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miércoles, 6 de mayo de 2015

Activistas del mundo acompañan jornada contra la homofobia



La Habana, 6 may.- La inclusión por vez primera de la única central sindical del país, una celebración de amor para parejas de igual sexo y la presencia de líderes religiosos de otras naciones, distinguen la VIII Jornada Cubana contra la Homofobia, que se extenderá hasta el próximo 23 de mayo. 

Mariela Castro, directora del estatal Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), principal impulsor de la jornada dedicada esta vez al empleo, dijo la víspera en conferencia de prensa que se busca sensibilizar a la población sobre los derechos laborales de las personas gay, lesbianas, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI).

Este propósito “no se logra solo por ley, sino con un trabajo educativo y comunicacional permanente”, remarcó.

Aunque en el país se trabaja en estos temas desde hace años, persisten en la sociedad tabúes y prejuicios hacia la comunidad LGBTI así como atraso legislativo en el reconocimiento de los derechos de esta franja poblacional.

A juicio de Castro Espín, un momento de visibilidad como este es la única manera de que las personas discutan, se informen, reflexionen e interesen en estos problemas, que “si no los ponemos sobre la mesa, la población no es consciente de ellos ni de los grandes sufrimientos, injusticia y exclusión social que generan”.

Al seminario teórico de la jornada, informó, fueron convocados un centenar de dirigentes sindicales cubanos así como el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, integrantes del secretariado y trabajadores sociales que cursan un postgrado sobre estos temas, donde reciben herramientas que les permitirán un desempeño más profundo y certero en las comunidades.

La directora del Cenesex, del Ministerio de Salud Pública, recordó que aunque en el nuevo Código del Trabajo –vigente desde 2014- se logró por primera vez incluir la no discriminación por orientación sexual, “no logramos que se incluyera también el concepto de identidad de género”.

Castro Espín indicó que si existen los conceptos y se utilizan en principios éticos fundamentales, hay que emplearlos “sobre todo cuando encierran derechos y la posibilidad de respetar la igualdad de oportunidades para todas las personas”.

La inauguración de la exposición fotográfica del artista estadounidense Byron Motley marcó el inicio de la VIII Jornada cubana de lucha contra la homofobia y la transfobia. Foto: Jorge Luis Baños

La no exclusión está en la política y esta debe aplicarse en leyes y acciones concretas que estamos promoviendo, enfatizó.

Y recalcó que el centro continúa trabajando para promover que se incorporen en otras leyes el respeto a la libre y responsable orientación sexual e identidad de género.

La campaña por la inclusión en los espacios de trabajo sucede a la que durante dos años estuvo dirigida a las familias, por tratarse de los ámbitos donde según el Cenesex se concentran las mayores vulnerabilidades para la comunidad LGBTI.

La sexóloga lamentó que todavía el parlamento no haya analizado la propuesta de nuevo Código de Familia, que desde hace años propone la unión legal entre personas del mismo sexo, entre otros avances.

“No perdemos las esperanzas porque sabemos que este trabajo (la campaña sobre la familia) contribuyó a sensibilizar a la población a todos los niveles, incluso los de decisión, para que en algún momento estos temas se recojan no solo en el código de familia sino en todo el sistema jurídico y legislativo”, valoró.

Castro se refirió a que en las actividades del 9 de mayo que suceden la tradicional conga contra la homofobia y transfobia, no pudieron incluir una boda, pero “quisimos hacer una modestísima celebración de amor con algunos líderes religiosos que siempre nos acompañan”, siguiendo una experiencia observada en junio de 2014 durante la jornada por el orgullo gay en la ciudad canadiense de Toronto.

Según Manuel Vázquez, del grupo de asesoría jurídica del Cenesex, acompañan la jornada diferentes grupos, organizaciones sindicales de la salud y la construcción y personalidades, entre ellos activistas como Diana Sacayán, de Argentina, y Federico Graña, de Uruguay.

Están presentes en Cuba, entre otros, una representación de la Iglesia Católica Independiente de Toronto, Canadá, incluido el arzobispo Roger LaRade, por primera vez en la nación caribeña, quien expresó su satisfacción de poder compartir e intercambiar con el Cenesex.

“Queremos que se sepa que existen iglesias y líderes religiosos que tienen una actitud diferente hacia este tema”, dijo.


La muestra fotográfica “Continuing Forward” cada año reúne instantáneas de la jornada precedente.

Silvia de la Fe González, de origen cubano y residente en Canadá, de los franciscanos de la Anunciación del Infinito Amor de Dios, explicó que apoya el trabajo desarrollado por el Cenesex.

“El rechazo de una madre, una familia, una comunidad, una sociedad, es una de las cosas más fuertes del mundo. Falta entendimiento teológico sobre el tema y en eso queremos ayudar”, indicó a la Redacción IPS Cuba.

“Si Cristo estuviera en la Tierra no los separaría, sino que los acogería como niños”, destacó la futura sacerdote.

Aunque algunas personas desean ver una jornada más comprometida con fuertes reclamos de los derechos de las personas LGBTI, otras se sienten satisfechas con la celebración.

“Estamos contentos porque con el tiempo el tema y la jornada han ido evolucionando satisfactoriamente y en esta, por ejemplo, tenemos el apoyo de algunas iglesias en la lucha contra la homofobia y la transfobia”, compartió Angelis Carmen, transexual que trabaja en el Cenesex.

El Programa Nacional de Educación y Salud Sexual, que coordina la entidad, desarrolla una estrategia de educación y comunicación permanente, con acciones que responden a objetivos priorizados donde participan organizaciones del Estado y la sociedad civil. (2015)

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