Una información oficial descarta que a corto plazo aumenten las posibilidades de acceso a la Red de redes.

Imprimir artículo

IPS.

 La estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (Etecsa) confirmó que el cable submarino de fibra óptica que enlaza a este país con Venezuela y Jamaica está operativo desde agosto de 2012 y actualmente se ejecutan pruebas de calidad de tráfico de Internet para normalizar esa vía de comunicación.

En una información publicada en el diario oficial Granma, Etecsa advirtió, sin embargo, que una vez concluido ese proceso de pruebas, “la puesta en operación del cable submarino no significará que automáticamente se multipliquen las posibilidades de acceso” a la Red de redes.

“Será necesario ejecutar inversiones en la infraestructura interna de telecomunicaciones y aumentar los recursos en divisas, destinados a pagar el tráfico de Internet con el propósito de lograr el crecimiento paulatino de un servicio que brindamos hoy en su mayoría gratuitamente y con objetivos sociales”, agregó el texto.

El cable submarino tocó costas cubanas en 2011 y responde a un proyecto entre La Habana y Caracas para lograr una mayor independencia en las comunicaciones del Caribe y América Central. En 2012, el ministro venezolano de Ciencia, Tecnología e Innovación, Jorge Arreaza declaró a la prensa que el cable se encontraba operativo.

Pero las autoridades cubanas mantuvieron silencio al respecto y tampoco se observaron mejoras en la conectividad local. Al romper su hermetismo sobre el tema, Etecsa aclaró que el sistema de telecomunicaciones ALBA-1 estuvo inicialmente cursando tráfico de voz correspondiente a telefonía internacional.

Cuba dispone actualmente de un ancho de banda mínimo de 323 megabits por segundo, la capacidad permitida por la vía satelital. Según fuentes oficiales, el cable de fibra óptica deberá multiplicar por 3.000 las velocidades actuales de transmisión y abaratar los costos de operación en 25 por ciento, aunque no cesarán los servicios satelitales.(2013)