Imprimir artículo
El Premio de la Crítica Literaria se entrega anualmente en Centro Dulce María Loynaz y tiene el objetivo de estimular tanto la creación de los autores como el trabajo de las editoriales.
Obras sobre la emigración, racialidad, religión, homosexualidad y el rescate de la memoria histórica en Cuba recibieron el Premio de la Crítica Literaria 2012.
Como textos que "dan fe de la singular capacidad de resistencia de la que nació la creatividad de la Cuba de hoy", catalogó la poeta Laura Ruiz a los libros que recibieron ayer en esta capital el Premio Anual de la Crítica Literaria 2012.
La escritora matancera, galardonada en el Centro Cultural Dulce María Loynaz por su obra "Otro retorno al país natal", consideró que los títulos elegidos como los más importantes publicados por las casas editoriales cubanas, muestran "un performance de cultura, alma y vida que nos asisten como nación y voluntades".
Ruiz, quien habló en nombre de los premiados, dijo que "estas páginas intentan hacer coincidir el país histórico con el cotidiano, el tiempo real con el de las ficciones, a través de experiencias que van de la pérdida al hallazgo, de la convicción al desasosiego, de lo desconocido a lo palpable".
En sus palabras de elogio a los laureados, Edel Morales, miembro del jurado, comentó que "los siete libros seleccionados reflejan desde distintos lugares la riqueza y la resistencia tejida desde distintos ángulos que la cultura cubana puede promover hoy".
Asimismo resaltó el hecho de que cuatro de los premiados viven fuera de La Habana.
En tal sentido particularizó en "la dureza, el desgarramiento del mundo narrativo" que presenta el libro "La catedral de los negros", de la Editorial Letras Cubanas y cuyo autor, Marcial Gala, contextualiza en la ciudad sureña de Cienfuegos.
Morales también estimó que "Mito, verdad y retablo. El guiñol de los hermanos Camejo y Pepe Carril", de Rubén Darío Salazar y Norge Espinosa, publicado por la Editorial Unión, constituye uno de los tres libros más importantes entre los premiados.
Al respecto destacó la manera en que dichos escritores narran la historia del guiñol en Cuba, con lo cual rescatan un tema que, a juicio de Morales, "había sido como escamoteado en la historia cultural nuestra. Este es uno de los aportes indiscutibles que el Premio de la Crítica hace a la memoria cultural cubana y a la relectura de este período", aseguró.
También resultaron acreedores del Premio "Sexo de cine. Visitaciones de goces de un peregrino", de Alberto Garrandés, publicado por Ediciones ICAIC; "Finas hebras", de Nelson Simón, de Ediciones Almargen; "Fresa y chocolate", escrito por Senel Paz y que pertenece a la Colección Sur; "La palabra y la llama. Poesía cubana de tema religioso en la colonia", de Leonardo Sarría, de la Editorial de la Universidad de La Habana.
En esta ocasión se decidió, además, hacer entrega de un Reconocimiento Especial a la antología de teatro Dramaturgia de la Revolución, cuyo concepto y selección fue realizado por Omar Valiño, de Ediciones Alarcos.
De un total de 115 obras nominadas por 16 editoriales, el jurado, presidido por Yolanda Wood e integrado por Laidi Fernández de Juan, Anna Lidia Vega Serova, Jorge Domingo, Edel Morales, Carlos Celdrán, Daniel García, Esteban Llorach y Ahmel Echevarría, decidió premiar los siete títulos referidos.
Durante la actividad de premiación se conocieron las bases de la convocatoria al Premio Anual de la Crítica Literaria 2013, promovido por el estatal Instituto Cubano del Libro, en el cual podrán participar los críticos cubanos, sin distinción de su lugar de residencia, y los extranjeros residentes en la nación caribeña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por opinar