Explorar el Cañón del Río Santa Cruz, ubicado en la Sierra del Rosario, provincia de Artemisa, puede resultar un duro desafío, pero conocer este lugar es una experiencia inolvidable y enriquecedora
Fotorreportaje: CLAUDIA RODRÍGUEZ HERRERA
15 de septiembre de 2014
Fotorreportaje: CLAUDIA RODRÍGUEZ HERRERA
15 de septiembre de 2014
Explorar el Cañón del Río Santa Cruz, ubicado en la Sierra del Rosario, provincia de Artemisa, puede resultar un duro desafío para quien no está acostumbrado a largos recorridos por pendientes, cimas, depresiones y zonas en las que el lodo cubre hasta las rodillas, o lugares donde la única vía de acceso es atravesando el río o bordeando sus márgenes, entre furnias y salientes. Quizás lo mejor para alcanzar la meta sin amilanarse es seguir el consejo de los voluntarios guías locales, que, con esa sabiduría natural propia de la gente de campo, aconsejan: “No mires muy adelante; enfócate en cada paso que das”.
Aceptar la recomendación tiene su premio, pues cada mirada atenta a nuestro alrededor sorprende con una nueva y emocionante revelación: paisajes majestuosos, plantas y flores exóticas, insectos llenos de colorido y aves endémicas poco acostumbradas a la presencia humana, que se convierten en dóciles modelos fotográficos. Conocer este lugar es una experiencia inolvidable, enriquecedora; adentrarse en sus parajes es descubrir un mundo fascinante, donde el tiempo transcurre de manera diferente y la naturaleza sobrecoge y nos hace sentir a la vez parte de ella. El Cañón del Río Santa Cruz es magia, belleza, asombro y vida.
Aceptar la recomendación tiene su premio, pues cada mirada atenta a nuestro alrededor sorprende con una nueva y emocionante revelación: paisajes majestuosos, plantas y flores exóticas, insectos llenos de colorido y aves endémicas poco acostumbradas a la presencia humana, que se convierten en dóciles modelos fotográficos. Conocer este lugar es una experiencia inolvidable, enriquecedora; adentrarse en sus parajes es descubrir un mundo fascinante, donde el tiempo transcurre de manera diferente y la naturaleza sobrecoge y nos hace sentir a la vez parte de ella. El Cañón del Río Santa Cruz es magia, belleza, asombro y vida.
Pequeños saltos del río Santa Cruz
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Las conchas de los ligus son de las más bellas, variablemente coloreadas y de mayor tamaño entre los moluscos terrestres cubanos
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Estas babosas son conocidas localmente como bistec de tierra, por ser apreciadas por algunos de sus pobladores como un auténtico manjar culinario
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Majá amarillo. Es un reptil ovovivíparo; las crías nacen vivas, después que los huevos eclosionan en el interior de la madre
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Peucetia viridans, o lince verde, puede correr y saltar fácilmente; una de sus características principales son las grandes espinas de sus patas; constituye una especie muy beneficiosa para el control de plagas en los cultivos
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Las regiones montañosas son las más ricas en orquídeas; en Cuba se han reportado más de 300 especies, muchas de ellas en peligro de extinción
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Curujey o planta del caminante; el agua almacenada en sus hojas es usada para calmar la sed; a ella se refirió nuestro Apóstol cuando dijo “de un curujey, prendido a un jobo, bebo agua clara”
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La casa de Tomás es conocida por todos los expedicionarios que visitan esta zona; la hospitalidad y grandeza humana de este sencillo hombre y su familia quedan grabadas en el recuerdo
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Esta montaña es conocida como “la tortuga”, por la similitud que posee con la silueta de ese reptil
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Los hermosos colores de las mariposas se deben a las escamas o diminutas células modificadas que les cubren las alas y el cuerpo, de ahí el nombre de lepidópteros, denominación de origen griego que significa “alas con escamas”
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Las libélulas indican siempre cercanía de agua; no pican a los seres humanos; de hecho son valiosas como depredadores, porque controlan las poblaciones de insectos como los mosquitos |
Brazo seco, río Santa Cruz
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Cartacuba; esta pequeña especie está considerada una "joya de la ornitología cubana", otra de las aves endémicas del archipiélago, que no se puede criar en jaulas porque su alimentación es estrictamente insectívora y si se le encierra muere | La niebla es característica del paisaje del Cañón del Río Santa Cruz, ya sea al amanecer, en las noches, o después de un aguacero |
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