Más de 44.000 cubanos llegaron a Estados Unidos en lo que va del año fiscal, principalmente a través de los cruces fronterizos con México.
SOCIEDAD Redacción IPS Cuba 3 agosto, 2016
El presidente Juan Manuel Santos (derecha), que aparece junto al secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, en una foto tomada en La Habana, afirmó que los cubanos varados en Turbo serán deportados a la isla o al país de donde vinieron. Foto: Archivo IPS-Cuba
La Habana, 3 ago.- El anuncio de Colombia de deportar a cientos de cubanos hacinados en Turbo, imita decisiones de gobiernos de la región, que cerraron sus fronteras al paso masivo de cubanas y cubanos con rumbo a Estados Unidos.
De hecho, Bogotá informó este lunes la expulsión de 40 cubanos de dicha localidad del noroeste colombiano y próxima a la frontera con Panamá, algunos de ellos hacia Ecuador, según reportó la televisora NTN24.
El mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, afirmó que los cubanos varados allí serán deportados a la isla o al país de donde vinieron, dado el carácter irregular de su estatus migratorio.
Contexto migratorio
En julio, el gobierno de Ecuador deportó a 121 cubanos que desde ese país, intentaban llegar Estados Unidos cruzando naciones centro y sudamericanas.
Previamente, los gobiernos de Panamá, Costa Rica y Nicaragua, cerraron sus fronteras, por donde se había establecido un amplio corredor para miles de cubanas y cubanos que ansían llegar a Estados Unidos.
Desde 1966, Washington mantiene la Ley de Ajuste Cubano, así como la llamada política de “pies secos-pies mojados”, que otorgan a los ciudadanos de la isla caribeña un tratamiento diferenciado y único, al admitirlos de forma inmediata y automática.
Según el gobierno de La Habana, ello resulta un estímulo para la emigración ilegal y el aumento del tráfico de personas.
El 20 de julio de 2016 la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras estadounidense informó que del 1 de octubre de 2015 al 11 de julio de 2016, 44.353 cubanos llegaron a Estados Unidos principalmente a través de los cruces fronterizos con México, aunque también por otros puertos y aeropuertos en Miami y Tampa (Florida), Búfalo (Nueva York) y Seattle (Washington).
“Estamos en diálogo con los inmigrantes (…) para ver si prefieren regresar a sus países de origen o al país de donde provienen, para irlos deportando porque están aquí ilegalmente”, afirmó Santos.
El presidente agregó que se está haciendo un esfuerzo mayor para cerrar los puntos por donde están entrando los emigrantes ilegales.
“Estamos capturando a las personas que están facilitando esa trata de personas, porque eso es lo que es este fenómeno, una trata de personas, los famosos “coyotes”, hemos venido capturando a muchos de ellos”, indicó el gobernante.
Por su parte, la canciller María Ángela Holguín calificó de “compleja” esta situación humanitaria y confirmó la voluntad de Colombia de evitar convertirse en corredor migratorio.
Aunque en los últimos días las autoridades reportaron la presencia de unos 1.300 cubanos en Turbo y sus alrededores, otras fuentes hablan de más de 2.400.
Muchos no se han dejado censar por las autoridades colombianas por miedo a la deportación y otros han sido acogidos o escondidos en casas de pobladores, aseguraron observadores.
La nación sudamericana deportó en los últimos dos meses 5.800 migrantes irregulares, en su mayoría de nacionalidad haitiana y cubana, según Migración Colombia.
Un número creciente de cubanos quedaron estancados en Turbo desde mediados de mayo pasado por el refuerzo de la vigilancia fronteriza en Panamá, Costa Rica y Nicaragua.
Su objetivo es llegar a los Estados Unidos para acogerse a los privilegios de la Ley de Ajuste Cubano (1966).
Situación humanitaria
Según la Defensoría del Pueblo de Colombia, 1.273 cubanos, entre ellos cerca de 300 menores de edad y once embarazadas, están alojados en una bodega y sus alrededores.
William González, funcionario de esa entidad, explicó a medios internacionales que la semana pasada salieron de la localidad entre 270 y 300 cubanos, presumiblemente con rumbo hacia Estados Unidos a través de la selva.
En el grupo, hay universitarios, técnicos y trabajadoras del hogar que han entrado ilegalmente por Venezuela, Brasil, Ecuador y Guyana, señaló.
Según la Defensoría, los emigrantes tienen un “alto riesgo en salubridad” por la presencia de insectos y roedores dentro de los improvisados albergues y la “evidente cercanía entre el lugar de preparación de los alimentos y el sitio para la disposición de desechos en estado de descomposición”.
La situación se agrava porque solo disponen de cuatro baterías sanitarias para todos ellos, añadió la información.
De acuerdo con Radio Caracol, varias personas, sobre todo niños y bebés, han enfermado con gripe, fiebre y diarreas.
Ante esta situación, la semana pasada la Alcaldía de Turbo decretó el estado de calamidad pública.
Carta a Barack Obama
Los emigrantes cubanos en Turbo pidieron, el 29 de julio, al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que facilitara su ingreso de manera segura a Estados Unidos.
“Nos dirigimos a usted pidiendo por favor que intervenga y use sus medios para que podamos llegar de una manera segura a su país, sin tener que arriesgar nuestras vidas en la selva en manos de traficantes de personas”, indicaron en una carta abierta.
El texto escrito a Obama, “en nombre de los 2.432 cubanos varados en la frontera norte de Colombia”, criticó “circunstancias infrahumanas” de vida por falta de comida, hacinamiento, inseguridad y “violencia psicológica constante” ante el temor de deportación por parte de las autoridades colombianas.
“No se trata de una solicitud migratoria sino una intervención humana al respeto e integridad de un grupo de familias que buscan el derecho a vivir dignamente”, subrayó la misiva con copia a la comunidad cubana en Estados Unidos, la Organización de Estados Americanos, Naciones Unidas y la Iglesia Católica. (2016)
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