Por Jorge Petinaud Martínez *
Moscú (PL) Los pilotos rusos denominan cariñosamente "patito" por su forma de morro a los aviones Su-34, pero su eficacia en los ataques contra el terrorista Ejército Islámico (EI) en Siria convierten a este "animalito" en una temible fortaleza.
Ígor Korotchenko, director del Centro de Análisis del Comercio Mundial de Armas, opinó que el exitoso desempeño de estos cazabombarderos en la guerra contra el terrorismo en el Medio Oriente incrementará la demanda mundial de estos ingenios.
Varias escuadrillas de Su-34 podrían ser vendidos en el próximo quinquenio, estimó en declaraciones a la agencia de noticias Novosti.
Situó entre los posibles compradores a Kazajstán, Turkmenistán, Uzbekistán, Vietnam, Argelia e Iraq, que ya utiliza los Su-25 en la lucha contra el EI dentro de su territorio.
Mencionó también entre los países interesados en estas fortalezas volantes a Uganda y Nigeria, que combaten contra Boko Haram, y Etiopía, poseedora de aviones Su-27, requeridos de modernización.
En la operación antiterrorista solicitada a Moscú por el presidente sirio, Bashar al-Assad, el bombardero táctico biplaza Su-34 que por sus características pertenece a la generación de aviones 4+ ha tenido un destacado papel.
HÍBRIDO DE CAZA Y BOMBARDERO
Protegida por una armadura de titanio de hasta 17 milímetros de espesor en el área asignada a la tripulación y las partes más importantes de la aeronave, este tipo de ingenio es también conocido como "el tanque volante ruso".
Fuentes del Ministerio de Defensa informaron que este híbrido de caza y bombardero opera con la misma eficacia a la luz del día, en la oscuridad de la noche, en cualquier condición meteorológica y con igual facilidad puede realizar acrobacias aéreas, lanzar misiles dirigidos y destruir objetivos muy protegidos en tierra.
Con estas naves, el Kremlin reemplaza en las Fuerzas Aeroespaciales a los bombarderos tácticos de la anterior generación de Sujoi Su-24 (324 aviones) e incluso a los de largo alcance Tu-22M3, de mayor tamaño.
El director de la Corporación Aeronáutica Unificada de Rusia, Vladimir Mijáilov, por su parte, destacó que por ser mayores las prestaciones del SU-34 que sus antecesores, serán necesarias menos unidades para garantizar las mismas misiones.
CARATERÍSTICAS Y EFICACIA
A partir de la familia de cazas multifuncionales Su-27 comenzó el desarrollo de los Su-34 a mediados de los años 80 en la entonces Unión Soviética.
Los nuevos aparatos son ligeramente menos maniobrables que su antecesor, y su velocidad (mil 900 kilómetros por hora) es inferior a la de dos mil 420 kilómetros por hora de los cazas de esta familia.
Sin embargo, logra un mayor peso de despegue (39 toneladas) y su autonomía operacional llega a los cuatro mil kilómetros.
A diferencia de la mayor parte de las naves biplaza, donde el piloto y el artillero se ubican uno tras otro, los tripulantes del Su-34 se sitúan hombro con hombro, lo cual según las fuentes mejora la ergonomía e incrementa la interacción entre ambos.
Uno de los grandes atractivos de este ingenio es cómo combina a la perfección las posibilidades de un caza pesado con las funciones de un bombardero.
Indican los especialistas que sobre todo esto resulta evidente para los pilotos, quienes hasta la altura de 11 mil metros apenas sienten sobrecargas y en la mayor parte de la ruta no necesitan emplear la máscara de oxígeno.
Equipada con todo lo necesario para cumplir misiones, la cabina de la nave está acondicionada para atacar objetivos a grandes distancias e incluye "un cuarto de baño" y un microondas, además de suficiente espacio para ponerse de pie y relajarse.
Desde el punto de vista de la guerra radioelectrónica, una característica única en los Su-34 es que cuentan con un segundo radar para "proteger" el hemisferio trasero contra disparos de cohetes guiados de cazas enemigos.
En cuanto a su artillería, esta fortaleza volante puede portar hasta ocho toneladas de carga combativa en 12 puntos de suspensión externa, que incluye bombas y misiles de ataque a tierra, además de un amplio arsenal para el combate aéreo.
Sus cohetes guiados aire-aire de corto alcance R-73 pueden destruir objetivos en alturas que oscilan entre 200 metros y 20 kilómetros con sobrecargas que los técnicos denominan de hasta 12G (la velocidad máxima de los objetivos impactados es de dos mil 500 kilómetros por hora).
Los misiles de mediano alcance RVV-AE (AA-12), en tanto, pueden interceptar blancos que vuelen a velocidades de hasta tres mil 600 kilómetros por hora y una altura de entre 200 metros y 25 kilómetros, o sea, este avión puede derribar naves que se encuentren 10 kilómetros por encima.
En su versión más reciente, este cohete tiene un alcance de 150 kilómetros, informaron las fuentes.
Un estudio del Centro de Análisis del Comercio Mundial de Armas publicado recientemente señala que las exportaciones de aviones Sujoi entre 2011 y 2018 podrá totalizar 242 unidades, lo que representaría el segundo mayor resultado de ventas planetario, detrás de Lockheed Martin con 250 naves.
Según el pronóstico, Boeing debe comercializar 120 aviones, con lo cual se ubicará en la tercera posición.
La eficacia ratificada por los Su-34 en las acciones contra el EI y otros grupos terroristas en Siria, sin duda, contribuirá al incremento de la demanda de los aviones de combate Sujoi en todo el mundo.
*Corresponsal de Prensa Latina en Rusia.
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