Cerro, Plaza, Playa y la provincia de Artemisa. 

Aires playeros

Zona Playa Oeste es otro proyecto en el municipio capitalino de Playa que une a Palmares Centro con el complejo gastronómico recreativo del Gobierno local, en el cual incluirá dos unidades en la playita de la calle 70, para brindar gastronomía ligera y otras ofertas de comestibles.

A dicho sitio se insertarán los restaurantes La Casa Española y La Cecilia, además de la cooperativa Bien me sabe, en representación de las nuevas formas de gestión vinculadas al sector. En el mismo municipio, en la zona conocida por Monte Barreto, habrá un punto de venta del restaurante La Vicaria y, como siempre, una réplica de El Aljibe; “un producto con gran aceptación, año tras año, cada verano”, afirmó la Directora de la Sucursal.

Asimismo, la entidad participará en las ferias comerciales que se realizarán en el bulevar del hotel Comodoro y, durante el período vacacional, a lo largo del litoral oeste de la ciudad, abrirá puntos de ventas, incluso uno en la playa de Baracoa, en la provincia de Artemisa.

En sitios como el restaurante Don Cangrejo, de la entidad nombrada Playa Uno, se están haciendo gestiones para ampliar las ofertas a la costa con la apertura de una cafetería en el área exterior, con el propósito de facilitar servicios de gastronomía a las personas que se pueden bañar en la costa, donde hay buenas condiciones para los bañistas, según explicó a la prensa Ángel Fernández, director de la mencionada dependencia.

La capital baila con Palmares Centro es el nombre del proyecto vinculado a lo recreativo y cultural, a partir de presentaciones de orquestas y espectáculos de alta convocatoria en las dos principales salas de fiesta de esta Sucursal como son: La Cecilia y Jardines del 1830, cada una con 800 capacidades. Al respecto, la Directora señaló: “esperamos gran acogida de la población, en especial de los jóvenes a quienes les gusta bailar todos los fines de semana”.

El aniversario 55 del centro nocturno Gato Tuerto, con su programa de celebraciones, forma parte de la campaña del verano 2015, según adelantó Luis Cairo, director de Operaciones de la Sucursal. Esa instalación, inaugurada el 31 de agosto de 1960, cobró fama por ser sede de inolvidables descargas de boleros. Sus paredes se ambientaron con obras de pintores cubanos y el restaurante fue emplazado en los altos de la casa para independizarlo de la actividad cultural, según el sitio cubano Ecured.

Sus características originales, tal vez estimularon ahora el montaje de una exposición fotográfica sobre la historia de esta instalación, precedida por un conversatorio de Miguel Barnet, presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba. Igualmente, se podrá cumplir el deseo de realizar la Gran descarga, con muchos artistas que han actuado en el Gato Tuerto. 

Garantías de verano

El disfrute masivo de la recreación veraniega depende, en buena parte, de que los abastecimientos estén garantizados. Al respecto, Mayté Olivera Rodríguez, directora de Compras, comentó que a pesar de la inestabilidad en la entrega de productos necesarios en la gastronomía, durante este año esta Sucursal ha alcanzado 112 %, de cumplimiento del plan de ingresos.

“Por supuesto, no vamos a hacer menos en el verano y estamos tratando de asegurar el máximo de productos”, señaló la funcionaria. Según su explicación han sido entregadas las demandas a las industrias nacionales y han sido aceptadas en dependencia de la capacidad de producción de cada una de estas y “como tenemos respuesta, la Sucursal ha trazado un plan de importaciones para cubrir las demandas y con otras variantes darle siempre buena atención a los clientes este verano”, indicó. 

Acerca del desempeño del Grupo Palmares, su vicepresidenta,Vivian Mazorra, explicó que tradicionalmente se realiza una amplia campaña de verano. Al tener a su cargo la actividad extrahotelera las entidades del Grupo se vinculan mucho con la población, es por ello que considera de vital importancia la preparación previa.

Se refirió al recorrido realizado antes por todo el país para efectuar reuniones territoriales, en especial con los proveedores y prestadores de servicios con el propósito de garantizar que las actividades del Grupo “que están bien diseñadas tengan su aseguramiento y lleguen a feliz término”, apuntó.

Destacó el peso de la Sucursal Centro para el Grupo Extrahotelero dada su gran extensión territorial y por gestionar productos emblemáticos, aunque también reconoció el desempeño de la sucursal Este Habana, sobre todo con las acciones en la playa de Guanabo, donde despliega amplios programas para el disfrute de la población durante la etapa estival.

La censura de buena vecindad


Hoy repasaremos en exclusiva noticias publicadas en el diario español “El País”. Leemos en este periódico que, en 2014, los desahucios de viviendas en el Estado español aumentaron el 13,5 % (1). Pero ni la menor alusión a la responsabilidad del sistema bancario privatizado en este drama social. Quizá sea porque tres importantes bancos españoles son accionistas del Grupo Prisa, al que pertenece “El País” (2). Pero ¿se imagina que esto ocurriera en Cuba? ¿O en Venezuela, donde el Estado ha entregado, en solo cuatro años, 675.000 viviendas nuevas a familias sin recursos, sin que –por cierto- “El País” haya informado de ello (3)?

Leemos sobre una nueva desaparición de un periodista en México (4). “El País” nos dice que México es uno de los lugares más peligrosos para ejercer el periodismo. 31 profesionales han sido asesinados desde 2010. Pero en la noticia no hay la menor alusión a la responsabilidad del estado o del “sistema” en este drama, que apunta a la connivencia entre autoridades políticas y narcotráfico. ¿Se imaginan que esta situación se diera en Cuba, donde el último periodista asesinado fue en 1958, un año antes el Triunfo de la Revolución (5)?

“El País” también asegura que Honduras es el país más violento del mundo, con 79 homicidios por cada 100.000 habitantes, y un femicidio cada 14 horas (6). Las dos terceras partes de la población del país están en situación de pobreza y el 42% en pobreza extrema. Pero no leemos que esto esté relacionado con un “sistema” o “régimen” político fracasado, que requiera una rápida “transición”. Es la fórmula –recordemos- que propone “El País” en la mayor parte de sus reportajes y artículos sobre Cuba, cuyos problemas están –por cierto- bien alejados de las situaciones extremas de violencia o miseria existentes en Honduras (6).

En 2014, más de 40.000 personas procedentes de Guatemala fueron expulsadas de EEUU (7). Leemos que las remesas constituyen el 10% del PIB de aquel país, y la única posibilidad de comprar comida, ropa o pagar la educación para miles de familias. Es la fotografía de tantas otras naciones de la región, menos de una: Cuba. Porque la emigración cubana no tiene ese problema. Al llegar a EEUU no es expulsada, sino acogida, y recibe la residencia al de un año (8). Pero sobre esta política de doble rasero de EEUU no leeremos una línea en las páginas de “El País”.

Leyendo sobre los enormes problemas sociales de México, Guatemala u Honduras, es curioso que “El País” rara vez publique un artículo de opinión crítico –mucho menos un editorial- sobre estas naciones. Sobre Cuba (9) o Venezuela (10), sin embargo, no hay día que no aparezca un artículo de opinión beligerante con ambos gobiernos. En esta línea casi obsesiva, el pasado 12 de enero, “El País” llegaba al extremo del ridículo. Otorgaba media página al periodista canario Juan Cruz que, en un texto titulado “Cosas que viví en La Habana”, relataba los quince días que pasó en la capital cubana –en un viaje de turismo-, ¡en el año 1990! (11). Su vivencia personal de apenas dos semanas, hace 25 años, era suficiente para hacer toda una radiografía política de Cuba, y para dar las correspondientes lecciones de lo que el pueblo cubano debe hacer con su país.

Por cierto, ¿han leído en alguno de los grandes diarios que el Grupo Prisa, propietario de “El País”, debe 3.537 millones de euros, y que ha pedido un nuevo aplazamiento del pago de un crédito de 2.800 millones para financiar su deuda? (12) Seguramente que no, porque sobre este tema -común a todos ellos- los diarios en competencia aplican una implacable censura de “buena vecindad”.

*Coordinador de Cubainformación.












Día triste: se apagó la risa de Carlos Ruiz de la Tejera

Publicado el sábado, 04 de julio de 2015 10:02 am | Escrito por Ileana González / Radio Reloj



El actor y comediante musical Carlos Ruiz de la Tejera falleció repentinamente este viernes en La Habana.

Hacer llorar es llegar a lo más sensible del alma humana, enfrentándola a las verdades que cotidianamente las mentiras tapan...pero que la gente ría y piense, también es difícil, había dicho el popular artista, Premio Nacional de Humorismo e incansable trabajador por la cultura cubana.

Hombre de vasta cultura y martiano de raíz, deja una profunda estela en el teatro, el cine y la televisión. Fue un maestro de la sátira, del monólogo crítico pero atinado. Versátil y permanente estudioso. Fiel a Cuba y su Revolución.

Respetuoso y fervoroso defensor de la cultura cubana. Así recordaremos siempre al querido Carlos Ruiz de la Tejera. Quedan sus lecciones de arte verdadero, para todos los tiempos.

Centro de Estudios Martianos / exposición de Emiliano Dantas INVITACION

Estimadas(os) compañeras(os):

Los invitamos a la inauguración de la exposición fotográfica “Poéticas
visuales sobre el hombre natural”, su autor es el brasileño

Emiliano
Dantas, Profesor de las Facultades Integradas Barros Melo AESO.
Esta muestra es una cooperación de AESO con la Cátedra José Martí de
la Universidad Federal de Pernambuco (UFPE) representada en esta
ocasión por Rodriggo Leopoldino.

La inauguración tendrá lugar el próximo jueves 9 de julio a las 3:00
P.M. en el Centro de Estudios Martianos (Calzada 807 esquina a 4, El
Vedado).


Nos complacería mucho contar con su presencia.

Saludos,
Lic. Sahily Alonso
Dpto. de Promoción
Centro de Estudios Martianos

Fidel Castro visita centro de investigaciones en La Habana

La Habana, 4 jul (PL) El líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, visitó el Instituto de Investigaciones de la Industria Alimenticia, en el poblado del Guatao, donde intercambió experiencias con 19 maestros queseros que se preparan en ese centro.

El diario granma informa hoy que el encuentro, celebrado en la tarde del viernes durante más de cuatro horas, estuvo matizado por los razonamientos de Fidel Castro en torno a los problemas que afectan los niveles de alimentación de la población mundial, como el cambio climático y las frecuentes guerras.

También se abordaron con profundidad temas relacionados con los niveles productivos y las calidades alcanzadas en la elaboración de quesos en el país en épocas anteriores al Período Especial (crisis económica iniciada a princpios de la década de 1990) y la necesidad de su recuperación.

Varios de los participantes de vasta experiencia formados en aquellos años y que aún se mantienen en sus labores, explicaron a Fidel Castro las acciones que realizan para alcanzar paulatinamente aquellos niveles productivos, con la calidad necesaria, para lo cual es imprescindible continuar la preparación de los maestros queseros.

En la reunión participaron también María del Carmen Concepción González, Ministra de la Industria Alimentaria, integrantes de su Consejo de Dirección, de su Grupo Empresarial, los miembros del Consejo de Dirección del Instituto y sus profesores.

La nota de Granma

Visita Fidel el Instituto de Investigaciones de la Industria Alimenticia

El líder histórico de la Revolución sostuvo un amplio intercambio con varios maestros del centro de estudios



Foto: Estudio Revolución

En la tarde de este viernes Fidel sostuvo un amplio intercambio de más de 4 horas, con 19 maestros queseros que cursan un ciclo de preparación en el Instituto de Investigaciones de la Industria Alimenticia del MINAL, en el poblado del Guatao.

En el encuentro, matizado por los razonamientos de Fidel en torno a los problemas que afectan los niveles de alimentación de la población, como el cambio climático y las frecuentes guerras, también se abordaron con profundidad los temas relacionados con los niveles productivos y las calidades alcanzadas en la elaboración de quesos en el país en épocas anteriores al Período Especial y la necesidad de su recuperación.


Foto: Estudio Revolución

Varios de los participantes de vasta experiencia formados en aquellos años y que aún se mantienen en sus labores, intervinieron en la reunión y explicaron a Fidel las acciones que realizan para alcanzar paulatinamente aquellos niveles productivos, manteniendo la calidad necesaria, para lo cual es imprescindible continuar la preparación de los maestros queseros.

En el intercambio participaron María del Carmen Concepción González, Ministra de la Industria Alimentaria, integrantes de su Consejo de Dirección, de su Grupo Empresarial, los miembros del Consejo de Dirección del Instituto y sus profesores.


Foto: Estudio Revolución


Foto: Estudio Revolución

Contradicciones en la normalización de relaciones entre EE.UU. y Cuba

Andrés Gómez*

Miami - 3 de julio de 2015 – Es indudable que los caminos que se han abierto para labrar las relaciones entre Estados Unidos y Cuba desde las decisiones hechas públicas por ambos gobiernos desde el 17 de diciembre de 2014 han sido altamente anhelados por todas las personas de buena voluntad en los dos países y en el resto del mundo. 

Como también es manifiesto que este proceso comenzado públicamente hace apenas seis meses es producto del triunfo del proceso revolucionario del pueblo cubano, extraordinario proceso que ha obtenido y afianzado su independencia, sus derechos soberanos y su derecho a la autodeterminación.

El presidente de Estados Unidos implícitamente así lo reconoció tanto el 17 de diciembre pasado así como el pasado 1 de julio --al anunciar la apertura de embajadas en las respectivas capitales-- al afirmar como inservible a los intereses de su país la política de agresión permanente, la política de guerra, en contra del pueblo cubano mantenida por Estados Unidos en contra de Cuba desde 1959, seis años más de medio siglo.

Y digo que implícitamente así lo ha reconocido el presidente de Estados Unidos porque la intención de esa política de guerra era la destrucción de la revolución cubana, y ha sido con el gobierno de la revolución cubana con el que el gobierno de Estados Unidos ha tenido que negociar para poder establecer una nueva relación con Cuba.

Sobre el asunto de la nueva relación con Cuba ha sido grato escuchar al presidente Obama el 1 de julio pasado mantener y defender la necesidad de una nueva relación con el pueblo cubano y su gobierno, tanto para el pueblo de Estados Unidos como para su gobierno. Oírlo decir, por ejemplo: “Y de esto se trata: una decisión entre el futuro y el pasado”. 

Aunque, claro, no confío. ¿Por qué cuál es ese futuro para el presidente Obama? Si del futuro de Cuba se tratara, no creo que el futuro que el presidente de Estados Unidos pueda querer para el pueblo cubano sea el que el pueblo cubano quiera para sí mismo. Ya que si así fuera Barack Obama nunca hubiese llegado a ser presidente de Estados Unidos y el pueblo cubano nunca hubiese forjado su revolución.

Si se tratara de un nuevo giro de las relaciones por parte de Estados Unidos, tampoco confío porque, entre otras fundamentales cuestiones, su gobierno no se ha opuesto a las nuevas asignaciones aprobadas en el mes de junio pasado por el Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes federal que aprobó 30 millones de dólares para programas “para promover la democracia y fortalecer la sociedad civil en Cuba” en el año fiscal 2016, el año fiscal entrante, –10 millones de dólares más que lo asignado en el actual año fiscal 2015 -- como siempre Washington ha hecho en “el pasado”.

Ese proyecto de ley también asignó un poco más de otros 28 millones de dólares para Radio y TV Martí, como lo ha hecho “en el pasado”. Como una nueva dimensión de la política de subversión “del futuro”, el Comité de Asignaciones de la Cámara aprobó en este mismo proyecto de ley un presupuesto de 17 millones y medio de dólares para promover programas y “acceso” en la Internet en Cuba, como ZunZuneo y los otros existentes aún no públicamente denunciados.

El sitio web Along the Malecón que investiga estos asuntos, estima que el gobierno de Estados Unidos ha presupuestado y gastado públicamente en programas subversivos contra Cuba desde 1996 hasta el presente un poco más de mil millones de dólares; 324 millones de dólares en programas para “promover la democracia y fortalecer la sociedad civil”, y otros 700 millones en Radio y TV Martí. 

Además no confío en ese futuro que el presidente Obama concibe para las nuevas relaciones con Cuba porque se informó en la prensa que el mismo 1 de julio pasado, Josh Earnest, vocero de la Casa Blanca, en una conferencia de prensa informal, abordo del mismo avión presidencial que volaba el presidente Obama, después de su discurso en la Casa Blanca sobre el restablecimiento de la embajadas con Cuba, dijo: “Vamos a continuar apoyando los esfuerzos de los activistas de derechos humanos. Cuando hay gente en Cuba, gente con mucho coraje, que está luchando por sus derechos, vamos a apoyarlos”.

En un giro mentiroso dado por la prensa de derecha, tanto en este país, especialmente en Miami, así como internacionalmente, a las condiciones que han sido aceptadas por ambos gobiernos para lograr la apertura de las respectivas embajadas es que el gobierno cubano ha claudicado y que el gobierno de Estados Unidos ha conseguido una demanda clave: aquella de la de movimiento sin restricciones para su personal diplomático en Cuba.

Es manifiesta la mala fe, para no decir mala leche, o la ignorancia (posiblemente ambas) de esa prensa con el propósito de confundir a sus lectores y minimizar el triunfo del gobierno cubano cuando esa prensa esto así lo afirma. 

Desde el propio 17 de diciembre pasado, cuando el presidente cubano, habló sobre la decisión de ambos gobiernos de lograr la normalización de sus relaciones dejó por sentado que esas relaciones diplomáticas para poder lograrse tenían que ser basadas en la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional, específicamente en lo establecido sobre las mismas en la Convención de Viena Sobre Relaciones Diplomáticas de 1961, de la cual ambos gobiernos son signatarios, y que rige las relaciones diplomáticas entre los Estados.

El Artículo 26 de la Convención de Viena establece: “Sin perjuicio de sus leyes y reglamentos referentes a zonas de acceso prohibido y reglamentado por razones de seguridad nacional, el Estado receptor garantizará a todos los miembros de la misión [del Estado acreditante] la libertad de circulación y de tránsito por su territorio”.

Es inimaginable, aún al más estúpido de los enemigos, argumentar que el gobierno de Cuba, que fue el que exigió el cumplimiento de este reglamento fuera a prohibir lo que está permitido por la Convención de Viena.

Lo que el gobierno cubano exigió y logró es que el gobierno estadounidense aceptara lo que está obligado por la Convención de Viena de la cual es signatario.

El asunto nunca fue que los miembros de la misión de Estados Unidos no tuvieran libertad de circulación y de tránsito en territorio cubano, sino que al hacerlo no se inmiscuyeran en los asuntos internos de Cuba como está prohibido hacerlo por el Inciso 1 del Artículo 41 de la Convención de Viena: “Sin perjuicio de sus privilegios e inmunidades, todas las personas que gocen de esos privilegios e inmunidades deberán respetar las leyes y reglamentos del Estado receptor. También están obligados a no inmiscuirse en los asuntos internos de ese Estado”.

Como tampoco podrán utilizar, de acuerdo al Inciso 3 del Artículo 41 de esta Convención: “Los locales de la misión no deben ser utilizados de manera incompatible con las funciones de la misión tal como están enunciadas en la presente Convención, en otras normas del derecho internacional general o en los acuerdos particulares que estén en vigor entre el Estado acreditante y el Estado receptor”.

En la carta, que con fecha de 30 de junio de 2015, el presidente de Estados Unidos dirigiera al presidente de Cuba, sobre el restablecimiento de relaciones diplomáticas y de embajadas en sus respectivas capitales, y que fuera entregada por el embajador Jeffrey De Laurentis, Jefe de Misión de la Sección de Intereses de Estados Unidos en el Ministerio de Relaciones Exteriores el pasado 1 de julio, el presidente Obama se comprometió a que “Al tomar esta decisión, Estados Unidos se ve alentado por la intención recíproca de entablar relaciones respetuosas y cooperativas entre nuestros dos pueblos y gobiernos, congruentes con los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, en particular los relativos a la igualdad soberana de los Estados, la solución de controversias internacionales por medios pacíficos, el respeto por la integridad territorial y la independencia política de los Estados, el respeto por la igualdad de derechos y la libre determinación de los pueblos, la no injerencia en los asuntos internos de los Estados, así como la promoción y el fomento del respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales de todos.

Los Estados Unidos y Cuba son partes en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, firmada en Viena el 18 de abril de 1961, y la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, firmada en Viena el 24 de abril de 1963. Me complace confirmar el entendimiento de los Estados Unidos de que las antedichas convenciones se aplicarán a las relaciones diplomáticas y consulares entre nuestros dos países”.

¿Se obliga el gobierno de Estados Unidos a acatar los reglamentos establecidos sobre las relaciones diplomáticas y consulares establecidos y aceptados como parte del derecho internacional de la cual es signatario, como afirma el presidente Obama en su carta al presidente Raúl Castro y así dar comienzo de manera honorable a la normalización de sus relaciones con el gobierno y pueblo cubanos, o todo esto es una farsa de corta duración?

A su vez el presidente cubano en carta al presidente de Estados Unidos con fecha de 1 de julio pasado en relación al restablecimiento de relaciones diplomáticas y de embajadas en sus respectivas capitales, y entregada el pasado 1 de julio por el embajador José Ramón Cabañas, Jefe de Misión de la Sección de Intereses de Cuba en el Departamento de Estado afirma: “Cuba se inspira asimismo en los principios y propósitos consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional, a saber, la igualdad soberana, el arreglo de las controversias por medios pacíficos, abstenerse de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado, la no intervención en los asuntos que son de la jurisdicción interna de los Estados, el fomento de relaciones de amistad entre las naciones basadas en el respeto al principio de la igualdad de derechos y al de la libre determinación de los pueblos, y la cooperación en la solución de problemas internacionales y en el desarrollo y estímulo del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales de todos. 

Lo anteriormente expresado está en conformidad con el espíritu y las normas establecidas en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas del 18 de abril de 1961 y en la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares del 24 de abril de 1963, de las cuales tanto la República de Cuba como los Estados Unidos de América son Estados Parte, y regirán las relaciones diplomáticas y consulares entre la República de Cuba y los Estados Unidos de América.”

Concluyo esta contribución a lo que es acucioso aclarar, especialmente a los más jóvenes, que no han tenido el privilegio de vivir los que otros, como yo, hemos podido hacer; contribuir para que haya en momentos como éstos la menor confusión posible, citando de la Declaración del Gobierno Revolucionario Cubano sobre estos asuntos con fecha de 1 de julio de 2015:

“Como parte del proceso hacia la normalización de las relaciones, a su vez, habrá que construir las bases de unos vínculos que no han existido entre nuestros países en toda su historia, en particular, desde la intervención militar de los Estados Unidos, hace 117 años, en la guerra de independencia que Cuba libró por cerca de tres décadas contra el colonialismo español.

Estas relaciones deberán cimentarse en el respeto absoluto a nuestra independencia y soberanía; el derecho inalienable de todo Estado a elegir el sistema político, económico, social y cultural, sin injerencia de ninguna forma; y la igualdad soberana y la reciprocidad, que constituyen principios irrenunciables del Derecho Internacional”.

* Director de Areítodigital

A los amigos de Cuba Socialista, Revolucionaria y Soberana




Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos 


A los amigos de Cuba Socialista, Revolucionaria y Soberana 

El 17 de diciembre de 2014 marcó un día histórico con el regreso de Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero, tres de los Cinco Patriotas cubanos presos en EE.UU por más de 16 años, y el anuncio de la intención expresa para restablecer las relaciones entre EE.UU y Cuba.

Tras siete meses de conversaciones de alto nivel por ambas partes, los presidentes Raúl Castro y Barack Obama anunciaron este 1ro de julio el restablecimiento de la relaciones diplomáticas y la apertura de las Embajadas en Washington y La Habana el próximo 20 de julio.

En cartas intercambiadas entre ambos mandatarios, indicaron que los anima la intención de desarrollar relaciones respetuosas y de cooperación entre ambos pueblos y gobiernos, basadas en los principios y objetivos de la Carta de las Naciones Unidas, el Derechos Internacional y la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas y consulares. Cartas de los Presidentes

Este importante avance marca también que se ha cumplido con éxito la primera etapa del complejo y difícil camino hacia la normalización de las relaciones.

Saludamos los esfuerzos realizados por ambas partes. Pero mucho más aplaudimos a Cuba Socialista, Revolucionaria y Soberana que sin renunciar a un solo principio, ni un milímetro de su soberanía, ni a la solidaridad internacional que ha llenado de gloria su historia, ha llegado a este momento donde queda demostrado una vez más que medio siglo del bloqueo genocida más largo de la historia, más de 600 intentos de atentados a Fidel y guerra encubierta, no pudieron doblegar la voluntad de todo un pueblo, no pudieron vencer la firmeza de su dirección revolucionaria que no claudicó jamás, porque este es el pueblo de Fidel y Raúl y de aquellos que justamente este 26 de julio, 6 días después de la apertura de las embajadas, cumplirán 63 años de haber cambiado para siempre el destino, no solo de una pequeña isla, sino de toda nuestra América Latina.

A los amigos y compañeros que trabajan desde hace décadas en solidaridad con la Revolución Cubana, a quienes se movilizaron por el retorno de Elián González, a los que durante 16 años realizaron todo tipo de acciones día tras día, año tras año, demandando la libertad de los Cinco y denunciando al terrorismo; a las personas honestas del mundo que aman la paz, los convocamos hoy a exigir al Congreso de EE.UU que ponga fin al bloqueo genocida contra Cuba, exigir al gobierno de EE.UU la devolución del territorio ocupado ilegalmente por la Base Naval de Guantánamo, el desmantelamiento de las organizaciones terroristas con base en Miami que han provocado 5077 víctimas del terrorismo, el fin de las trasmisiones radiales y televisivas con las que se viola la soberanía, el cese de los presupuestos millonarios que alimentan y sostienen los planes subversivos contra Cuba en el intento de promover la desestabilización interna y la contrarrevolución, y la compensación al pueblo cubano por los innumerables daños provocados durante estas décadas. Declaracion del Gobierno Revolucionario

Con el mismo espíritu de unidad de acción y la certeza de la victoria con los que hicimos nuestro primer llamado desde el Comité Internacional por la Libertad de los Cinco aquel 20 de mayo del 2002, los llamamos hoy, en estas horas de nuevos desafíos y peligros para nuestros pueblos a:

Defender incondicionalmente a la Revolución Cubana, su pueblo y su gobierno; luchar por el fin al bloqueo genocida, for el fin de todas las restricciones a los viajes de los estadounidenses a Cuba, la devolución de Guantánamo y la reparación económica por los daños causados al pueblo cubano; 

Demandar la libertad de Oscar López Rivera, prisionero político boricua que lleva más de tres décadas en prisiones de EE.UU; 

Apoyar la justa lucha por la independencia de Puerto Rico; 

Denunciar todo intento de agresión a Venezuela Bolivariana y los países del Alba, y las agresiones del imperialismo contra los gobiernos progresistas de la región; 

Apoyar los Diálogos de Paz entre las FARC y el gobierno de Colombia; 

Exigir la devolución de las Islas Malvinas; 

Expresar nuestra solidaridad incondicional con Palestina y los pueblos árabes agredidos por el imperialismo y el sionismo. 

Por lo que ha significado el 17 de diciembre para todos los solidarios del mundo, en la Cumbre de los Pueblos de Panamá se aprobó llevar a cabo acciones contra el Bloqueo y la defensa de nuestros pueblos los días 17 de cada mes.


Nuestro Logo, basado en un boceto original de Gerardo Hernández Nordelo, expresa el pronunciamiento de la CELAC en 2014 cuando proclamó: América Latina es Zona de Paz.

Queridos compañeros, desde nuestro modesto espacio, con la fuerza de la razón que asiste a nuestros pueblos y desde la experiencia acumulada, los convocamos a luchar más que nunca, con nuevas herramientas, los mismos principios, con mayor sabiduría y con la misma pasión. 


Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos