Beijing (PL, China y Cuba concluyeron 2013 con un fructífero intercambio de alto nivel, el impulso de su cooperación en varias esferas y la consolidación de unas relaciones diplomáticas establecidas hace 53 años que abrieron el camino al actual intercambio con Latinoamérica.Esos vínculos bilaterales, a juicio del embajador de Cuba en China, Alberto Blanco, están caracterizados por raíces históricas, continuidad, apoyo mutuo, concertación y cooperación, que han mantenido su esencia y demuestran que "no dependen ni han dependido de coyunturas y conveniencias efímeras".
Importantes dirigentes cubanos viajaron a China en 2013, encabezados por el primer vicepresidente, Miguel Díaz-Canel, el canciller Bruno Rodríguez, el secretario del Consejo de Estado de la República de Cuba, Homero Acosta, y el ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca.
Díaz-Canel, quien sostuvo encuentros con el presidente Xi Jinping y el primer ministro Li Keqiang y conversaciones oficiales con el Vicepresidente de China, Li Yuanchao, presidió en Beijing la sesión inaugural del VII encuentro del Grupo de Trabajo Conjunto Cuba-China para la Cooperación Biotecnológica.
Durante su estancia en esta nación asiática, el dirigente cubano asistió a la inauguración de la nueva planta de la empresa mixta Changheber (China-Cuba) para la producción de vacunas Hib, en la ciudad de Changchun, capital de la provincia de Jilin.
Analistas indicaron que los intercambios de Díaz-Canel en China contribuyeron a consolidar el excelente estado de los vínculos bilaterales tras la visita de Estado del presidente Raúl Castro Ruz en julio de 2012, y destacaron el alto nivel de coincidencias entre países que se consideran referentes mutuos en la construcción socialista.
Otro momento importante de las relaciones sino-cubanas en 2013 fue la celebración de la XXVI sesión de la Comisión Intergubernamental de Cooperación que concluyó con la firma de la agenda económica bilateral para los próximos cinco años.
El ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, quien encabezó la delegación cubana, aprovechó su estancia en esta capital para ofrecer al empresariado chino una amplia información sobre la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM).
Representantes de unas 200 compañías e instituciones chinas acudieron a esa cita en la cual el Ministro cubano explicó las características y ventajas de ese ambicioso proyecto en marcha en Cuba que ofrece ventajas a quienes deseen participar con sus inversiones.
En octubre viajó a China el secretario del Consejo de Estado Homero Acosta, como parte del intercambio de experiencias mutuas sobre la construcción socialista en ambos países, lo cual permitió dar seguimiento a la profundización de esos vínculos a nivel de gobierno, Partidos Comunistas y pueblos.
Estos criterios fueron señalados en una nota oficial sobre una reunión en Beijing de Acosta con el consejero de Estado Yang Jing, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China.
Como culminación de los numerosos intercambios a lo largo de este año en esferas económica, comercial, política y social, el ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla viajó en noviembre a China en visita oficial y fue recibido por el presidente Xi.
El líder de este gigante asiático expresó al canciller cubano que la dirección colectiva de China le concede una gran atención a los vínculos bilaterales y continuará promoviendo invariablemente las relaciones de amistad con Cuba.
Durante su estancia en China invitado por el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, ambos cancilleres sostuvieron conversaciones oficiales, en el curso de la cual el titular chino dijo que las relaciones bilaterales entraron en una nueva etapa de desarrollo integral.
Fuentes oficiales agregaron que Wang reconoció que el alcance y la profundidad de la cooperación sino-cubana en diversas áreas han alcanzado niveles sin precedentes. Rodríguez Parrilla explicó a su anfitrión la marcha del proceso de actualización del modelo económico y social en Cuba y las nuevas oportunidades que se presentan en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel para las inversiones chinas./
También se refirió al ejercicio de la presidencia cubana pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, y subrayó que Cuba apoya activamente y acoge con simpatía el avance experimentado por las relaciones entre China y América Latina y el Caribe.
El Ministro, quien ofreció una conferencia en el Instituto de Estudios Internacionales de China, se entrevistó asimismo con otros dirigentes chinos, entre ellos Wang Jiarui, jefe del Departamento Internacional del Comité Central del Partido Comunista de China y vicepresidente de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino, y con el Consejero de Estado Yang Jiechi.
Al pasar revista a más de medio siglo de relaciones, el embajador Alberto Blanco subrayó la continuidad de estos lazos que han nutrido varias generaciones de ambos países y que se refleja en una cooperación mutuamente beneficiosa.
Para el diplomático, Cuba contribuye modestamente a la "loable meta del Sueño Chino, ayudando a la formación de más de tres mil jóvenes de este país como futuros médicos, maestros, enfermeros, licenciados en idioma español y turismo".
Recordó que miles de pacientes chinos se han beneficiado ya de tratamientos con los productos más avanzados de la internacionalmente reconocida biotecnología cubana o han sido atendidos por especialistas de alto nivel de nuestro país.
En resumen, el diplomático augura el avance de estas entrañables relaciones que han madurado a lo largo de los años para consolidarse y expandirse aún más.
Importantes dirigentes cubanos viajaron a China en 2013, encabezados por el primer vicepresidente, Miguel Díaz-Canel, el canciller Bruno Rodríguez, el secretario del Consejo de Estado de la República de Cuba, Homero Acosta, y el ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca.
Díaz-Canel, quien sostuvo encuentros con el presidente Xi Jinping y el primer ministro Li Keqiang y conversaciones oficiales con el Vicepresidente de China, Li Yuanchao, presidió en Beijing la sesión inaugural del VII encuentro del Grupo de Trabajo Conjunto Cuba-China para la Cooperación Biotecnológica.
Durante su estancia en esta nación asiática, el dirigente cubano asistió a la inauguración de la nueva planta de la empresa mixta Changheber (China-Cuba) para la producción de vacunas Hib, en la ciudad de Changchun, capital de la provincia de Jilin.
Analistas indicaron que los intercambios de Díaz-Canel en China contribuyeron a consolidar el excelente estado de los vínculos bilaterales tras la visita de Estado del presidente Raúl Castro Ruz en julio de 2012, y destacaron el alto nivel de coincidencias entre países que se consideran referentes mutuos en la construcción socialista.
Otro momento importante de las relaciones sino-cubanas en 2013 fue la celebración de la XXVI sesión de la Comisión Intergubernamental de Cooperación que concluyó con la firma de la agenda económica bilateral para los próximos cinco años.
El ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, quien encabezó la delegación cubana, aprovechó su estancia en esta capital para ofrecer al empresariado chino una amplia información sobre la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM).
Representantes de unas 200 compañías e instituciones chinas acudieron a esa cita en la cual el Ministro cubano explicó las características y ventajas de ese ambicioso proyecto en marcha en Cuba que ofrece ventajas a quienes deseen participar con sus inversiones.
En octubre viajó a China el secretario del Consejo de Estado Homero Acosta, como parte del intercambio de experiencias mutuas sobre la construcción socialista en ambos países, lo cual permitió dar seguimiento a la profundización de esos vínculos a nivel de gobierno, Partidos Comunistas y pueblos.
Estos criterios fueron señalados en una nota oficial sobre una reunión en Beijing de Acosta con el consejero de Estado Yang Jing, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China.
Como culminación de los numerosos intercambios a lo largo de este año en esferas económica, comercial, política y social, el ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla viajó en noviembre a China en visita oficial y fue recibido por el presidente Xi.
El líder de este gigante asiático expresó al canciller cubano que la dirección colectiva de China le concede una gran atención a los vínculos bilaterales y continuará promoviendo invariablemente las relaciones de amistad con Cuba.
Durante su estancia en China invitado por el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, ambos cancilleres sostuvieron conversaciones oficiales, en el curso de la cual el titular chino dijo que las relaciones bilaterales entraron en una nueva etapa de desarrollo integral.
Fuentes oficiales agregaron que Wang reconoció que el alcance y la profundidad de la cooperación sino-cubana en diversas áreas han alcanzado niveles sin precedentes. Rodríguez Parrilla explicó a su anfitrión la marcha del proceso de actualización del modelo económico y social en Cuba y las nuevas oportunidades que se presentan en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel para las inversiones chinas./
También se refirió al ejercicio de la presidencia cubana pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, y subrayó que Cuba apoya activamente y acoge con simpatía el avance experimentado por las relaciones entre China y América Latina y el Caribe.
El Ministro, quien ofreció una conferencia en el Instituto de Estudios Internacionales de China, se entrevistó asimismo con otros dirigentes chinos, entre ellos Wang Jiarui, jefe del Departamento Internacional del Comité Central del Partido Comunista de China y vicepresidente de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino, y con el Consejero de Estado Yang Jiechi.
Al pasar revista a más de medio siglo de relaciones, el embajador Alberto Blanco subrayó la continuidad de estos lazos que han nutrido varias generaciones de ambos países y que se refleja en una cooperación mutuamente beneficiosa.
Para el diplomático, Cuba contribuye modestamente a la "loable meta del Sueño Chino, ayudando a la formación de más de tres mil jóvenes de este país como futuros médicos, maestros, enfermeros, licenciados en idioma español y turismo".
Recordó que miles de pacientes chinos se han beneficiado ya de tratamientos con los productos más avanzados de la internacionalmente reconocida biotecnología cubana o han sido atendidos por especialistas de alto nivel de nuestro país.
En resumen, el diplomático augura el avance de estas entrañables relaciones que han madurado a lo largo de los años para consolidarse y expandirse aún más.
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