Nueva mirada de Cuba hacia sus mayores

El 18,3 por ciento de la población cubana actual tiene 60 años y más.

La Habana, 2 may.- Las alertas desde la demografía sobre la urgencia de estrategias de cara al envejecimiento poblacional, al parecer encontraron oídos receptivos en las autoridades del país, donde 18,3 por ciento de la gente tiene 60 años y más.

El Ministerio de Salud Pública desarrolla un programa de medidas para la atención a este creciente segmento como parte de las transformaciones económicas que emprende el país desde 2008, transcendió esta semana en un seminario internacional.

Este proyecto está en correspondencia con el texto programático de la reforma del presidente Raúl Castro, que aspira a “brindar particular atención al estudio e implementación de estrategias en todos los sectores de la sociedad para enfrentar los elevados niveles de envejecimiento de la población”.

Según el doctor Alberto Fernández, de la cartera de salud, el hecho de que las personas mayores serán 30 por ciento en 15 años conlleva a cambios en las necesidades de atención y en la distribución de los servicios sanitarios.

Esto, además, supone mayor complejidad en las soluciones porque se eleva la demanda de acciones multidisciplinarias, más tiempo de dedicación de los equipos de salud a las personas adultas mayores y se acumulan enfermedades en un mismo paciente, entre otros nuevos escenarios.

A la par, se eleva la prevalencia de enfermedades crónicas y discapacidad y disminuye la capacidad de las redes informales para suplir la falta de protección social institucional, destacó el galeno en el XII Seminario Internacional Longevidad Activa y Satisfactoria, que sesionó en La Habana esta semana.

Desde hace más de una década, especialistas en Demografía realizan estudios y sugerencias sobre el envejecimiento poblacional, fundamentalmente relacionados con la necesidad de adecuar el sistema de atención de salud a las características de estas personas.

El alcance de las estructuras y servicios vigentes será limitado en el escenario futuro.

Según datos del Ministerio de Salud Pública, para la atención diurna en Cuba funcionan 240 casas de abuelos con 7.526 plazas con un índice ocupacional de 93 por ciento, así como 126 hogares de ancianos, con apenas 9.598 camas, donde las personas de la tercera edad residen definitiva o temporalmente.

Sin embargo, esas capacidades resultan insuficientes en una nación que registra cerca de dos millones de personas de este grupo etario.

El programa –en marcha desde finales de 2013 y que se extenderá hasta 2016-, proyecta crear 140 casas de abuelos nuevas, de las cuales 79 estarán en La Habana.
En la capital reside 20 por ciento de los 2,2 millones de habitantes que tienen más de 60 años, dijo Fernández.

Estas nuevas instalaciones, con 40 capacidades promedio, elevarían a 375 las casas de abuelos con 13.532 capacidades en total y responderían a las necesidades para atender a ancianos con discapacidad. En general, apoyaría el cuidado de 20.144 adultos mayores, que representan uno por ciento del total de la población adulta mayor.

En La Habana se implementarán también de forma experimental las casas de abuelos para personas con discapacidad, que acogerán además a adultos mayores con deterioro cognitivo y demencia.

Para la atención de este segmento, el país cuenta con 279 especialistas en Geriatría y Gerontología, 137 residentes en formación de la especialidad y funcionan 13.801 círculos (clubes) de abuelos en el nivel de atención primaria de salud, a los que acude a nivel comunitario 40 por ciento de los adultos mayores. (2014)