Respuesta confeccionada por la Comisión de Asuntos Constitucionales y Jurídicos de la Asamblea Nacional que le
fue entregada a Osvaldo Payá acerca de su proyecto el 18 de noviembre del 2002 y enviada posteriormente por correo el 26
de noviembre del mismo año.
Ciudad de la Habana, 1 de noviembre del 2002 "Año de los
Héroes Prisioneros del Imperio"
Dr. Ricardo Alarcón de Quesada Presidente Asamblea Nacional
del Poder Popular
Compañero:
En respuesta al documento que nos trasladó, en virtud del
artículo 67 del Reglamento de la Asamblea Nacional del Poder
Popular, que dice denominarse "Proyecto Varela", la Comisión
de Asuntos Constitucionales y Jurídicos, a tenor del
artículo 68 del mencionado Reglamento emite las siguientes:
CONSIDERACIONES
1. Elementos Formales:
1. Atendiendo a que el documento en cuestión pretende
presentarse como una iniciativa legislativa amparada en la
facultad constitucional del inciso g) artículo 88, es
oportuno significar que no cumple con los requisitos de ley
establecidos en el artículo 64 del Reglamento de la Asamblea
Nacional del Poder Popular, toda vez que la petición
formulada se acompaña con un grupo de papeles que dicen
consignar datos identificativos de ciudadanos, cuya
identidad y veracidad no consta acreditada legalmente, dado
que no se ha cumplido el requerimiento legal para estos
casos, cual es que, mediante declaración jurada ante
notario, los ciudadanos acrediten su identidad personal
mediante los datos del carné de identidad como documento
idóneo y probatorio de la individualización de cada una de
estas personas que avalan este pedimento, además de que no
se acredita su no invalidación para ejercer el sufragio
activo, lo que exige conforme el artículo 132 de la
Constitución de la República, que no se halla incapacitado
mentalmente ni inhabilitado judicialmente por causa de
delito, elementos estos que requieren de la presentación de
las pruebas documentales pertinentes para que el Notario, en
su función de fedatario público, los consigne en el
documento público, en el caso que nos ocupa, la declaración
jurada, que se exige, pues en ningún momento, ni la
Constitución de la República ni el Reglamento de la Asamblea
Nacional del Poder Popular establece la recolección de
firmas, cualquiera que fuese su número, para promover la
iniciativa legislativa.
2. Otro aspecto que desatiende y no considera en debida
cuenta el documento que pretende convertirse en iniciativa
legislativa, lo es que viene obligado a desarrollar en el
escrito de fundamentación que le acompañe los particulares
que se recogen taxativamente en los apartados 1 a 7 del
artículo 63 del Reglamento de este supremo órgano. El
documento que se adjunta y que denominan Fundamentación, no
es sino una relación fáctica y en oportunidades errática en
redacción y contenido de la pretensión, sin desarrollar los
requisitos de ley para su elaboración, así como la
exposición de posiciones y criterios o la simple solicitud
de la promulgación de una ley para crear empresas privadas
por parte de cubanos, sin constar ningún género de
fundamentación al respecto, o como es el caso de la
modificación al Código Penal, sin exposición alguna de los
requerimientos de ley.
3. Resulta tan apartada de lo que debe ser la
fundamentación debida y seria de un proyecto de ley que ni
siquiera aspectos tan relevantes en el proceso legislativo
como el rango normativo de la disposición jurídica propuesta
o los mecanismos necesarios que garanticen la aplicabilidad,
efectividad, cumplimiento y el control de la disposición
jurídica que se presenta, son abordados. Entremezcla en
total desarmonía y carencia de secuencia lógica,
consideraciones y posiciones totalmente extrañas al proceder
legislativo.
El no cumplimiento de los requisitos de ley exigidos resulta
elemento suficiente para rechazar de plano la pretensión
formulada, no obstante la Comisión considera oportuno no
detenerse ante estos aspectos y entrar a un análisis del
contenido de la misma.
II. Elementos de Contenido:
1. El documento en análisis mezcla en total desconcierto y
carencia de rigor diferentes instituciones de rango
constitucional, de distinta tramitación. Tal es el caso de
la solicitud a la Asamblea Nacional del Poder Popular "que
someta a consulta popular, mediante referendo ...las
propuestas".
Esto requiere un análisis.
La consulta popular y el referendo son dos instituciones
constitucionales potestativas de la Asamblea Nacional
(incisos (b) y (u) del artículo 75 de la Constitución de la
República) bien definidos uno de otro. Mientras que la
consulta popular consiste en someter al pueblo que opine y
aporte ideas sobre un tema legislativo específico,
reservándose la Asamblea la decisión definitiva sobre la
norma en tramitación, vgr: en 1994 la Asamblea Nacional del
Poder Popular, como expresión de la activa participación y
presencia del pueblo en la adopción de decisiones
trascendentales para la vida en sociedad, en ejercicio de
cabal democracia, convocó a consulta popular, las medidas en
el orden financiero y tributario necesarias a implementar en
la nación como consecuencia de la seria situación económica
que se imponía al país por el doble bloqueo que genera, el
impuesto por el gobierno de los Estados Unidos de América y
el que se deriva del derrumbe del campo socialista.
El referendo somete la norma en debate a la resolución
definitiva de los ciudadanos, vgr: el referendo convocado en
1976 para la aprobación de la vigente Constitución de la
República, mediante el voto afirmativo del 95,7% de los
electores de la nación.
Luego, como se constata, es desacertado interesar que se
"someta a consulta popular mediante referendo", como se
expresa en el documento, pues son dos instituciones con
diferentes soluciones.
En definitiva tanto el referendo como la consulta popular,
son expresiones de la democracia directa ejercida por
nuestro pueblo, son facultades potestativas de la Asamblea
Nacional y la Comisión considera oportuno aportar que en
este sentido estima, que se reservan a decisiones de
especial transcendencia.
2. La acción legislativa, acto riguroso y solemne, exige de
quien ejercita la iniciativa legislativa la presentación de
un anteproyecto que reúna en sí todos los presupuestos de
una ley; primero su título, seguido de los Por Cuantos que
la presiden y luego los basamentos de derecho en que se
sustenta los que se exponen en su Por Tanto, luego de lo
cual viene el cuerpo normativo, conformados armónicamente,
según el caso, por los títulos, capítulos y secciones e
integrados estos por los artículos, apartados e incisos y
luego las disposiciones transitorias y finales que
garantizan la inserción de la ley propuesta con el resto del
ordenamiento legal del país.
La Comisión, al analizar el documento presentado a su
consideración y en correspondencia con el artículo 69 del
Reglamento, aprecia, a simple vista, que el mismo carece de
rigor técnico y refleja en total desarmonía los temas que
pretende abordar, acentuando una carencia de la forma de un
anteproyecto de ley. Tal vez pudiera aducirse por sus
redactores su condición profana en términos legales, lo que
no es procedente, ya que en las citas de normas legales que
se invocan y en los análisis, si bien lineales y pocos
profundos, que hacen en la fundamentación, apuntan en la
dirección de que personas con un conocimiento elemental del
derecho trabajaron en esta redacción, así como que cualquier
persona de la mera lectura de las leyes, incluso de las
normas que analizan revocar o modificar, comprenden
fácilmente la forma en que se redacta y presenta un proyecto
legislativo.
3. Otro aspecto que resulta oportuno significarse por la
Comisión lo es el hecho que cada norma legal que se elabore
tiene que estar concentrada en una temática específica. El
ordenamiento jurídico de un país se conforma por normas de
derecho perfectamente identificables y específicas en la
materia que aborden, aún dentro de una misma rama del
derecho no es atinado incluir asuntos diferentes, así por
ejemplo en el derecho las normas adjetivas y sustantivas
conforman leyes independientes aunque versen sobre una misma
materia; una regulará cómo se aplican, la otra, qué regula
en la vida social.
Contrarius sensu, el derecho dejaría de ser una ciencia que
regula el normal y armónico desarrollo de los hombres en la
sociedad para convertirse en un elemento coadyuvador del
caos y la anarquía y tal es el caso del proyecto que se
somete a nuestra consideración que desatiende aspectos
medulares en la ciencia del derecho, como los son el hecho
de considerar al ordenamiento jurídico como un sistema
unitario, coherente y dinámico.
En un solo texto, en un solo cuerpo, sin ni siquiera
subtítulos que lo identifiquen se reflejan un grupo de
planteamientos que combinan temas de derecho constitucional,
de derecho penal, de la ley electoral y de la ley de
asociaciones. Lo que debió de haber sido objeto de
pretensiones bien diferenciadas entre sí en cuerpos
normativos independientes, aspecto sobre el cual es también
errático el documento.
4. Los integrantes de la Comisión, del estudio del
documento en cuestión, coinciden en el criterio de que, lo
que se pretende con esta solicitud, no es una promoción de
un proyecto de ley como enfáticamente se dice; sus
propósitos van mucho más allá y dada la índole de los
asuntos que aborda y las valoraciones y cambios que
proponen, en realidad se trata de una reforma constitucional
que pretende destruir las bases fundacionales del sistema
político cubano. No se trata de cambios o modificaciones de
leyes como pretenden aparentar, sino de colisiones con los
principios políticos, económicos y sociales que se consagran
en la Constitución de la República.
En tal virtud, resulta atinado consignar:
No debe generar dudas que el proceso de iniciativa de las
leyes del artículo
88 se refieren a otras leyes que no es precisamente los
encaminados a modificar la Constitución, la cual como
garantía del límite que prevé para su modificación ha
concebido un específico proceso, más allá del cual, ni los
ciudadanos, ni las instituciones públicas pueden ir.
Sin embargo, la facultad de la iniciativa legislativa que la
Constitución le consagra a los ciudadanos no puede ser
entendida en el ejercicio de un derecho ilimitado que atente
y socave directamente el propio poder del Estado constituido
y la expresión mayoritaria del cuerpo electoral que en
ejercicio de su poder constituyente le insufló vida como
expresión de la voluntad de la sociedad.
En tal sentido, resulta conveniente acudir al artículo 66 de
la Constitución que establece a todos los ciudadanos el
"deber inexcusable" de cumplir estrictamente con la
constitución y con las leyes, luego el derecho de iniciativa
legislativa a que se contrae el mentado artículo 88 de la
Constitución no solo se limita por las expresas
consideraciones que allí se le fijan, sino también y ello es
esencial, por el deber de los ciudadanos de actuar con
estricto e inexcusable cumplimiento y acatamiento a la
propia Constitución y a las demás leyes del Estado cubano,
luego en modo alguno puede dar cobertura legal para actuar a
quienes pretendan amparados en esta facultad constitucional,
subvertir los cimientos del Estado e ir contra los
fundamentos políticos, sociales y económicos que establece
la propia Constitución en que pretenden ampararse, es
pretender rebasar los límites que en su propia defensa la
Constitución establece e ir contra la mayoría del pueblo en
que se sostiene.
Luego la iniciativa de promover leyes que el artículo 88 de
la -Constitución expresa y que tiene entre sus destinatarios
a los ciudadanos, se entiende en el sentido de promocionar
leyes, ante la Asamblea Nacional del Poder Popular, en
marcados dentro del estricto respeto y cumplimiento de los
principios constitucionales y demás leyes de la nación, sin
que se pueda interpretar esta facultad constitucional en el
sentido de promover leyes encaminadas a remover o modificar
la propia Constitución, aunque expresamente ello no se
declare, o los fundamentos y principios del Estado o
derechos y deberes en ella consagrados, pues para ello el
constituyentista en su día concibió un procedimiento
específico y expreso, tal cual es la Reforma Constitucional
que se recoge en el Capítulo XV, artículo 137 de la Suprema
Norma.
La ley que modificaría la Constitución, tal y como ella
prevé y también el artículo 79 del Reglamento de la Asamblea
Nacional, no puede ser una ley ordinaria de las que
usualmente aprueba el órgano legislativo en sus períodos
ordinarios de sesiones, tiene que ser una ley especial, de
rango constitucional.
Ante esa situación la Asamblea Nacional actúa no como órgano
legislativo sino como órgano constituyente. Constituyente,
porque puede ponerse en el lugar del constituyente
originario y entrar a reformar directamente la Constitución
sin requerir de otra norma para ello que no sea su mera
voluntad alcanzada mediante el proceso establecido.
Luego es improcedente acudir al procedimiento legislativo
común para pretender mediante una ley modificar el texto
constitucional, porque en primer lugar el procedimiento es
inaplicable, segundo la simple ley no tiene rango para
alcanzar a introducir una modificación en la constitución y
en tercero la Asamblea Nacional en esos momento de la
reforma no actúa como órgano legislativo sino como órgano
constituyente y consecuentemente no puede acudir al proceso
ordinario que rige la elaboración de las leyes para
expresarse, tal y como preceptúa el artículo 137 de la Norma
Suprema.
La Constitución de la República, conjunto de normas
fundamentales que expresan la legítima voluntad del pueblo
soberano de darse y sostener una determinada forma política,
es la norma de mayor jerarquía en el ordenamiento jurídico
de la nación, establece los órganos con competencia
legislativa, regula el procedimiento legislativo y
condiciona el contenido que han de tener las leyes, luego
toda la función legislativa se le subordina y tiene que
serle coherente, para su reforma exige la concurrencia de
órganos y procedimientos más complejos que los regulados
para modificar las leyes. De ahí el carácter supralegal que
le asiste y la rigidez que le caracteriza. Luego toda norma
que pretenda oponérsele expresa o tácitamente es
inconstitucional e improcedente.
5. En consonancia con lo expuesto y en ejercicio del deber
que le confiere a la Comisión el artículo 69 del Reglamento
de la Asamblea Nacional del Poder Popular, estima oportuno
señalar que el pretendido documento de iniciativa
legislativa que le es sometido a consideración no se adecua
a la Constitución de la República, a la cual contradice y se
le opone abiertamente.
III. Conclusiones.
En uso de las facultades que le reserva el inciso c) del
artículo 68 del mentado Reglamento de la Asamblea Nacional y
atendiendo a todos los argumentos señalados en el cuerpo de
este documento, la Comisión de Asuntos Constitucionales y
Jurídicos considera, por unanimidad, proponer al Presidente
de la Asamblea Nacional del Poder Popular no admitir a otros
trámites el documento en cuestión y por consiguiente,
conforme a lo establecido, rechazar las pretensiones que el
mismo formula.
Dado en las Oficinas Auxiliares de la Asamblea Nacional del
Poder Popular, en la ciudad de la Habana a 1 día del mes de
noviembre del 2002 "Año de los Héroes Prisioneros del
Imperio".
Comisión de Asuntos Constitucionales y
Jurídicos Asamblea Nacional del Poder Popular
=============================================
miércoles, 30 de abril de 2014
La respuesta que ocultó Oswaldo Paya
Ya es oficial: ¡Leinier Domínguez entró en el Top 10 mundial!
BY MICOLUMNADEPORTIVA
La noticia era esperada, pero no por eso resultó menos disfrutable: el Gran Maestro Leinier Domínguez Pérez, el mejor ajedrecista de Iberoamérica, oficialmente entró en el Top-10 del ranking mundial de ajedrez, en el que apareció en la décima posición, con un ELO de 2768 puntos.
En otros momentos Domínguez había estado entre los 10 primeros, pero del ELO en vivo. Solo ahora ha quedado reconocido de manera oficial, así que esta es otra formidable noticia para el ajedrez cubano.
Leinier aumentó su coeficiente en 11,3 unidades, gracias a su brillante actuación con el club San Petersburgo en la Liga rusa por equipos. Allí, el cubano ganó cuatro partidas, entabló dos y no inclinó su rey.
En el listado, que fue dado a conocer como es habitual un día antes del inicio de un nuevo mes, no fue computado el Memorial Gashimov, pero si la FIDE hubiera incluido los resultados de este evento, nada habría cambiado para el cubano, porque en el ELO en vivo continúa en la décima plaza, aunque muy cerca de Sergey Karjakin (2771,7 por 2768,3) quien ocupa el noveno escaño.
Lázaro Bruzón aumentó en cuatro unidades su coeficiente, tras ganar el Abierto Mexicano, en el que concluyó invicto, con 7 puntos en 9 partidas.
Ranking cubano (mayo)
Dominguez Perez, Leinier 2768
Bruzon Batista, Lazaro 2682
Quesada Perez, Yuniesky 2642
Ortiz Suarez, Isan Reynaldo 2588
Gonzalez Vidal, Yuri 2561
Hevia Alejano, Carlos Antonio 2530
Guerra Mendez, Jose Angel 2523
Bacallao Alonso, Yusnel 2522
Obregon Rivero, Juan Carlos 2509
Arencibia Rodriguez, Walter 2501
Vea además:
Ranking femenino cubano
CARLSEN GANÓ EL MEMORIAL GASHIMOV
La última ronda del Memorial Gashimov fue emocionante. Un día antes el italiano Fabiano Caruana había logrado igualar en puntos con el campeón mundial Magnus Carlsen (aunque el noruego tenía un mejor desempate), así que había mucha expectación por el duelo entre ambos. En la primera ronda, Caruana venció al prodigio y volvió a demostrar que es el jugador que más resistencia le hace.
Picado en su orgullo, el “Mozart del ajedrez” jugó impecable y derrotó a Caruana en 49 movimientos, por lo que aseguró el primer lugar del torneo y recuperó las unidades ELO perdidas anteriormente.
La noticia era esperada, pero no por eso resultó menos disfrutable: el Gran Maestro Leinier Domínguez Pérez, el mejor ajedrecista de Iberoamérica, oficialmente entró en el Top-10 del ranking mundial de ajedrez, en el que apareció en la décima posición, con un ELO de 2768 puntos.
En otros momentos Domínguez había estado entre los 10 primeros, pero del ELO en vivo. Solo ahora ha quedado reconocido de manera oficial, así que esta es otra formidable noticia para el ajedrez cubano.
Leinier aumentó su coeficiente en 11,3 unidades, gracias a su brillante actuación con el club San Petersburgo en la Liga rusa por equipos. Allí, el cubano ganó cuatro partidas, entabló dos y no inclinó su rey.
En el listado, que fue dado a conocer como es habitual un día antes del inicio de un nuevo mes, no fue computado el Memorial Gashimov, pero si la FIDE hubiera incluido los resultados de este evento, nada habría cambiado para el cubano, porque en el ELO en vivo continúa en la décima plaza, aunque muy cerca de Sergey Karjakin (2771,7 por 2768,3) quien ocupa el noveno escaño.
Lázaro Bruzón aumentó en cuatro unidades su coeficiente, tras ganar el Abierto Mexicano, en el que concluyó invicto, con 7 puntos en 9 partidas.
Ranking cubano (mayo)
Dominguez Perez, Leinier 2768
Bruzon Batista, Lazaro 2682
Quesada Perez, Yuniesky 2642
Ortiz Suarez, Isan Reynaldo 2588
Gonzalez Vidal, Yuri 2561
Hevia Alejano, Carlos Antonio 2530
Guerra Mendez, Jose Angel 2523
Bacallao Alonso, Yusnel 2522
Obregon Rivero, Juan Carlos 2509
Arencibia Rodriguez, Walter 2501
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CARLSEN GANÓ EL MEMORIAL GASHIMOV
La última ronda del Memorial Gashimov fue emocionante. Un día antes el italiano Fabiano Caruana había logrado igualar en puntos con el campeón mundial Magnus Carlsen (aunque el noruego tenía un mejor desempate), así que había mucha expectación por el duelo entre ambos. En la primera ronda, Caruana venció al prodigio y volvió a demostrar que es el jugador que más resistencia le hace.
Picado en su orgullo, el “Mozart del ajedrez” jugó impecable y derrotó a Caruana en 49 movimientos, por lo que aseguró el primer lugar del torneo y recuperó las unidades ELO perdidas anteriormente.
Mantiene Canadá liderazgo en emisión de turistas
La nación norteña ocupa esta casilla desde hace varios años, seguida de Alemania con 4,2 % y Francia con 3,7 %, a quienes le preceden Italia, Inglaterra, Argentina, Rusia, México, España y Venezuela.
El informe de la ONEI refiere que en el primer trimestre de 2014, a Cuba arribaron 995 571 visitantes, y de ellos en marzo escogieron el destino Cuba 359 384 viajeros.
En la actualidad la Isla dispone de más de 60 000 habitaciones en 300 hoteles distribuidos por toda la nación, y las autoridades del Ministerio de Turismo prevén la posibilidad de cerrar 2014 con la atención a más de tres millones de viajeros por primera vez. (S.E.)
Nueva ley inversiones de Cuba atrae a empresariado chino
Por Ilsa Rodriguez
Beijing, 30 abr (PL) Empresarios chinos expresaron hoy interés en las propuestas de inversión en Cuba, luego de participar en una conferencia ofrecida en esta capital sobre las características de la nueva ley y la marcha de la Zona Especial de Desarrollo Mariel.(RadioPL)
Decenas de representantes de compañías chinas de las industrias automotriz, de energías renovables, petróleo, electrónica y siderúrgica y sectores biofarmacéutico y turismo, asistieron a un encuentro promovido por la embajada de Cuba en China con ese fin.
Jia Lu, vicegerente general del Grupo Ingeniero del Proyecto Energético Huachen de China, dijo a Prensa Latina que su compañía está interesada en esta nueva legislación, aprobada por el Parlamento cubano en marzo pasado, y en el proyecto del Mariel por las oportunidades que ofrece.
Estamos evaluando proyectos de inversiones en Mariel en el sector de energía renovable, dijo Jia, quien anunció que Huanchen negocia con el Ministerio de Industrias de Cuba para ampliar su colaboración y expandir la fábrica para el procesamiento de módulos fotovoltaicos.
Queremos ampliar esa industria ubicada en la provincia occidental de Pinar del Río para exportar nuestros productos desde Cuba a otros países latinoamericanos, expresó la vicegerente de Huanchen.
Durante este seminario en la sede diplomática cubana, las consejeras Sandra Ramos y María Angélica Peñate explicaron los detalles de la nueva Ley de la Inversión Extranjera y de la Zona de Desarrollo Económico de Mariel, cuya primera fase fue inaugurada a fines de enero pasado.
A la cita también asistieron funcionarios del Consejo Chino para la Promoción del Comercio Internacional y empresarios de la Zona de Desarrollo Económico y Tecnológico de Tianjin, una municipalidad especial cercana a Beijing.
Sun Wei, representante en Cuba de la corporación comercial Dongxianglitian, ubicada en Tianjin y que se especializa en la producción de ciclomotores, también conversó con Prensa Latina.
Dongxianglitian mantiene desde hace tres lustros relaciones con empresas cubanas productoras de bicicletas y Sun dijo que viajó este mes a La Habana para negociar el establecimiento de una empresa mixta.
Ya producimos casi 20 mercancías diferentes que queremos aumentar y llevar la producción no solo al mercado cubano sino al de otras naciones de América Latina y el Caribe, agregó Sun.
Destacó que la nueva ley ofrece muchos beneficios, una ventaja que se une a la seguridad existente en Cuba en todos los aspectos.
Sun expresó que su satisfacción por el mercado cubano lo ha llevado a impulsar a otros empresarios de Tianjin a visitar ese Estado para explorar sus posibilidades.
Dongxianglitian produce bicicletas y sillas de ruedas mecánicas y eléctricas, así como todo tipo de productos ciclo motores y desea establecer una empresa mixta para la elaboración de baterías eléctricas y motocicletas de 35 centímetros cúbicos.
Cuba y Unión Europea continúan negociaciones para acuerdo de diálogo
La Habana, 30 abr (PL) Las conversaciones para el establecimiento de un Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación entre Cuba y la Unión Europea (UE) continúan hoy en esta capital.(RadioPL)
Según aseguraron diplomáticos de ambas partes, la finalidad del proceso es contribuir a la normalización de las relaciones entre el bloque y la nación caribeña.
Esta primera ronda de las negociaciones -que concluye hoy- tiene como objetivo acordar los aspectos organizativos de los diálogos, los cuales se desarrollarán en La Habana y Bruselas de manera alterna, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores cubano.
La isla es uno de los pocos países del continente que no dispone de un acuerdo como el discutido aquí en sus relaciones con la UE debido a la llamada "posición común", una política restrictiva para la interacción con Cuba, aprobada por el grupo en 1996 y aún vigente.
Sin embargo, en febrero pasado los ministros de Relaciones Exteriores de la agrupación dieron su visto bueno a las directivas para entablar negociaciones, como resultado de un proceso de acercamiento.
Luego, en marzo, Cuba comunicó su conformidad con el inicio de las pláticas a partir del establecimiento de bases recíprocas, no discriminatorias y de pleno respeto a la igualdad soberana de los Estados y del marco jurídico y ordenamiento institucional de las partes, así como en total apego al principio de no injerencia en los asuntos internos de los Estados.
Al frente del equipo negociador de la UE se encuentra el Director General para las Américas del Servicio Europeo de Acción Exterior, Christian Leffler, mientras que la parte cubana la encabeza el viceministro de Relaciones Exteriores Abelardo Moreno.
Una muestra reciente de la nueva visión hacia Cuba por parte del bloque fue la visita a La Habana del canciller francés, Laurent Fabius, durante la cual el diplomático sostuvo una larga e inédita reunión con el presidente Raúl Castro.
Fabius se hizo acompañar por empresarios de su país interesados en las oportunidades que ofrece la nueva ley de inversión extranjera de Cuba.
martes, 29 de abril de 2014
En Cuba: Otra arma contra el cáncer
Por Analeida Puerto, Yosbel Bullaín Viltres
Publicado en Cubadebate el 29 abril 2014
Sus ojos son los de un guerrero que no se amedrenta en la batalla por superior que sea el enemigo al que se enfrenta. Lucha. Resiste. Mantiene la calma. No pierde la fe. Ayer la lucha en la Sierra Maestra por la independencia de su país; hoy, una batalla por su vida.
Desde hace unos meses, Ovidio Almendral es paciente del Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología, en La Habana, y cada semana llega a ese centro de salud para tratarse con Nimotuzumab, un medicamento creado en el Centro de Inmunología Molecular (CIM), que controla el crecimiento de las células cancerígenas, y que ya muestra esperanzadores resultados.
Este hombre de 80 años, diagnosticado con una adenopatía cervical, metástasis de un carcinoma epidermoide de vías aéreas-digestivas superiores, comenta sentirse diferente luego de que se le combinara el Nimotuzumab con la radioterapia. “Yo me siento bien, normal. Lo único que me estoy sintiendo, por la radioterapia, es la sequedad en la boca. Tengo mi ánimo. Me mantengo perfecto.”
Para padecimientos similares al mencionado, el tratamiento más habitual es, en un primer momento, extirpar el tumor mediante cirugía; luego, la quimioterapia. Pero a Ovidio, por su edad y otras enfermedades que padece, no se le pudo hacer, explica el Doctor Elías García, Especialista en Oncología.
“Cuando analizamos esta situación tampoco era posible adicionar la quimioterapia al tratamiento de la radioterapia- acota el especialista- y decidimos adicionarle el Nimotuzumab a la radioterapia debido que de esta forma, se obtienen mejores resultados.”
En este sentido Gustavo Maragues y Norberto Maceo, diagnosticados con Adenocarcinoma Prostático y, como a Ovidio Almendral, también se les agregó a su tratamiento el Nimotuzumab. Hoy, ya sienten la mejoría.
“Yo estaba un poco exceptivo-confiesa Gustavo Maragues- pero en la medida que avanzo con los ciclos de quimioterapia más el Nimotuzumab, he notado que mi enfermedad no ha progresado, eso realmente es un aliento para uno seguir avanzando en la vida”.
Norberto Maceo dice que en un inicio perdió las fuerzas, “pero ya me siento otra vez algo de lo que era antes”, manifiesta sonriente.
Ovidio Almendral en la Sala Quimioterapia Ambulatoria. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
NIMOTUZUMAB CONTRA TUMORES DE ORIGEN EPITELIAL
Según la Organización Mundial de la Salud, en Cuba fallecen de cáncer unas 21 000 personas y se diagnostican más de 31 000 nuevos casos anualmente con esa enfermedad, constituyendo así la primera causa de muerte en el país desde 2012.
Por ello, varios son los esfuerzos encaminados para desarrollar tratamientos cada vez más efectivos contra ese padecimiento. De ahí que el Nimotuzumab o Cimaher, como también se le conoce, sea uno de ellos.
Kaleb León, Doctor en Ciencias y Director de Investigaciones y Desarrollo del CIM, explica que el Nimotuzumab es un anticuerpo monoclonal que reconoce el factor del crecimiento epidérmico y controla el desarrollo de las células cancerígenas, fundamentalmente en tumores de origen epitelial.
Por su parte, Ariamna Cuevas, Máster en Ciencias y Gerente del Nimotuzumab en el CIM, expone que ese fármaco “está registrado para cáncer de cabeza y cuello en estado avanzado, de esófago, y gliomas (tipo de cáncer cerebral en adultos y niños). También se encuentra en investigación en otro conjunto de localizaciones como pulmón, estómago, páncreas, cérvico-uterino, y próstata”.
Sobre cómo el Nimotuzumab modifica al organismo, el Doctor Elías García, manifiesta que es un medicamento muy seguro y de baja toxicidad comparado con sus homólogos en el mundo.
“Las personas que recibimos este medicamento podemos trabajar. Luego de haber sido expuestos al tratamiento puedes hacer una vida normal en el centro de trabajo, en la casa”, afirma el paciente Gustavo Maragues.
EXPERIENCIAS EN PINAR DEL RÍO Y MATANZAS
La Doctora Yamilka Sánchez, Jefa del Grupo de Oncología en Pinar del Río revela que en el Hospital Oncológico de esa provincia, III Congreso, está el caso de una joven de 31 años que debutó con un cáncer de cuello uterino infiltrante en el año 2010 con una recaída loco-regional en 2012.
“La paciente aún está viva después de haber recibido su línea de quimioterapia adicionada al Nimotuzumab, explica la especialista. En estos momentos la joven, a pesar de estar en progresión de la enfermedad, cuenta con muy buena calidad de vida.”
Por su parte, el Doctor Eduardo Santiesteban, especialista en Oncología de la provincia de Matanza, comenta sus experiencias con los pacientes con cáncer de pulmón, quienes luego de que se les aplicase la primera línea de quimioterapia presentaban un cuadro general deteriorado, han mejorado su calidad de vida luego de que se les adicionara el Nimotuzumab.
“Muchos de ellos llegaron con disnea y dolor torácico, y en la actualidad, se mantienen vivos con lesiones estables, es decir, con la lesión tumoral aún presentes en el pulmón, pero sin falta de aire y ni dolor, además hacen sus actividades diarias.”
En Cuba, desde la creación y aplicación del Nimotuzumab en 2002, anualmente se benefician entre 400 y 500 pacientes. “Nuestro objetivo es siempre tratar de beneficiar a la mayor cantidad de pacientes posibles y obtener en el menor tiempo que se pueda la evidencia, la confirmación que el producto es seguro y eficaz”, acota la Msc. Ariamna Cuevas.
La Doctora Yamilka Sánchez, asevera que contar con este producto en Cuba es un logro de la ciencia y la biotecnología de nuestro país. “Tenemos puesto en ello todas las esperanzas porque es un arma más contra este flagelo que es el cáncer”.
Centro de Inmunología Molecular. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
MÁS ALLÁ DE LAS FRONTERAS CUBANAS
El Nimotuzumab ha trascendido las fronteras de Cuba. En la actualidad está registrado en más de 20 países, fundamentalmente en América del Sur, África y Asia. De ahí que a escala mundial, haya sido utilizado en unas 47 mil personas.
Sobre el proceso de registro, Ariamna Cuevas, Gerente del Nimotuzumab en el CIM, comenta que es un asunto complejo, porque es necesario documentar todo el desarrollo del medicamento y luego presentárselo a la Agencia Regulatoria. “Además, con el agravante de que cada agencia regulatoria, en dependencia de su nivel de desarrollo, pide más o menos nivel de explicación”.
Como parte del proceso para registrar un medicamento está la realización de ensayos clínicos en esos países donde se pretende comercializar el producto.
Al respecto, el Doctor Kaleb León asevera: “Tenemos una red muy grande en diferentes países: en Alemania, en tumores de páncreas y gliomas. También hay ensayos clínicos actualmente en Japón, en diferentes localizaciones como pulmón, esófago. Existen además ensayos clínicos en Indonesia y en Brasil”.
Otras naciones en las que se desarrollan ensayos clínicos, aunque de manera muy insipiente son Canadá y Estados Unidos. Sin embargo, uno de los retos que tiene el CIM con el Nimotuzumab es lograr un registro en un país del primer mundo, acota Kaleb León, Director de Investigaciones y Desarrollo de ese Centro.
No obstante, hoy la ciencia cubana ha logrado penetrar en mercados de países desarrollados y en vías de desarrollo, por el conocimiento científico y el gran valor de sus investigaciones. “Eso es lo que hace que muestren interés hacia nosotros y los resultados están ahí en con el Nimotuzumab”, afirma Ariamna Cuevas.
Sin embargo, el Nimotuzumab no es el único medicamento del CIM que se ha registrado en Cuba y en otras naciones. Otros de los que ya se comercializan para tratamientos contra el cáncer son:
-CIMAvax-EGF (vacuna terapéutica para el tratamiento del cáncer de pulmón de células no pequeñas en estadíos avanzados).
-ior®EPOCIM o Eritropoyetina Humana Recombinante (para el tratamiento de la Anemia en pacientes oncológicos).
-ior®LeukoCIM o FILGRASTIM (Factor estimulador de colonias granulocíticas (G-CSF) para el tratamiento de la Neutropenia).
-VAXIRA® o racotumomab (vacuna terapéutica para el tratamiento de cáncer de pulmón de células no pequeñas en estadíos avanzados).
LOGROS Y RETOS
Cuando en 1994, Fidel Castro inauguraba el Centro de Inmunología Molecular dejaba como misión principal lograr ofrecer productos novedosos para la salud de los cubanos.
“Eso es una meta que va a permanecer con el CIM porque no es un lujo, es una promesa de salud para nuestro pueblo. Ha sido un reto para nosotros, comenta Ariamna Cuevas.
Pero los científicos de ese Centro, a punto de cumplir los 20 años de trabajo, no se han quedado en el punto de arrancada. Los avances han sido constantes. En la actualidad ya está terminada una segunda facilidad que está en operaciones. “Pero además, hay una nueva inversión que se encuentra bastante avanzada, y eso significa que hemos crecido”, manifiesta Cuevas.
Para Kaleb León, otro de los retos que tiene el CIM es el tecnológico. Las drogas biotecnológicas, no solo tienen un reto científico en su desarrollo, sino también regulatorio. “Esta es una industria muy regulada, de altos estándares de producción y control de calidad, que requiere de una tecnología muy grande a la hora de producir estos medicamentos, y es un reto para nuestro país poder pasar esos estándares”, concluye Kaleb.
CONFIANZA
Ovidio, Gustavo y Norberto se mantienen firmes porque saben que no están solos. A un lado, las enfermeras y médicos del Hospital Oncológico de La Habana; al otro, los científicos del Centro de Inmunología Molecular.
Por eso para Ovido Almendral conocer por dentro todo lo que brinda un hospital, es maravilloso, “y pensar que a nosotros, los que lo usamos, no nos cuesta nada”, dice. Mientras, Norberto no necesita decir con palabras lo que su rostro sonriente y confiado muestra.
Gustavo, por su parte, se siente agradecido por haber tenido acceso a un medicamento como el Nimotuzumab. “En ocasiones a nosotros no nos dicen, pero sabemos que es bien costoso, y tenerlo a nuestra disposición es muy importante para quienes padecemos de este tipo de enfermedad.”
“Eso es lo que le da fuerza a uno para quedarse cuando haga falta -comenta, con los ojos aguados, Ariamna Cuevas- hasta las 10, o hasta las 12 de la noche, o trabajar el sábado, el domingo; incluso, ir y cuidar esa obra, esa inversión, que significa tener un nuevo laboratorio y poder hacer más investigaciones. Eso es lo que alimenta el alma”.
Manos por la vida. Foto Analeida Puerto/Cubadebate
Hospital Oncológico de La Habana. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
Norberto y Gustavo, junto a otra paciente en la Sala de Quimioterapia Ambulatoria. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
Publicado en Cubadebate el 29 abril 2014
Sus ojos son los de un guerrero que no se amedrenta en la batalla por superior que sea el enemigo al que se enfrenta. Lucha. Resiste. Mantiene la calma. No pierde la fe. Ayer la lucha en la Sierra Maestra por la independencia de su país; hoy, una batalla por su vida.
Desde hace unos meses, Ovidio Almendral es paciente del Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología, en La Habana, y cada semana llega a ese centro de salud para tratarse con Nimotuzumab, un medicamento creado en el Centro de Inmunología Molecular (CIM), que controla el crecimiento de las células cancerígenas, y que ya muestra esperanzadores resultados.
Este hombre de 80 años, diagnosticado con una adenopatía cervical, metástasis de un carcinoma epidermoide de vías aéreas-digestivas superiores, comenta sentirse diferente luego de que se le combinara el Nimotuzumab con la radioterapia. “Yo me siento bien, normal. Lo único que me estoy sintiendo, por la radioterapia, es la sequedad en la boca. Tengo mi ánimo. Me mantengo perfecto.”
Para padecimientos similares al mencionado, el tratamiento más habitual es, en un primer momento, extirpar el tumor mediante cirugía; luego, la quimioterapia. Pero a Ovidio, por su edad y otras enfermedades que padece, no se le pudo hacer, explica el Doctor Elías García, Especialista en Oncología.
“Cuando analizamos esta situación tampoco era posible adicionar la quimioterapia al tratamiento de la radioterapia- acota el especialista- y decidimos adicionarle el Nimotuzumab a la radioterapia debido que de esta forma, se obtienen mejores resultados.”
En este sentido Gustavo Maragues y Norberto Maceo, diagnosticados con Adenocarcinoma Prostático y, como a Ovidio Almendral, también se les agregó a su tratamiento el Nimotuzumab. Hoy, ya sienten la mejoría.
“Yo estaba un poco exceptivo-confiesa Gustavo Maragues- pero en la medida que avanzo con los ciclos de quimioterapia más el Nimotuzumab, he notado que mi enfermedad no ha progresado, eso realmente es un aliento para uno seguir avanzando en la vida”.
Norberto Maceo dice que en un inicio perdió las fuerzas, “pero ya me siento otra vez algo de lo que era antes”, manifiesta sonriente.
Ovidio Almendral en la Sala Quimioterapia Ambulatoria. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
NIMOTUZUMAB CONTRA TUMORES DE ORIGEN EPITELIAL
Según la Organización Mundial de la Salud, en Cuba fallecen de cáncer unas 21 000 personas y se diagnostican más de 31 000 nuevos casos anualmente con esa enfermedad, constituyendo así la primera causa de muerte en el país desde 2012.
Por ello, varios son los esfuerzos encaminados para desarrollar tratamientos cada vez más efectivos contra ese padecimiento. De ahí que el Nimotuzumab o Cimaher, como también se le conoce, sea uno de ellos.
Kaleb León, Doctor en Ciencias y Director de Investigaciones y Desarrollo del CIM, explica que el Nimotuzumab es un anticuerpo monoclonal que reconoce el factor del crecimiento epidérmico y controla el desarrollo de las células cancerígenas, fundamentalmente en tumores de origen epitelial.
Por su parte, Ariamna Cuevas, Máster en Ciencias y Gerente del Nimotuzumab en el CIM, expone que ese fármaco “está registrado para cáncer de cabeza y cuello en estado avanzado, de esófago, y gliomas (tipo de cáncer cerebral en adultos y niños). También se encuentra en investigación en otro conjunto de localizaciones como pulmón, estómago, páncreas, cérvico-uterino, y próstata”.
Sobre cómo el Nimotuzumab modifica al organismo, el Doctor Elías García, manifiesta que es un medicamento muy seguro y de baja toxicidad comparado con sus homólogos en el mundo.
“Las personas que recibimos este medicamento podemos trabajar. Luego de haber sido expuestos al tratamiento puedes hacer una vida normal en el centro de trabajo, en la casa”, afirma el paciente Gustavo Maragues.
EXPERIENCIAS EN PINAR DEL RÍO Y MATANZAS
La Doctora Yamilka Sánchez, Jefa del Grupo de Oncología en Pinar del Río revela que en el Hospital Oncológico de esa provincia, III Congreso, está el caso de una joven de 31 años que debutó con un cáncer de cuello uterino infiltrante en el año 2010 con una recaída loco-regional en 2012.
“La paciente aún está viva después de haber recibido su línea de quimioterapia adicionada al Nimotuzumab, explica la especialista. En estos momentos la joven, a pesar de estar en progresión de la enfermedad, cuenta con muy buena calidad de vida.”
Por su parte, el Doctor Eduardo Santiesteban, especialista en Oncología de la provincia de Matanza, comenta sus experiencias con los pacientes con cáncer de pulmón, quienes luego de que se les aplicase la primera línea de quimioterapia presentaban un cuadro general deteriorado, han mejorado su calidad de vida luego de que se les adicionara el Nimotuzumab.
“Muchos de ellos llegaron con disnea y dolor torácico, y en la actualidad, se mantienen vivos con lesiones estables, es decir, con la lesión tumoral aún presentes en el pulmón, pero sin falta de aire y ni dolor, además hacen sus actividades diarias.”
En Cuba, desde la creación y aplicación del Nimotuzumab en 2002, anualmente se benefician entre 400 y 500 pacientes. “Nuestro objetivo es siempre tratar de beneficiar a la mayor cantidad de pacientes posibles y obtener en el menor tiempo que se pueda la evidencia, la confirmación que el producto es seguro y eficaz”, acota la Msc. Ariamna Cuevas.
La Doctora Yamilka Sánchez, asevera que contar con este producto en Cuba es un logro de la ciencia y la biotecnología de nuestro país. “Tenemos puesto en ello todas las esperanzas porque es un arma más contra este flagelo que es el cáncer”.
Centro de Inmunología Molecular. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
MÁS ALLÁ DE LAS FRONTERAS CUBANAS
El Nimotuzumab ha trascendido las fronteras de Cuba. En la actualidad está registrado en más de 20 países, fundamentalmente en América del Sur, África y Asia. De ahí que a escala mundial, haya sido utilizado en unas 47 mil personas.
Sobre el proceso de registro, Ariamna Cuevas, Gerente del Nimotuzumab en el CIM, comenta que es un asunto complejo, porque es necesario documentar todo el desarrollo del medicamento y luego presentárselo a la Agencia Regulatoria. “Además, con el agravante de que cada agencia regulatoria, en dependencia de su nivel de desarrollo, pide más o menos nivel de explicación”.
Como parte del proceso para registrar un medicamento está la realización de ensayos clínicos en esos países donde se pretende comercializar el producto.
Al respecto, el Doctor Kaleb León asevera: “Tenemos una red muy grande en diferentes países: en Alemania, en tumores de páncreas y gliomas. También hay ensayos clínicos actualmente en Japón, en diferentes localizaciones como pulmón, esófago. Existen además ensayos clínicos en Indonesia y en Brasil”.
Otras naciones en las que se desarrollan ensayos clínicos, aunque de manera muy insipiente son Canadá y Estados Unidos. Sin embargo, uno de los retos que tiene el CIM con el Nimotuzumab es lograr un registro en un país del primer mundo, acota Kaleb León, Director de Investigaciones y Desarrollo de ese Centro.
No obstante, hoy la ciencia cubana ha logrado penetrar en mercados de países desarrollados y en vías de desarrollo, por el conocimiento científico y el gran valor de sus investigaciones. “Eso es lo que hace que muestren interés hacia nosotros y los resultados están ahí en con el Nimotuzumab”, afirma Ariamna Cuevas.
Sin embargo, el Nimotuzumab no es el único medicamento del CIM que se ha registrado en Cuba y en otras naciones. Otros de los que ya se comercializan para tratamientos contra el cáncer son:
-CIMAvax-EGF (vacuna terapéutica para el tratamiento del cáncer de pulmón de células no pequeñas en estadíos avanzados).
-ior®EPOCIM o Eritropoyetina Humana Recombinante (para el tratamiento de la Anemia en pacientes oncológicos).
-ior®LeukoCIM o FILGRASTIM (Factor estimulador de colonias granulocíticas (G-CSF) para el tratamiento de la Neutropenia).
-VAXIRA® o racotumomab (vacuna terapéutica para el tratamiento de cáncer de pulmón de células no pequeñas en estadíos avanzados).
LOGROS Y RETOS
Cuando en 1994, Fidel Castro inauguraba el Centro de Inmunología Molecular dejaba como misión principal lograr ofrecer productos novedosos para la salud de los cubanos.
“Eso es una meta que va a permanecer con el CIM porque no es un lujo, es una promesa de salud para nuestro pueblo. Ha sido un reto para nosotros, comenta Ariamna Cuevas.
Pero los científicos de ese Centro, a punto de cumplir los 20 años de trabajo, no se han quedado en el punto de arrancada. Los avances han sido constantes. En la actualidad ya está terminada una segunda facilidad que está en operaciones. “Pero además, hay una nueva inversión que se encuentra bastante avanzada, y eso significa que hemos crecido”, manifiesta Cuevas.
Para Kaleb León, otro de los retos que tiene el CIM es el tecnológico. Las drogas biotecnológicas, no solo tienen un reto científico en su desarrollo, sino también regulatorio. “Esta es una industria muy regulada, de altos estándares de producción y control de calidad, que requiere de una tecnología muy grande a la hora de producir estos medicamentos, y es un reto para nuestro país poder pasar esos estándares”, concluye Kaleb.
CONFIANZA
Ovidio, Gustavo y Norberto se mantienen firmes porque saben que no están solos. A un lado, las enfermeras y médicos del Hospital Oncológico de La Habana; al otro, los científicos del Centro de Inmunología Molecular.
Por eso para Ovido Almendral conocer por dentro todo lo que brinda un hospital, es maravilloso, “y pensar que a nosotros, los que lo usamos, no nos cuesta nada”, dice. Mientras, Norberto no necesita decir con palabras lo que su rostro sonriente y confiado muestra.
Gustavo, por su parte, se siente agradecido por haber tenido acceso a un medicamento como el Nimotuzumab. “En ocasiones a nosotros no nos dicen, pero sabemos que es bien costoso, y tenerlo a nuestra disposición es muy importante para quienes padecemos de este tipo de enfermedad.”
“Eso es lo que le da fuerza a uno para quedarse cuando haga falta -comenta, con los ojos aguados, Ariamna Cuevas- hasta las 10, o hasta las 12 de la noche, o trabajar el sábado, el domingo; incluso, ir y cuidar esa obra, esa inversión, que significa tener un nuevo laboratorio y poder hacer más investigaciones. Eso es lo que alimenta el alma”.
Manos por la vida. Foto Analeida Puerto/Cubadebate
Hospital Oncológico de La Habana. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
Norberto y Gustavo, junto a otra paciente en la Sala de Quimioterapia Ambulatoria. Foto: Analeida Puerto/Cubadebate
Cuba y el camino de la recuperación, 20 años después
Por Jose Luis Rodriguez*
Desde finales de 1993 y durante los primeros meses de 1994, Cuba enfrentó los momentos más difíciles de la crisis económica que se dio en llamar Período Especial. A las más terribles carencias materiales, que reflejaban la caída de casi el 35% del PIB en solo tres años, se sumaba la incertidumbre ante el porvenir y la difícil perspectiva de una solución frente al presagio del desastre que pregonaban muchos dentro y fuera del país, si este no renunciaba a la utopía socialista.
Esa evolución había comenzado con la caída del socialismo en Europa y la desaparición de la URSS en 1991. La economía cubana había venido enfrentando la crisis que inevitablemente se desató, replegándose forzosamente con el objetivo de resistir su impacto al menor costo social posible, y sin ceder frente a la oleada de neoliberalismo que se extendía por todo el mundo entonces, presentándose como un “camino” para salir adelante.
La coyuntura alcanzó su punto álgido en el verano de 1993, cuando resultó inaplazable un giro en los acontecimientos ante la gravedad de la situación. Por esa época, un fenómeno meteorológico bautizado como la Tormenta del siglo se abatió sobre el país causando pérdidas por más de mil millones de dólares, y la zafra sufrió los efectos de las anomalías climáticas, dejando de ingresar otros 400 millones.
Se impuso entonces la búsqueda urgente de nuevas fuentes de ingresos en divisas, lo que llevaría a que se adoptara un régimen de dualidad monetaria mediante el Decreto Ley No. 140, de agosto de 1993.
A partir de esta decisión se autorizó la circulación interna de siete divisas con las que -junto al peso cubano- podría operar el grupo de empresas de la economía estatal capaz de generarlas, al tiempo que también lo harían los inversionistas extranjeros interesados en asociarse al Estado cubano en empresas conjuntas.
Simultáneamente, se autorizó la recepción de remesas por el segmento de la población que podía recibirlas, las cuales permitirían incrementar su consumo mediante la compra de mercancías en tiendas de recaudación de divisas especialmente diseñadas para ello, con el establecimiento del equivalente de un impuesto sobre las ventas en sus precios, de lo cual se beneficiaría la sociedad mediante su redistribución a través del presupuesto esatal.
Junto a esta medida de singular importancia se adoptaron otras igualmente trascendentes, pero cuyo efecto se percibiría a más largo plazo, y que modificarían la estructura de la propiedad agraria, priorizando el sector cooperativo agropecuario, en tanto se expandía nuevamente el pequeño sector privado mediante el trabajo por cuenta propia ante la contracción del empleo estatal.
Sin embargo, ninguna de estas decisiones lograba frenar el impacto de la presión inflacionaria que se manifestaba en el exceso de liquidez en manos de la población frente a la contracción inevitable de la oferta estatal de bienes y servicios.
De tal modo, durante los primeros meses de 1994 esa liquidez alcanzó un volumen equivalente al 66% del PIB y el déficit del presupuesto de 1993 llegó al 33% de ese indicador. Esta creciente expansión monetaria provocaba ya un desinterés laboral acelerado ante la pérdida del papel estimulador de los salarios, y paralelamente se apreciaba una desmonetización acentuada con la aparición del trueque y la pérdida de las funciones del dinero.
Resultaba urgente frenar en seco estas peligrosas tendencias y, al mismo tiempo, crear las condiciones que permitieran iniciar una gradual recuperación económica del país.
Para dar solución a este problema, y tras un largo proceso de discusión masiva que involucró a gran parte de la población y se conoció como “parlamentos obreros”, se convocó un período de sesiones extraordinario de la Asamblea Nacional los días 1 y 2 de mayo de 1994.
En un paso completamente inédito en la economía cubana de entonces, se trataba de introducir medidas para el reequilibrio de las finanzas internas a través de decisiones encaminadas a eliminar las crecientes presiones inflacionarias.
Por un lado, se elevaron los precios y tarifas de una serie de productos y servicios mayormente no esenciales (sería el caso de los cigarros y las bebidas alcohólicas) mediante el consenso mayoritario de la sociedad, y se introduciría una nueva ley fiscal en agosto de ese año para incrementar los ingresos presupuestarios.
Por otro, se conectaría la circulación de moneda convertible y pesos cubanos para las personas naturales mediante la creación de CADECA en octubre de 1995, lo cual contribuiría al drenaje del exceso de liquidez en pesos mediante el acceso a la moneda convertible, que permitiría las compras en las tiendas de recaudación de divisas.
A todo lo anterior se unió la reducción de los subsidios por pérdidas a las empresas estatales, asumiendo su paralización, al tiempo que se establecía un seguro contra el desempleo. Simultáneamente, las empresas capaces de sustituir importaciones debían hacerlo con costos inferiores a las mismas, lo que las enfrentaba a la necesidad de acceder a niveles de competitividad internacional para abastecer el mercado interno que operaba en divisas.
Fue el conjunto de estas cruciales decisiones, implementadas en el segundo semestre de 1994, lo que posibilitó iniciar la gradual recuperación de la economía cubana. Ese año, el PIB creció un modesto 0,7%, la liquidez en manos de la población bajó al 48,8% del PIB, el déficit presupuestario cayó al 7%, el de cuenta corriente se situó en -1,3%, y la cotización de la divisa en la economía informal disminuyó rápidamente a 60 pesos por dólar.
Muchas de las experiencias derivadas de ese proceso mantienen su validez veinte años después, especialmente en lo referido al positivo impacto en la eficiencia de la descentralización de las decisiones en las empresas estatales, el incremento puntual del ingreso de los trabajadores como vía para el crecimiento de la productividad en sectores claves y el favorable impacto de la apertura a la inversión extranjera.
Se trata de lecciones que no debemos olvidar.
*El autor es asesor del Centro de Investigaciones de la Economía Mundial (CIEM, Habana)- See more at: http://www.cubacontemporanea.com/noticias/cuba-y-el-camino-de-la-recuperacion-20-anos-despues#sthash.tMSNozAX.dpuf
Autonomía empresarial en centro de reglamentos cubanos
La Habana, 29 abr (PL) La autonomía empresarial constituye tema prioritario de las autoridades cubanas en estos momentos con la finalidad de reforzar el sistema económico socialista, tal y como resalta hoy en el panorama de este archipiélago.Un grupo de directivos vinculados con este reordenamiento explicaron las peculiaridades de los reglamentos, capaces de otorgar toque de distinción a la búsqueda de soluciones económicas.
La directora de Perfeccionamiento Empresarial del Ministerio de Economía y Planificación, Iris Carrazana, y la directora de Relaciones Internacionales y Comunicación Social del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Mirian Lau, mostraron detalles del tema.
Junto a estas directivas, también aclararon dudas la jefa del área de perfeccionamiento de entidades de la Comisión Permanente de Implementación y Seguridad, Grisel Tristá, y la viceministra del Ministerio de Trabajo y Seguridad, Maria Molina.
Dicho equipo lo completó el director general de la Política Fiscal del Ministerio de Finanzas y Precios, Adalberto Carbonel, y la directora Jurídica del Ministerio de Economía y Planificación, Jhosns Ordriozola.
Esos voceros significaron que la empresa estatal socialista constituye la forma fundamental de gestión del modelo económico cubano, de ahí que dotarla de mayor autonomía constituye imperativo para elevar sus niveles de eficiencia y competitividad.
Concordaron los expertos en el beneficio que aportan las recién publicadas normas (Gaceta Oficial de la República de Cuba, edición extraordinaria número 21).
Subrayaron que las normas jurídicas aprobadas significan un paso más en pos de separar las funciones estatales de las empresariales, y permiten a la empresa estatal conducir las transformaciones en medio del proceso de actualización.
De tal suerte, estos cambios permiten la vinculación del salario con los resultados, de modo que se eliminan los límites administrativos, y solo permanecen regulaciones de carácter económico y financiero.
Enfatizaron que las resoluciones sobre finanzas y precios determinan el nuevo sistema de relaciones financieras al interior de la organización empresarial, y de esta con el presupuesto del estado, camino para un procedimiento adecuado en el caso de fijar el precio mayorista de las producciones excedentes.
Este conjunto de normas, aclararon, no son las únicas que inciden en los cambios de la empresa estatal socialista, pues desde los lineamientos del Partido Comunista de Cuba (PCC) se crearon las bases para una mayor independencia empresarial.
La descentralización de funciones, acotaron, lleva implícito un incremento de la responsabilidad en la actividad empresarial y una mayor preparación de sus directivos.
La directora de Perfeccionamiento Empresarial del Ministerio de Economía y Planificación, Iris Carrazana, y la directora de Relaciones Internacionales y Comunicación Social del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Mirian Lau, mostraron detalles del tema.
Junto a estas directivas, también aclararon dudas la jefa del área de perfeccionamiento de entidades de la Comisión Permanente de Implementación y Seguridad, Grisel Tristá, y la viceministra del Ministerio de Trabajo y Seguridad, Maria Molina.
Dicho equipo lo completó el director general de la Política Fiscal del Ministerio de Finanzas y Precios, Adalberto Carbonel, y la directora Jurídica del Ministerio de Economía y Planificación, Jhosns Ordriozola.
Esos voceros significaron que la empresa estatal socialista constituye la forma fundamental de gestión del modelo económico cubano, de ahí que dotarla de mayor autonomía constituye imperativo para elevar sus niveles de eficiencia y competitividad.
Concordaron los expertos en el beneficio que aportan las recién publicadas normas (Gaceta Oficial de la República de Cuba, edición extraordinaria número 21).
Subrayaron que las normas jurídicas aprobadas significan un paso más en pos de separar las funciones estatales de las empresariales, y permiten a la empresa estatal conducir las transformaciones en medio del proceso de actualización.
De tal suerte, estos cambios permiten la vinculación del salario con los resultados, de modo que se eliminan los límites administrativos, y solo permanecen regulaciones de carácter económico y financiero.
Enfatizaron que las resoluciones sobre finanzas y precios determinan el nuevo sistema de relaciones financieras al interior de la organización empresarial, y de esta con el presupuesto del estado, camino para un procedimiento adecuado en el caso de fijar el precio mayorista de las producciones excedentes.
Este conjunto de normas, aclararon, no son las únicas que inciden en los cambios de la empresa estatal socialista, pues desde los lineamientos del Partido Comunista de Cuba (PCC) se crearon las bases para una mayor independencia empresarial.
La descentralización de funciones, acotaron, lleva implícito un incremento de la responsabilidad en la actividad empresarial y una mayor preparación de sus directivos.
Turistas prefieren rutas ecoturísticas en Viñales, patrimonio mundial
Por Adalys Pilar Mireles
Pinar del Río, Cuba, 29 abr (PL) Atraídos por los paisajes de Viñales, viajeros europeos y de otros continentes recorren hoy los nuevos senderos ecoturísticos de esa localidad cubana, cuyo valle y poblado poseen la categoría de Paisaje Cultural de la Humanidad.Entre las rutas preferidas por los visitantes sobresale Entre valles y montañas, un periplo por la región donde abundan los mogotes y rocas de tiempos jurásicos, comentó a Prensa Latina Yamira Valdés, especialista principal del Parque Nacional radicado en ese paraje.
Igualmente llamativas -dijo- resultan las ofertas para apreciar tradiciones campesinas del lugar, tanto agrarias como artísticas, y el itinerario por vegas de la occidental demarcación, distante 160 kilómetros de La Habana.
Las opciones del turismo de naturaleza incluyen, además, un paseo Del infierno al paraíso, el cual permite observar la diversidad de la flora local y la abundancia de aves, agregó.
Ese itinerario abarca parte del área ocupada antiguamente por los Acuáticos, llamados así por su culto al agua.
Un total de 16 senderos comercializa actualmente el Parque Nacional Viñales, entre las propuestas destaca la caminata por el sistema Palmarito, clasificado entre los mayores de América Latina y que se suma a la tradicional escalada para escrutar uno de los niveles de la gran caverna Santo Tomás, confirmó Yoel Martínez, director de esa institución científica.
El safari en jeep o vuelta completa por ese sitio a modo de expedición contemplativa es otra de las novedades del turismo en la zona, patrimonio mundial.
Tanto el valle de Viñales como el pueblo que lo circunda fueron declarados Paisaje Cultural de la Humanidad en 1999 por el concierto hombre-entorno y la conservación de prácticas asociadas al cultivo del tabaco y a viejas celebraciones como los guateques o fiestas campestres.
Casi 11 mil visitantes, en su mayoría extranjeros, optaron en 2013 por el turismo de naturaleza en el municipio pinareño, distinguido también como capital del carso insular debido a sus numerosas grutas.
Compuesto por casonas de estilo colonial y acogedores restaurantes, el poblado principal data de inicios del siglo XIX y resalta por la preservación de su arquitectura vernácula.
Viviendas techadas con tejas criollas -hechas de barro cocido-, patios interiores y amplias verjas caracterizan al pintoresco asentamiento, al que se llega por una única y zigzagueante vía entre lomas.
Tres hoteles acogen a los recién llegados, además de decenas de casas cuyos propietarios alquilan una o varias habitaciones.
Rechazan cancilleres de Cuba y Rusia sanciones contra Moscú
La Habana, 29 abr (PL) Cuba y Rusia rechazaron hoy las sanciones impuestas contra Moscú por Estados Unidos y gobiernos occidentales, durante conversaciones oficiales sostenidas aquí por los cancilleres Bruno Rodríguez y Serguei Lavrov.
El titular de Relaciones Exteriores de la isla consideró como una amenaza a la paz y a la seguridad internacional el despliegue de tropas de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) en las adyacencias del territorio ruso.
Rodríguez subrayó que su país rechaza enérgicamente la imposición de sanciones a Rusia por "los mismos que desatan guerras de conquista" e intervienen para desestabilizar gobiernos soberanos.
Respecto al conflicto con Ucrania, Lavrov dijo que Moscú favorece el diálogo nacional en ese país, que tome en cuenta los intereses de todas las regiones. Las sanciones contra Rusia están fuera de todo sentido común, acotó.
Subrayó que Washington y sus aliados occidentales pretenden echar la culpa a otro por su responsabilidad en el golpe de Estado en Ucrania.
Los cancilleres de Cuba y Rusia coincidieron en el buen estado de las relaciones bilaterales, que Lavrov calificó como vínculos de hermandad. Encomiaron además el diálogo y coordinación en los organismos internacionales sobre la base de una amplia coincidencia.
Ambas partes pasaron revista a los acuerdos económicos y comerciales vigentes hasta el año 2020, que según el ministro de Relaciones Exteriores ruso abarcan, entre otros, los sectores de farmacia, energía e infraestructura.
En tal sentido adelantó que los nexos económicos se potenciarán por el interés del empresariado de su país en la nueva ley de inversión extranjera cubana.
Vaticinó una amplia participación de inversionistas de su país en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel, al oeste de aquí, donde se construyó una terminal portuaria y se erige un parque industrial a tono con la actualización del modelo económico cubano.
América Latina está jugando un papel de vanguardia en la construcción de un mundo policéntrico, aseguró, y valoró positivamente los nexos de Rusia con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Felicitamos a Cuba por su presidencia en la Celac y por la exitosa cumbre realizada en La Habana, agregó.
En la propia ocasión, Lavrov condecoró a su homólogo cubano y al viceministro de Relaciones Exteriores, Abelardo Moreno, con la distinción "Por la Cooperación", que otorga el Ministerio de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia.
Cuba fue la primera etapa de una gira latinoamericana del canciller ruso.
El titular de Relaciones Exteriores de la isla consideró como una amenaza a la paz y a la seguridad internacional el despliegue de tropas de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) en las adyacencias del territorio ruso.
Rodríguez subrayó que su país rechaza enérgicamente la imposición de sanciones a Rusia por "los mismos que desatan guerras de conquista" e intervienen para desestabilizar gobiernos soberanos.
Respecto al conflicto con Ucrania, Lavrov dijo que Moscú favorece el diálogo nacional en ese país, que tome en cuenta los intereses de todas las regiones. Las sanciones contra Rusia están fuera de todo sentido común, acotó.
Subrayó que Washington y sus aliados occidentales pretenden echar la culpa a otro por su responsabilidad en el golpe de Estado en Ucrania.
Los cancilleres de Cuba y Rusia coincidieron en el buen estado de las relaciones bilaterales, que Lavrov calificó como vínculos de hermandad. Encomiaron además el diálogo y coordinación en los organismos internacionales sobre la base de una amplia coincidencia.
Ambas partes pasaron revista a los acuerdos económicos y comerciales vigentes hasta el año 2020, que según el ministro de Relaciones Exteriores ruso abarcan, entre otros, los sectores de farmacia, energía e infraestructura.
En tal sentido adelantó que los nexos económicos se potenciarán por el interés del empresariado de su país en la nueva ley de inversión extranjera cubana.
Vaticinó una amplia participación de inversionistas de su país en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel, al oeste de aquí, donde se construyó una terminal portuaria y se erige un parque industrial a tono con la actualización del modelo económico cubano.
América Latina está jugando un papel de vanguardia en la construcción de un mundo policéntrico, aseguró, y valoró positivamente los nexos de Rusia con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Felicitamos a Cuba por su presidencia en la Celac y por la exitosa cumbre realizada en La Habana, agregó.
En la propia ocasión, Lavrov condecoró a su homólogo cubano y al viceministro de Relaciones Exteriores, Abelardo Moreno, con la distinción "Por la Cooperación", que otorga el Ministerio de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia.
Cuba fue la primera etapa de una gira latinoamericana del canciller ruso.
lunes, 28 de abril de 2014
Poniendo nuevas preguntas sobre la mesa.
Suplemento Digital No.249 / Abril 2014
Poniendo nuevas preguntas sobre la mesa.
Apuntes para una Introducción a un volumen de Espacio Laical.
El presente trabajo constituye un análisis del destacado economista cubano Pedro Monreal. En el mismo el autor ofrece una mirada estratégica, clara y efectiva, acerca de la renovación económica cubana. Con este aporte el reconocido Profesor efectúa, además, la apertura de un libro que edita Espacio Laical con una compilación de los mejores trabajos publicados en sus páginas sobre la economía cubana. Este texto se titula Desafíos económicos de Cuba. Apuntes para el debate, y muy pronto podrá ser leído por nuestros lectores.
La publicación del presente volumen sobre la economía cubana se orienta, como el resto de las iniciativas editoriales de Espacio Laical y de otras instituciones del país, a difundir ideas que pudieran proporcionar claves para mejorar nuestra comprensión acerca de una transformación social arrolladora que francamente no creo que entendamos adecuadamente. Mucho de lo que sucede en Cuba parece ajustarse a una situación en la que, parafraseando a Marx, “lo sólido se desvanece en el aire” y de la cual apenas alcanzamos a aprehender sus manifestaciones más punzantes.
No se trata solamente del habitual desfasaje entre la práctica social y su teorización, ante la cual solo cabe la modestia intelectual del investigador. Pudiera ser también el resultado de que las reflexiones sobre el cambio actual en Cuba todavía no han podido llegar, por cuestiones de enfoque y método, a “la simplicidad que se encuentra al otro lado de la complejidad” postulada por Oliver Wendell Holmes. En otras palabras, que quizás no podemos ver las cosas claramente porque los instrumentos de análisis que nos empeñamos en utilizar no son los adecuados para lidiar con la complejidad del fenómeno que tratamos de descifrar.
¿Se trata de un déficit fortuito del análisis o una insuficiencia académica inducida? La verdad es que eso no me queda claro pero lo que me atrevo a afirmar es que, en cualquier caso, la incitación al debate pudiera ser una buena manera de avanzar en la solución del problema y por esa razón la compilación de textos sobre economía cubana publicada por Espacio Laical es muy oportuna. Se trata de un volumen que, quizás precisamente por haber sido “ensamblado” a partir de componentes que fueron diseñados y producidos de manera autónoma y en momentos distintos, ofrece al lector la oportunidad de constatar la extensión y abigarrada diversidad de lo que pretende ser entendido por un grupo representativo –pero lejos de estar completo- de economistas cubanos que abarca al menos tres generaciones distintas con disímiles trayectorias profesionales. Son los casos de Carmelo Mesa-Lago, Jorge Piñón, Omar Everleny Pérez, Arturo López-Levy, Pavel Vidal Alejandro y de mí mismo.
Es, por tanto, una recopilación que no solamente incluye el valor intrínseco de cada uno y de todos los textos que la integran sino que también ofrece la conveniencia de poder identificar a través de una sola lectura algunas de las áreas sobre las que debería reflexionarse con más ahínco y probablemente de una manera distinta a como se hace hoy, para poder avanzar en el análisis de las transformaciones sociales en Cuba. Asumiendo que es muy probable que este volumen sea leído por lectores avezados aunque no necesariamente expertos en economía, lo que realmente importaría preguntarnos es: ¿qué “sacaría en limpio” un lector después de haber revisado esta compilación?
Quizás lo primero que pudiera venirnos a la mente, alterando la famosa cita de Clemenceau referida a la guerra, es que la economía es demasiado importante como para dejarla en manos de los economistas. Ese fue, al menos en mi caso, el corolario de la lectura del conjunto de textos. Se trata de una afirmación muy seria que expreso con el mayor respeto por las ciencias económicas. De hecho, lejos de caricaturizar, considero que tal apreciación elogia el trabajo de los economistas porque coloca en perspectiva la intrincada naturaleza del problema que les corresponde comprender. Lo que sucede es que cuando nos referimos al cambio económico en cualquiera de sus variantes (por ejemplo: crecimiento, desarrollo, modificación de modelo, cambio de políticas económicas, o nueva estrategia, entre otros) en rigor de lo que estamos hablando es solamente de uno de los componentes de una transformación social mayor. Eso significa, ni más ni menos, tener que adentrarnos en la interpretación del cambio de sistemas sociales complejos, un proceso respecto al cual los enfoques disciplinarios poco pueden aportar por separado. No se trata, por supuesto, de un problema nuevo. Desde hace ya varias décadas existe una clara conciencia –Cuba incluida- acerca de la necesidad de enfoques transdisciplinarios y de las ventajas que el pensamiento sistémico ofrece para entender la complejidad social.
Sin embargo, llama la atención la insistencia con la que los economistas cubanos –salvo contadas excepciones- nos empeñamos en arrimar la brasa a nuestra sardina en lo tocante al análisis de las transformaciones sociales actuales en Cuba.
Creo que este es un problema real y se refleja, entre otras cosas, en la propia terminología que utilizamos, a veces por convicción y otras simplemente por conveniencia de comunicación. ¿Es adecuado asumir que el cambio social en Cuba consiste esencialmente en una “actualización del modelo económico”? ¿Expresa tal término (que no es un concepto científico) la complejidad social del cambio que ya viene ocurriendo en el país y de lo que pudiera estar por llegar? ¿Reflejan debidamente los análisis sobre la “actualización” la multiplicidad y la no linealidad de las relaciones entre las diversas dimensiones del cambio? ¿Es apropiado utilizar términos como “población en riesgo” o “trabajadores excedentes” cuando ya existen categorías precisas en las ciencias sociales que expresan mejor el contenido de los fenómenos en discusión? De hecho, hay una importante pregunta adicional cuyas posibles respuestas tendrían una relevancia que rebasa lo académico: ¿resulta admisible la proposición de que puede planificarse un cambio que no se entiende bien que cosa es?
De entrada, deben quedar claras dos cuestiones: primero, que no se trata de que para conducir el cambio social necesariamente deba entenderse previamente su complejidad. Eso no es lo que estoy diciendo. En realidad, la mayoría de los cambios sociales han sido y continúan siendo conducidos (que no es lo mismo que planificados) en ausencia de un entendimiento ex ante. La política es, para decirlo rápido, un oficio aprendido a través de la práctica en la que también influyen “intangibles” como la intuición y el carisma y que no requiere necesariamente de una concepción científica previa. La observación crítica que he hecho se refiere a otro asunto: a la pretensión, ocasionalmente proyectada, de que estamos en presencia en Cuba de un cambio social cuya complejidad ya ha sido científicamente comprendida en lo esencial, o cuando menos vislumbrada, y que por tanto el cambio puede planificarse más o menos convenientemente en ciertas direcciones y determinadas secuencias. Sin embargo, eso es algo respecto a lo cual no parece existir evidencia verificable.
Segundo, que no es suficiente tratar de entender el cambio social solamente, o fundamentalmente, desde una perspectiva científica porque la transformación de la sociedad es siempre –en alto grado- un proceso asentado en premisas normativas basadas en valores y consideraciones éticas. Estas no solamente adornan el discurso sino que definen, en compleja interacción con los intereses, el liderazgo del cambio así como los objetivos, prioridades y modalidades del mismo. Por ejemplo, ¿cómo debe definirse el sujeto social de “la actualización”, como individuo/ciudadano o como individuo/consumidor?; ¿Debe pensarse en la pobreza –que hoy en Cuba es visible y extendida- como una cuestión relacionada con la ayuda al pobre o con el empoderamiento político del pobre? ¿Debe la protección del medio ambiente –dimensión indispensable del desarrollo, especialmente en una pequeña Isla- centrarse en preocupaciones humanas o debe asentarse en una ética no-antropocéntrica?
Las reflexiones actuales de los científicos sociales, incluidos los economistas, también deberían hacer mayor énfasis acerca de la propia razón de la investigación social en Cuba: ¿se concibe fundamentalmente esta como una crítica social sustantiva, incluyendo la exploración de problemas sistémicos, o debe orientarse fundamentalmente a producir propuestas de política, usualmente encaminadas a sugerir soluciones a problemas concretos? De nuevo nos encontramos aquí ante un tema tradicional. En principio, pudiera considerarse que las respuestas no tienen que ser excluyentes. Pudieran complementarse, pero ello no ocurriría de cualquier manera. En cualquier caso, existen hoy importantes aspectos relativos al cambio social en Cuba en los que un énfasis excesivo en las tareas utilitarias de las ciencias económicas pudiera estar diluyendo su contribución en cuanto a crítica social imprescindible. El tema de la pobreza es probablemente uno de los que necesita ser sometido a una indagación crítica más aguda que la que se hace hoy. ¿Es la pobreza en Cuba una aberración social circunstancial o una falla sistémica?
Obviamente habría aquí una dimensión institucional que requiere ser entendida y posiblemente rectificada pues las instituciones políticas tienen un poderoso impacto en la definición de la agenda académica. Se trata de un asunto complicado respecto al cual solamente llamo aquí la atención pero que pudiera ser parte de una reflexión más profunda acerca de algunos temas aparentemente transformados en “sentido común” o en vías de llegar a serlo, sobre los que se supone que las ciencias sociales deberían estar haciendo una reflexión crítica muy activa, aunque ese no parece ser el caso.
Reclamar la importancia de lo económico parece apoyarse hoy en una aseveración frecuentemente escuchada en Cuba acerca de que primero se necesita producir para distribuir después, lo anterior es muy discutible pues ¿no influyen acaso determinadas nociones sobre la distribución en las decisiones sobre la producción (qué se produce, cómo se produce y para quien se produce)? La utilización de términos como “sociedad socialista próspera y sostenible” exige de entrada discusiones sobre el socialismo contemporáneo, sobre la “prosperidad” (o pudiera ser también sobre el bienestar humano) y sobre la “sostenibilidad”, incluida no solo la sostenibilidad ambiental, sino también la sostenibilidad económica y la social.
Ciertamente, parte de lo que se publica actualmente sobre la economía cubana es el resultado de investigaciones, algo que es evidente en el estudio de casos (empresas, cooperativas, comunidades, etc.) y de temas específicos como algunos de los abordados en las contribuciones que conforman este volumen. Sin embargo, la proyección integral del modelo social (no solamente económico) con el cual intenta reemplazarse el actual estado de cosas en Cuba no parece ser, la mayoría de las veces, el resultado de una secuencia estándar de investigación social: recolección de datos, análisis de datos, interpretación de datos y recomendaciones. Al menos ese es el caso de una parte considerable de lo que ha sido publicado y por tanto de lo que pudiera ser relevante para el debate público. Es decir, que en vez de reflejar investigación social “pura y dura” basada en el análisis de la evidencia, en muchos casos la prefiguración sistémica del modelo de sociedad al que desea llegarse parece ubicarse más en el plano de la opinión y del ensayo social que en el del resultado de la investigación social. No es que emitir opiniones este mal o sea algo inferior a la investigación. De hecho es muy positivo tener y poder expresar opiniones. Lo que me interesa anotar es que las opiniones y los resultados de investigación son cosas distintas, aunque pudiesen estar relacionadas.
Pero no solamente se requiere del pensamiento sistémico y de la investigación social a la hora de interpretar la transformación social y de elaborar propuestas relativas al cambio. También es necesario que los economistas aborden de frente la dimensión política, yo diría eminentemente política, de la transformación social en curso, en parte resultante de una “actualización” que está siendo profundamente impactada por las dinámicas de un evento político inédito en las cinco últimas décadas en el país -un ejercicio masivo de transferencia generacional del poder político- que inevitablemente se asocia al intento de construcción de una nueva gobernanza en Cuba. Cualquier transformación social de mediana intensidad y alcance involucra, por lo general, modificaciones relativas –a veces absolutas- de poder político. Cuando la transformación social es significativa, puede ocurrir un cambio sustancial en la correlación del poder entre clases sociales (como ocurrió en Cuba a inicios de los sesenta del pasado siglo) pero en ocasiones las modificaciones del poder político pueden ser de otro tipo, menos visibles y más difíciles de clasificar, y este es un tema que entra de lleno en lo que se supone que deben ser las preocupaciones de los economistas.
El propio proceso de desarrollo, muy frecuentemente definido de una manera reduccionista en términos económicos, también es asumido por una parte de las ciencias sociales como un proceso de empoderamiento político. Para ser más precisos, se trataría del desarrollo concebido como un proceso asentado en la redistribución del poder político de modo tal que permita incrementar la capacidad de los grupos sociales “desfavorecidos” (por ejemplo los pobres y los discriminados por cualquier motivo) para decidir sus propias opciones y poder actuar efectivamente para transformar la realidad social de acuerdo a sus intereses.
Esa es una perspectiva del desarrollo económico que desplaza la atención desde la modelación económica, que a fin de cuentas es una abstracción, hacia el plano concreto en el cual se define el bienestar de la gente: la política. Las cosas deben ser asumidas tal y como son: el desarrollo es siempre una cuestión eminentemente política. Correspondería, por tanto, que ello ocupase un lugar central en las reflexiones que hacen hoy los economistas sobre las transformaciones sociales en Cuba. En ese sentido, habría que incorporar al menos cuatro dimensiones relevantes al debate sobre “la actualización”: a) el basamento moral sobre el cual debe erigirse la política nacional; b) una visión de la política económica, de la política social y del desarrollo basada en un enfoque de derechos humanos; c) la ciudadanía social como vía de empoderamiento político; y d) el empoderamiento legal imprescindible para asegurar la exigibilidad y justiciabilidad de los derechos. Cualquier posible objeción respecto a que esos asuntos no son temas propios de los economistas debiera ser contrastada con el hecho de que el desarrollo de las ciencias económicas precisamente ha girado en buena medida alrededor de esos temas. De Smith y Marx a Stiglitz y Sen, pasando por Marshall, Keynes, Friedman, Prebisch, Aníbal Pinto, Celso Furtado, Arthur Lewis y Norman Girvan, la moral y la política han sido preocupaciones centrales de los economistas.
El principal asunto del debate público en Cuba, especialmente en lo relativo a “la actualización”, debería ser la base moral de la estrategia y de las políticas del cambio social. Esa base moral debería ser la solidaridad social: la noción de que ciudadanos libres y con derechos se preocupan mutuamente por los problemas de los demás y actuando, desde la responsabilidad individual y social, resuelven efectivamente esos problemas mediante diferentes mecanismos, incluyendo la utilización de los medios del Estado. Se trataría de una moral asentada en el compromiso de ayudar y de proteger a los demás y de actuar positivamente para materializar tal compromiso. Es una cuestión importante porque no existe ninguna garantía automática de que sea esta la noción que finalmente prevalezca como fundamento moral de la sociedad cubana. Se requiere de una movilización política popular que defienda, en disputa con visiones alternativas, la solidaridad social como premisa moral de la transformación social en Cuba. Esta sería una plataforma moral compartida por personas de diferentes credos y sectores de la sociedad. Resulta esencial que se hable de las políticas económicas comunicando claramente los valores sociales que están detrás de esas políticas.
¿Pudieran los economistas contribuir a esa alineación deseable entre las políticas económicas y una moral del cambio social basada en la solidaridad humana? Ciertamente, y quizás un buen lugar para comenzar –aunque no suficiente por sí mismo- sería la influencia que pudieran tener los economistas en modificar algunos aspectos de la narrativa sobre “la actualización”. Por una parte, hay ciertos términos que están siendo utilizados –por académicos y funcionarios- que se aproximan más a una noción moral exclusivamente basada en la responsabilidad individual (generalmente asociada al pensamiento conservador) que a una moral asentada en la solidaridad social. Ese pudiera ser el caso, por ejemplo, del énfasis (que considero desproporcionado) en relación con la crítica que se le hace al llamado “igualitarismo”, sin que tal crítica sea claramente comprensible. ¿Es realmente el “igualitarismo” –como quiera que se le defina- un problema más importante que la creciente desigualdad social del país? ¿De qué manera una denuncia al llamado “igualitarismo” puede ser compatible con la solidaridad social? Por otra parte, están las metáforas que se utilizan actualmente en Cuba. Las metáforas son importantes porque influyen significativamente en la vida de los individuos y en la sociedad a partir del papel que desempeñan en la explicación de fenómenos sociales complejos, como pudiera ser el caso de “la actualización”. El discurso importa porque el lenguaje, repetido una y otra vez, es un factor en la formación del conocimiento y en el posicionamiento político que de ello pudiera derivarse. Las metáforas son parte de los mecanismos inconscientes que permiten estructurar las políticas. En ese sentido, las metáforas del “estado papá” y del “pichón”, que han sido utilizadas en el contexto de “la actualización”, también parecerían tener más afinidad con las grandes metáforas del pensamiento conservador contemporáneo (la visión de la nación como una familia centrada en un padre estricto con hijos que son educados para ser independientes) que con una visión moral estructurada alrededor de la solidaridad social. Valdría la pena tomar nota de este asunto.
Los economistas también pudieran hacer una contribución importante en lo relativo a la función crucial que deben desempeñar los derechos económicos y sociales, sobre todo teniendo en cuenta el papel que se le concede en el discurso oficial a los mecanismos de protección social, codificados usualmente como “logros de la Revolución” y que parecen ser apoyados por una parte mayoritaria de la población. Tal contribución pudiera consistir, entre algunos aspectos, en articular convincentemente en el contexto del debate sobre la “actualización” la noción de que el bienestar de las personas y de la sociedad es un derecho humano que se materializa en una serie de prestaciones sociales, libertades y riqueza espiritual. Estas no son el resultado de la filantropía de “los que tienen” (fuera y dentro del país), tampoco son dádivas que ofrece pródigamente el Estado, ni deben ser vistas como una variable de ajuste (para reducir gasto público) a la hora de enfrentar desequilibrios presupuestarios. Cuando el bienestar social es enfocado desde una perspectiva de derechos humanos cualquier retroceso debe ser considerado como inaceptable. ni deben ser una variable de ajuste frente a la carencia de recursos. Cada acción de política económica debe ser “puesta frente al espejo” de los derechos humanos. Dos preguntas deberían ser siempre respondidas al diseñar las políticas económicas: ¿están siendo incorporados los derechos humanos en las políticas?; y ¿se encuentran reflejadas las normas legales en materia de derechos humanos en las metas de política y en la sustancia de los indicadores utilizados para medir el progreso de las mismas?
La ciudadanía social, entendida como resultado del proceso histórico que estableció mecanismos niveladores (p.ej. la seguridad social, los sistemas de salud pública o el acceso universal a la educación) que permitieron contrarrestar la llamada “exclusión primaria” generada por procesos de desempoderamiento extremos en los mercados básicos, como el mercado de capital y el mercado laboral, también debería ser objeto de debate en Cuba. En un contexto en el que se le han creado espacios al capital y al mercado, el análisis de la ciudadanía social es pertinente. ¿En qué medida pudiera resultar “la actualización” en una redefinición del sujeto y de los derechos de la ciudadanía social? ¿Pudiera pensarse en un desplazamiento del sujeto social concebido como “trabajador con derecho”, que implica un estatuto no mercantil de su trabajo, a un sujeto social concebido como “consumidor”, favorecido con un derecho a un consumo mínimo? En ese sentido, la discusión actual, por ejemplo, sobre la “libreta de abastecimiento” no debería ser vista desde la perspectiva estrecha de un programa para la gestión de riesgo social sino desde la óptica más amplia de ciudadanía social.
El aspecto legal relativo a la materialización de los derechos en el contexto de la “actualización” es importante. No basta con que los derechos estén reconocidos por la Constitución y por las leyes, y defendidos en los discursos. Es esencial que la materialización de los derechos económicos y sociales sean justiciables y exigibles, es decir, que exista una legislación específica que garantice el cumplimiento de las obligaciones que se derivan de un derecho dado y que contemple la existencia de remedios legales en caso de no cumplimiento y de violaciones. La preservación, e inclusive el mejoramiento de los “logros de la Revolución” necesitan de “candados legales” que sean sagazmente diseñados.
Vale anotar que la reflexión sobre el tema es mucho más amplia pues también incluye la discusión acerca de todos los derechos humanos, no solamente los económicos y sociales. El hecho de que los derechos humanos sean un “concepto discutible” (desde una perspectiva teórica) y de que sean objeto de divergencias políticas e ideológicas, a veces muy intensas, no significa que deban ser asumidos de forma fragmentada, según resulte conveniente. Asumir una visión integral de los derechos humanos, probablemente de manera paulatina, debería ser parte de las transformaciones sociales en Cuba. Será un proceso decidido en el terreno de la política pero respecto al cual las ciencias sociales pudieran hacer aportes. Una moral basada en la solidaridad social también debe incorporar la responsabilidad individual y los derechos civiles y políticos de las personas. Quizás sea este un proceso que demore algún tiempo en cuajar en el debate nacional pero me parece adecuado señalar que no debería ser considerado como algo racional para un científico social mirar hacia otro lado o esconder la cabeza en la arena cuando se plantee una discusión integral sobre los derechos humanos, algo que es relevante para el caso de los economistas por el simple hecho de que el desarrollo económico y social esencialmente consiste en la materialización de derechos humanos.
La manera en que se organizaría la participación popular en la definición, aplicación y control de la política económica, así como el perfeccionamiento de mecanismos existentes o la creación de nuevas formas de rendición de cuentas y de control popular (no solamente estatal) también son áreas de trabajo de los economistas. Los aspectos mencionados son componentes cruciales para el tipo de empoderamiento del cual debe resultar el desarrollo, por ejemplo, el poder que tendrían los previsibles beneficiarios de las políticas sociales en cuanto a participar en las decisiones (no solo en las consultas) sobre la asignación de recursos y en las modalidades de operación de prestaciones sociales claves como son la salud, la educación y la vivienda. Pudiera ser una manera, moralmente razonada, de movilizar políticamente en favor de la justicia social el sector de la población que Mayra Espina nos ha señalado que popularmente se identifica como quienes están “en el fondo del caldero”.
La distribución de recursos no es neutral para la materialización de los derechos económicos y sociales. Algunas variantes de distribución, tanto para el consumo como para la inversión, pueden tener un impacto más positivo que otras sobre la realización de los derechos, especialmente en condiciones de relativa penuria de recursos. Por ejemplo, el caso de las decisiones sobre la construcción y el mantenimiento de viviendas parece ser un área en la que los criterios de los posibles beneficiarios difícilmente pasen por consideraciones “técnicas” relativas a la eficiencia del proceso constructivo. Alcanzar una cuadratura de círculo en esta área pudiera ser muy complicado pero la variante de confiar la solución de los problemas habitacionales de Cuba al mercado (“por medios propios”) pudiera parecerle una propuesta exótica, e inaceptable, a muchos de quienes hoy no tienen un techo seguro. La complejidad relativa a cómo empoderar a la población no debería ser una justificación para suplantar la participación popular con burocracia y tecnocracia. ¿Pudieran las ciencias sociales, en particular las económicas, informar adecuadamente tal proceso? Seguramente pudieran hacerlo.
Es igualmente un tema pertinente para el debate económico en Cuba discutir frontalmente uno de los principales mitos que inexplicablemente parece haber encontrado un lugar bajo el sol en el debate sobre “la actualización”: la noción de que una combinación de empleo estatal, inversión de capital transnacional, pequeña producción mercantil predominantemente en su modalidad de subsistencia, actividad capitalista nacional, un puñado de cooperativas y una masa de desempleados que no parece tener posibilidades de inserción en la economía formal, puede ser una fase para avanzar hacia la prosperidad con justicia social. Quizás tenga que ver con eso a lo que Rafael Hernández ha llamado muy acertadamente “simplismo privado”.
Me percato de que he colocado en esta introducción muchas más interrogantes que respuestas y que no me he referido en detalle a los textos del volumen, pero es que más que un comentario sobre la compilación he considerado que resultaba oportuno insistir en la conveniencia de colocar los temas del debate económico contemporáneo en Cuba, reflejados en el volumen, en el contexto más amplio de la trasformación social en la que ha entrado el país. Es por tanto, también una invitación a que el lector explore otros resultados editoriales de Espacio Laical que han abordado diversas aristas del cambio social. Se dispone de una masa crítica de catálogos temáticos que facilitaría intentar hacer la conexión entre diferentes disciplinas para avanzar hacia un análisis integral del complejo sistema social actualmente en proceso de transformación en Cuba. Estimular a los lectores a sumarse activamente al debate público, desde los diferentes lugares que ocupan en la sociedad, ha sido el propósito principal de esta breve introducción.
La revista Espacio Laical puede ser vista en www.espaciolaical.org y adquirida en el Centro Cultural Padre Félix Varela,Tacón s/n entre Mercaderes y Chacón. La Habana Vieja , La Habana. CP 10100.
CRÉDITOS:
Equipo de redacción: P. Yosvany Carvajal, Roberto Veiga y Lenier González.
Diseño: Ballate
Poniendo nuevas preguntas sobre la mesa.
Apuntes para una Introducción a un volumen de Espacio Laical.
El presente trabajo constituye un análisis del destacado economista cubano Pedro Monreal. En el mismo el autor ofrece una mirada estratégica, clara y efectiva, acerca de la renovación económica cubana. Con este aporte el reconocido Profesor efectúa, además, la apertura de un libro que edita Espacio Laical con una compilación de los mejores trabajos publicados en sus páginas sobre la economía cubana. Este texto se titula Desafíos económicos de Cuba. Apuntes para el debate, y muy pronto podrá ser leído por nuestros lectores.
La publicación del presente volumen sobre la economía cubana se orienta, como el resto de las iniciativas editoriales de Espacio Laical y de otras instituciones del país, a difundir ideas que pudieran proporcionar claves para mejorar nuestra comprensión acerca de una transformación social arrolladora que francamente no creo que entendamos adecuadamente. Mucho de lo que sucede en Cuba parece ajustarse a una situación en la que, parafraseando a Marx, “lo sólido se desvanece en el aire” y de la cual apenas alcanzamos a aprehender sus manifestaciones más punzantes.
No se trata solamente del habitual desfasaje entre la práctica social y su teorización, ante la cual solo cabe la modestia intelectual del investigador. Pudiera ser también el resultado de que las reflexiones sobre el cambio actual en Cuba todavía no han podido llegar, por cuestiones de enfoque y método, a “la simplicidad que se encuentra al otro lado de la complejidad” postulada por Oliver Wendell Holmes. En otras palabras, que quizás no podemos ver las cosas claramente porque los instrumentos de análisis que nos empeñamos en utilizar no son los adecuados para lidiar con la complejidad del fenómeno que tratamos de descifrar.
¿Se trata de un déficit fortuito del análisis o una insuficiencia académica inducida? La verdad es que eso no me queda claro pero lo que me atrevo a afirmar es que, en cualquier caso, la incitación al debate pudiera ser una buena manera de avanzar en la solución del problema y por esa razón la compilación de textos sobre economía cubana publicada por Espacio Laical es muy oportuna. Se trata de un volumen que, quizás precisamente por haber sido “ensamblado” a partir de componentes que fueron diseñados y producidos de manera autónoma y en momentos distintos, ofrece al lector la oportunidad de constatar la extensión y abigarrada diversidad de lo que pretende ser entendido por un grupo representativo –pero lejos de estar completo- de economistas cubanos que abarca al menos tres generaciones distintas con disímiles trayectorias profesionales. Son los casos de Carmelo Mesa-Lago, Jorge Piñón, Omar Everleny Pérez, Arturo López-Levy, Pavel Vidal Alejandro y de mí mismo.
Es, por tanto, una recopilación que no solamente incluye el valor intrínseco de cada uno y de todos los textos que la integran sino que también ofrece la conveniencia de poder identificar a través de una sola lectura algunas de las áreas sobre las que debería reflexionarse con más ahínco y probablemente de una manera distinta a como se hace hoy, para poder avanzar en el análisis de las transformaciones sociales en Cuba. Asumiendo que es muy probable que este volumen sea leído por lectores avezados aunque no necesariamente expertos en economía, lo que realmente importaría preguntarnos es: ¿qué “sacaría en limpio” un lector después de haber revisado esta compilación?
Quizás lo primero que pudiera venirnos a la mente, alterando la famosa cita de Clemenceau referida a la guerra, es que la economía es demasiado importante como para dejarla en manos de los economistas. Ese fue, al menos en mi caso, el corolario de la lectura del conjunto de textos. Se trata de una afirmación muy seria que expreso con el mayor respeto por las ciencias económicas. De hecho, lejos de caricaturizar, considero que tal apreciación elogia el trabajo de los economistas porque coloca en perspectiva la intrincada naturaleza del problema que les corresponde comprender. Lo que sucede es que cuando nos referimos al cambio económico en cualquiera de sus variantes (por ejemplo: crecimiento, desarrollo, modificación de modelo, cambio de políticas económicas, o nueva estrategia, entre otros) en rigor de lo que estamos hablando es solamente de uno de los componentes de una transformación social mayor. Eso significa, ni más ni menos, tener que adentrarnos en la interpretación del cambio de sistemas sociales complejos, un proceso respecto al cual los enfoques disciplinarios poco pueden aportar por separado. No se trata, por supuesto, de un problema nuevo. Desde hace ya varias décadas existe una clara conciencia –Cuba incluida- acerca de la necesidad de enfoques transdisciplinarios y de las ventajas que el pensamiento sistémico ofrece para entender la complejidad social.
Sin embargo, llama la atención la insistencia con la que los economistas cubanos –salvo contadas excepciones- nos empeñamos en arrimar la brasa a nuestra sardina en lo tocante al análisis de las transformaciones sociales actuales en Cuba.
Creo que este es un problema real y se refleja, entre otras cosas, en la propia terminología que utilizamos, a veces por convicción y otras simplemente por conveniencia de comunicación. ¿Es adecuado asumir que el cambio social en Cuba consiste esencialmente en una “actualización del modelo económico”? ¿Expresa tal término (que no es un concepto científico) la complejidad social del cambio que ya viene ocurriendo en el país y de lo que pudiera estar por llegar? ¿Reflejan debidamente los análisis sobre la “actualización” la multiplicidad y la no linealidad de las relaciones entre las diversas dimensiones del cambio? ¿Es apropiado utilizar términos como “población en riesgo” o “trabajadores excedentes” cuando ya existen categorías precisas en las ciencias sociales que expresan mejor el contenido de los fenómenos en discusión? De hecho, hay una importante pregunta adicional cuyas posibles respuestas tendrían una relevancia que rebasa lo académico: ¿resulta admisible la proposición de que puede planificarse un cambio que no se entiende bien que cosa es?
De entrada, deben quedar claras dos cuestiones: primero, que no se trata de que para conducir el cambio social necesariamente deba entenderse previamente su complejidad. Eso no es lo que estoy diciendo. En realidad, la mayoría de los cambios sociales han sido y continúan siendo conducidos (que no es lo mismo que planificados) en ausencia de un entendimiento ex ante. La política es, para decirlo rápido, un oficio aprendido a través de la práctica en la que también influyen “intangibles” como la intuición y el carisma y que no requiere necesariamente de una concepción científica previa. La observación crítica que he hecho se refiere a otro asunto: a la pretensión, ocasionalmente proyectada, de que estamos en presencia en Cuba de un cambio social cuya complejidad ya ha sido científicamente comprendida en lo esencial, o cuando menos vislumbrada, y que por tanto el cambio puede planificarse más o menos convenientemente en ciertas direcciones y determinadas secuencias. Sin embargo, eso es algo respecto a lo cual no parece existir evidencia verificable.
Segundo, que no es suficiente tratar de entender el cambio social solamente, o fundamentalmente, desde una perspectiva científica porque la transformación de la sociedad es siempre –en alto grado- un proceso asentado en premisas normativas basadas en valores y consideraciones éticas. Estas no solamente adornan el discurso sino que definen, en compleja interacción con los intereses, el liderazgo del cambio así como los objetivos, prioridades y modalidades del mismo. Por ejemplo, ¿cómo debe definirse el sujeto social de “la actualización”, como individuo/ciudadano o como individuo/consumidor?; ¿Debe pensarse en la pobreza –que hoy en Cuba es visible y extendida- como una cuestión relacionada con la ayuda al pobre o con el empoderamiento político del pobre? ¿Debe la protección del medio ambiente –dimensión indispensable del desarrollo, especialmente en una pequeña Isla- centrarse en preocupaciones humanas o debe asentarse en una ética no-antropocéntrica?
Las reflexiones actuales de los científicos sociales, incluidos los economistas, también deberían hacer mayor énfasis acerca de la propia razón de la investigación social en Cuba: ¿se concibe fundamentalmente esta como una crítica social sustantiva, incluyendo la exploración de problemas sistémicos, o debe orientarse fundamentalmente a producir propuestas de política, usualmente encaminadas a sugerir soluciones a problemas concretos? De nuevo nos encontramos aquí ante un tema tradicional. En principio, pudiera considerarse que las respuestas no tienen que ser excluyentes. Pudieran complementarse, pero ello no ocurriría de cualquier manera. En cualquier caso, existen hoy importantes aspectos relativos al cambio social en Cuba en los que un énfasis excesivo en las tareas utilitarias de las ciencias económicas pudiera estar diluyendo su contribución en cuanto a crítica social imprescindible. El tema de la pobreza es probablemente uno de los que necesita ser sometido a una indagación crítica más aguda que la que se hace hoy. ¿Es la pobreza en Cuba una aberración social circunstancial o una falla sistémica?
Obviamente habría aquí una dimensión institucional que requiere ser entendida y posiblemente rectificada pues las instituciones políticas tienen un poderoso impacto en la definición de la agenda académica. Se trata de un asunto complicado respecto al cual solamente llamo aquí la atención pero que pudiera ser parte de una reflexión más profunda acerca de algunos temas aparentemente transformados en “sentido común” o en vías de llegar a serlo, sobre los que se supone que las ciencias sociales deberían estar haciendo una reflexión crítica muy activa, aunque ese no parece ser el caso.
Reclamar la importancia de lo económico parece apoyarse hoy en una aseveración frecuentemente escuchada en Cuba acerca de que primero se necesita producir para distribuir después, lo anterior es muy discutible pues ¿no influyen acaso determinadas nociones sobre la distribución en las decisiones sobre la producción (qué se produce, cómo se produce y para quien se produce)? La utilización de términos como “sociedad socialista próspera y sostenible” exige de entrada discusiones sobre el socialismo contemporáneo, sobre la “prosperidad” (o pudiera ser también sobre el bienestar humano) y sobre la “sostenibilidad”, incluida no solo la sostenibilidad ambiental, sino también la sostenibilidad económica y la social.
Ciertamente, parte de lo que se publica actualmente sobre la economía cubana es el resultado de investigaciones, algo que es evidente en el estudio de casos (empresas, cooperativas, comunidades, etc.) y de temas específicos como algunos de los abordados en las contribuciones que conforman este volumen. Sin embargo, la proyección integral del modelo social (no solamente económico) con el cual intenta reemplazarse el actual estado de cosas en Cuba no parece ser, la mayoría de las veces, el resultado de una secuencia estándar de investigación social: recolección de datos, análisis de datos, interpretación de datos y recomendaciones. Al menos ese es el caso de una parte considerable de lo que ha sido publicado y por tanto de lo que pudiera ser relevante para el debate público. Es decir, que en vez de reflejar investigación social “pura y dura” basada en el análisis de la evidencia, en muchos casos la prefiguración sistémica del modelo de sociedad al que desea llegarse parece ubicarse más en el plano de la opinión y del ensayo social que en el del resultado de la investigación social. No es que emitir opiniones este mal o sea algo inferior a la investigación. De hecho es muy positivo tener y poder expresar opiniones. Lo que me interesa anotar es que las opiniones y los resultados de investigación son cosas distintas, aunque pudiesen estar relacionadas.
Pero no solamente se requiere del pensamiento sistémico y de la investigación social a la hora de interpretar la transformación social y de elaborar propuestas relativas al cambio. También es necesario que los economistas aborden de frente la dimensión política, yo diría eminentemente política, de la transformación social en curso, en parte resultante de una “actualización” que está siendo profundamente impactada por las dinámicas de un evento político inédito en las cinco últimas décadas en el país -un ejercicio masivo de transferencia generacional del poder político- que inevitablemente se asocia al intento de construcción de una nueva gobernanza en Cuba. Cualquier transformación social de mediana intensidad y alcance involucra, por lo general, modificaciones relativas –a veces absolutas- de poder político. Cuando la transformación social es significativa, puede ocurrir un cambio sustancial en la correlación del poder entre clases sociales (como ocurrió en Cuba a inicios de los sesenta del pasado siglo) pero en ocasiones las modificaciones del poder político pueden ser de otro tipo, menos visibles y más difíciles de clasificar, y este es un tema que entra de lleno en lo que se supone que deben ser las preocupaciones de los economistas.
El propio proceso de desarrollo, muy frecuentemente definido de una manera reduccionista en términos económicos, también es asumido por una parte de las ciencias sociales como un proceso de empoderamiento político. Para ser más precisos, se trataría del desarrollo concebido como un proceso asentado en la redistribución del poder político de modo tal que permita incrementar la capacidad de los grupos sociales “desfavorecidos” (por ejemplo los pobres y los discriminados por cualquier motivo) para decidir sus propias opciones y poder actuar efectivamente para transformar la realidad social de acuerdo a sus intereses.
Esa es una perspectiva del desarrollo económico que desplaza la atención desde la modelación económica, que a fin de cuentas es una abstracción, hacia el plano concreto en el cual se define el bienestar de la gente: la política. Las cosas deben ser asumidas tal y como son: el desarrollo es siempre una cuestión eminentemente política. Correspondería, por tanto, que ello ocupase un lugar central en las reflexiones que hacen hoy los economistas sobre las transformaciones sociales en Cuba. En ese sentido, habría que incorporar al menos cuatro dimensiones relevantes al debate sobre “la actualización”: a) el basamento moral sobre el cual debe erigirse la política nacional; b) una visión de la política económica, de la política social y del desarrollo basada en un enfoque de derechos humanos; c) la ciudadanía social como vía de empoderamiento político; y d) el empoderamiento legal imprescindible para asegurar la exigibilidad y justiciabilidad de los derechos. Cualquier posible objeción respecto a que esos asuntos no son temas propios de los economistas debiera ser contrastada con el hecho de que el desarrollo de las ciencias económicas precisamente ha girado en buena medida alrededor de esos temas. De Smith y Marx a Stiglitz y Sen, pasando por Marshall, Keynes, Friedman, Prebisch, Aníbal Pinto, Celso Furtado, Arthur Lewis y Norman Girvan, la moral y la política han sido preocupaciones centrales de los economistas.
El principal asunto del debate público en Cuba, especialmente en lo relativo a “la actualización”, debería ser la base moral de la estrategia y de las políticas del cambio social. Esa base moral debería ser la solidaridad social: la noción de que ciudadanos libres y con derechos se preocupan mutuamente por los problemas de los demás y actuando, desde la responsabilidad individual y social, resuelven efectivamente esos problemas mediante diferentes mecanismos, incluyendo la utilización de los medios del Estado. Se trataría de una moral asentada en el compromiso de ayudar y de proteger a los demás y de actuar positivamente para materializar tal compromiso. Es una cuestión importante porque no existe ninguna garantía automática de que sea esta la noción que finalmente prevalezca como fundamento moral de la sociedad cubana. Se requiere de una movilización política popular que defienda, en disputa con visiones alternativas, la solidaridad social como premisa moral de la transformación social en Cuba. Esta sería una plataforma moral compartida por personas de diferentes credos y sectores de la sociedad. Resulta esencial que se hable de las políticas económicas comunicando claramente los valores sociales que están detrás de esas políticas.
¿Pudieran los economistas contribuir a esa alineación deseable entre las políticas económicas y una moral del cambio social basada en la solidaridad humana? Ciertamente, y quizás un buen lugar para comenzar –aunque no suficiente por sí mismo- sería la influencia que pudieran tener los economistas en modificar algunos aspectos de la narrativa sobre “la actualización”. Por una parte, hay ciertos términos que están siendo utilizados –por académicos y funcionarios- que se aproximan más a una noción moral exclusivamente basada en la responsabilidad individual (generalmente asociada al pensamiento conservador) que a una moral asentada en la solidaridad social. Ese pudiera ser el caso, por ejemplo, del énfasis (que considero desproporcionado) en relación con la crítica que se le hace al llamado “igualitarismo”, sin que tal crítica sea claramente comprensible. ¿Es realmente el “igualitarismo” –como quiera que se le defina- un problema más importante que la creciente desigualdad social del país? ¿De qué manera una denuncia al llamado “igualitarismo” puede ser compatible con la solidaridad social? Por otra parte, están las metáforas que se utilizan actualmente en Cuba. Las metáforas son importantes porque influyen significativamente en la vida de los individuos y en la sociedad a partir del papel que desempeñan en la explicación de fenómenos sociales complejos, como pudiera ser el caso de “la actualización”. El discurso importa porque el lenguaje, repetido una y otra vez, es un factor en la formación del conocimiento y en el posicionamiento político que de ello pudiera derivarse. Las metáforas son parte de los mecanismos inconscientes que permiten estructurar las políticas. En ese sentido, las metáforas del “estado papá” y del “pichón”, que han sido utilizadas en el contexto de “la actualización”, también parecerían tener más afinidad con las grandes metáforas del pensamiento conservador contemporáneo (la visión de la nación como una familia centrada en un padre estricto con hijos que son educados para ser independientes) que con una visión moral estructurada alrededor de la solidaridad social. Valdría la pena tomar nota de este asunto.
Los economistas también pudieran hacer una contribución importante en lo relativo a la función crucial que deben desempeñar los derechos económicos y sociales, sobre todo teniendo en cuenta el papel que se le concede en el discurso oficial a los mecanismos de protección social, codificados usualmente como “logros de la Revolución” y que parecen ser apoyados por una parte mayoritaria de la población. Tal contribución pudiera consistir, entre algunos aspectos, en articular convincentemente en el contexto del debate sobre la “actualización” la noción de que el bienestar de las personas y de la sociedad es un derecho humano que se materializa en una serie de prestaciones sociales, libertades y riqueza espiritual. Estas no son el resultado de la filantropía de “los que tienen” (fuera y dentro del país), tampoco son dádivas que ofrece pródigamente el Estado, ni deben ser vistas como una variable de ajuste (para reducir gasto público) a la hora de enfrentar desequilibrios presupuestarios. Cuando el bienestar social es enfocado desde una perspectiva de derechos humanos cualquier retroceso debe ser considerado como inaceptable. ni deben ser una variable de ajuste frente a la carencia de recursos. Cada acción de política económica debe ser “puesta frente al espejo” de los derechos humanos. Dos preguntas deberían ser siempre respondidas al diseñar las políticas económicas: ¿están siendo incorporados los derechos humanos en las políticas?; y ¿se encuentran reflejadas las normas legales en materia de derechos humanos en las metas de política y en la sustancia de los indicadores utilizados para medir el progreso de las mismas?
La ciudadanía social, entendida como resultado del proceso histórico que estableció mecanismos niveladores (p.ej. la seguridad social, los sistemas de salud pública o el acceso universal a la educación) que permitieron contrarrestar la llamada “exclusión primaria” generada por procesos de desempoderamiento extremos en los mercados básicos, como el mercado de capital y el mercado laboral, también debería ser objeto de debate en Cuba. En un contexto en el que se le han creado espacios al capital y al mercado, el análisis de la ciudadanía social es pertinente. ¿En qué medida pudiera resultar “la actualización” en una redefinición del sujeto y de los derechos de la ciudadanía social? ¿Pudiera pensarse en un desplazamiento del sujeto social concebido como “trabajador con derecho”, que implica un estatuto no mercantil de su trabajo, a un sujeto social concebido como “consumidor”, favorecido con un derecho a un consumo mínimo? En ese sentido, la discusión actual, por ejemplo, sobre la “libreta de abastecimiento” no debería ser vista desde la perspectiva estrecha de un programa para la gestión de riesgo social sino desde la óptica más amplia de ciudadanía social.
El aspecto legal relativo a la materialización de los derechos en el contexto de la “actualización” es importante. No basta con que los derechos estén reconocidos por la Constitución y por las leyes, y defendidos en los discursos. Es esencial que la materialización de los derechos económicos y sociales sean justiciables y exigibles, es decir, que exista una legislación específica que garantice el cumplimiento de las obligaciones que se derivan de un derecho dado y que contemple la existencia de remedios legales en caso de no cumplimiento y de violaciones. La preservación, e inclusive el mejoramiento de los “logros de la Revolución” necesitan de “candados legales” que sean sagazmente diseñados.
Vale anotar que la reflexión sobre el tema es mucho más amplia pues también incluye la discusión acerca de todos los derechos humanos, no solamente los económicos y sociales. El hecho de que los derechos humanos sean un “concepto discutible” (desde una perspectiva teórica) y de que sean objeto de divergencias políticas e ideológicas, a veces muy intensas, no significa que deban ser asumidos de forma fragmentada, según resulte conveniente. Asumir una visión integral de los derechos humanos, probablemente de manera paulatina, debería ser parte de las transformaciones sociales en Cuba. Será un proceso decidido en el terreno de la política pero respecto al cual las ciencias sociales pudieran hacer aportes. Una moral basada en la solidaridad social también debe incorporar la responsabilidad individual y los derechos civiles y políticos de las personas. Quizás sea este un proceso que demore algún tiempo en cuajar en el debate nacional pero me parece adecuado señalar que no debería ser considerado como algo racional para un científico social mirar hacia otro lado o esconder la cabeza en la arena cuando se plantee una discusión integral sobre los derechos humanos, algo que es relevante para el caso de los economistas por el simple hecho de que el desarrollo económico y social esencialmente consiste en la materialización de derechos humanos.
La manera en que se organizaría la participación popular en la definición, aplicación y control de la política económica, así como el perfeccionamiento de mecanismos existentes o la creación de nuevas formas de rendición de cuentas y de control popular (no solamente estatal) también son áreas de trabajo de los economistas. Los aspectos mencionados son componentes cruciales para el tipo de empoderamiento del cual debe resultar el desarrollo, por ejemplo, el poder que tendrían los previsibles beneficiarios de las políticas sociales en cuanto a participar en las decisiones (no solo en las consultas) sobre la asignación de recursos y en las modalidades de operación de prestaciones sociales claves como son la salud, la educación y la vivienda. Pudiera ser una manera, moralmente razonada, de movilizar políticamente en favor de la justicia social el sector de la población que Mayra Espina nos ha señalado que popularmente se identifica como quienes están “en el fondo del caldero”.
La distribución de recursos no es neutral para la materialización de los derechos económicos y sociales. Algunas variantes de distribución, tanto para el consumo como para la inversión, pueden tener un impacto más positivo que otras sobre la realización de los derechos, especialmente en condiciones de relativa penuria de recursos. Por ejemplo, el caso de las decisiones sobre la construcción y el mantenimiento de viviendas parece ser un área en la que los criterios de los posibles beneficiarios difícilmente pasen por consideraciones “técnicas” relativas a la eficiencia del proceso constructivo. Alcanzar una cuadratura de círculo en esta área pudiera ser muy complicado pero la variante de confiar la solución de los problemas habitacionales de Cuba al mercado (“por medios propios”) pudiera parecerle una propuesta exótica, e inaceptable, a muchos de quienes hoy no tienen un techo seguro. La complejidad relativa a cómo empoderar a la población no debería ser una justificación para suplantar la participación popular con burocracia y tecnocracia. ¿Pudieran las ciencias sociales, en particular las económicas, informar adecuadamente tal proceso? Seguramente pudieran hacerlo.
Es igualmente un tema pertinente para el debate económico en Cuba discutir frontalmente uno de los principales mitos que inexplicablemente parece haber encontrado un lugar bajo el sol en el debate sobre “la actualización”: la noción de que una combinación de empleo estatal, inversión de capital transnacional, pequeña producción mercantil predominantemente en su modalidad de subsistencia, actividad capitalista nacional, un puñado de cooperativas y una masa de desempleados que no parece tener posibilidades de inserción en la economía formal, puede ser una fase para avanzar hacia la prosperidad con justicia social. Quizás tenga que ver con eso a lo que Rafael Hernández ha llamado muy acertadamente “simplismo privado”.
Me percato de que he colocado en esta introducción muchas más interrogantes que respuestas y que no me he referido en detalle a los textos del volumen, pero es que más que un comentario sobre la compilación he considerado que resultaba oportuno insistir en la conveniencia de colocar los temas del debate económico contemporáneo en Cuba, reflejados en el volumen, en el contexto más amplio de la trasformación social en la que ha entrado el país. Es por tanto, también una invitación a que el lector explore otros resultados editoriales de Espacio Laical que han abordado diversas aristas del cambio social. Se dispone de una masa crítica de catálogos temáticos que facilitaría intentar hacer la conexión entre diferentes disciplinas para avanzar hacia un análisis integral del complejo sistema social actualmente en proceso de transformación en Cuba. Estimular a los lectores a sumarse activamente al debate público, desde los diferentes lugares que ocupan en la sociedad, ha sido el propósito principal de esta breve introducción.
La revista Espacio Laical puede ser vista en www.espaciolaical.org y adquirida en el Centro Cultural Padre Félix Varela,Tacón s/n entre Mercaderes y Chacón. La Habana Vieja , La Habana. CP 10100.
CRÉDITOS:
Equipo de redacción: P. Yosvany Carvajal, Roberto Veiga y Lenier González.
Diseño: Ballate
Google afirma que sus autos sin conductor ahora pueden transitar en la ciudad
By ALISTAIR BARR
GoogleGOOGL -0.02% informó el lunes que sus autos autónomos ahora son capaces de recorrer las calles de una ciudad, un reto más complejo que la conducción en autopistas, en la que se enfocó el proyecto inicialmente.
El proyecto, lanzado en 2009 como una de las primeras iniciativas de investigación de alto alcance de Google, ha registrado alrededor de 700.000 millas (1,1 millones de km) conduciendo de manera autónoma utilizando unos 24 vehículos Lexus RX450h equipados con sensores. Esto representa un aumento frente a las más de 300.000 millas (cerca de 500.000 km) registradas en agosto de 2012, la última vez que Google realizó una actualización. Google precisó que hasta ahora no ha causado ningún accidente cuando sus vehículos están en modalidad autónoma.
Google anotó que cambió el enfoque del proyecto de conducir en autopistas a transitar en centros urbanos hace alrededor de un año debido a que las zonas desarrolladas son donde la mayoría de la gente vive y conduce.
"Es muy importante tener la capacidad de conducir en las calles de la ciudad si buscamos tener avances significativos para lograr que los autos sin conductor se hagan realidad", señaló la empresa.
Para recorrer zonas urbanas con mucho tráfico, Google actualizó el software de los vehículos agregando más tipos de objetos, como peatones y ciclistas, que los autos pueden comprender y a los que pueden responder. Los sensores en los vehículos ahora pueden "leer" señales de tránsito cuando se presentan de manera repentina, como cuando un oficial de tránsito eleva una señal de PARE, anotó Google.
Google agregó miles de nuevas situaciones de tránsito y formas en las que estas se desenvuelven a sus modelos computacionales, para que sus vehículos puedan reconocerlas, comparar lo que está sucediendo en tiempo real con lo que debería estar sucediendo y responder de forma apropiada. Si otro auto se está acercando a un alto en una intersección con cuatro señales de PARE a alta velocidad, los modelos de Google calculan la probabilidad de que el vehículo se detendrá de manera normal, frenará de golpe o saldrá disparado por el cruce, explicó la empresa.
Google apuntó que también incorporó hábitos de conducción defensiva para que los vehículos permanezcan fuera de los puntos ciegos de otros autos y se alejen de camiones grandes y motocicletas. Los vehículos autónomos también hacen una pausa durante 1,5 segundos después de que un semáforo se pone en verde para evitar a otros autos que crucen en rojo.
Google publicó un video en YouTube que muestra cómo los vehículos autónomos atraviesan por situaciones comunes de tránsito en la ciudad de Mountain View, California, el hogar de la empresa.
Por supuesto, Google también afronta muchos obstáculos legales y regulatorios para poder sacar sus vehículos autónomos a la calle.
La compañía aún tiene que lidiar con situaciones de tránsito más difíciles, como intersecciones más complejas y zonas de construcción. También existen situaciones particularmente difíciles que los seres humanos superan con gestos sociales, como las señales de PARE en las cuatro esquinas, los cambios de carril o uniones de carriles, señaló Google.
"Aún tenemos muchos problemas por solucionar", escribió en el blog Chris Urmson, director del proyecto de vehículos autónomos de Google. "Pero miles de situaciones en calles de ciudad que nos habrían trabado hace dos años ahora pueden navegarse de manera autónoma".
Blogueros del mundo en Tuitazo de la Solidaridad por Los Cinco
Holguín, Cuba, 28 abr (PL) Blogueros del mundo realizarán el 5 de mayo aquí el Tuitazo de la Solidaridad a favor de la causa de cinco antiterroristas cubanos como parte de las XXI Romerías de Mayo, anunció hoy el comité organizador.Con esa acción los asistentes al segundo encuentro de blogueros se adhieren a la Tercera jornada internacional de denuncia y solidaridad cinco días por Los Cinco en Washington DC y abogarán por la liberación de Ramón Labañino, Gerardo Hernández y Antonio Guerrero.
Ellos, junto a René González y Fernando González (ya regresaron a Cuba después de cumplir sus condenas), fueron encarcelados en 1998 por dar seguimiento a grupos extremistas que en suelo norteamericano preparaban acciones terroristas contra la nación caribeña.
El integrante del comité organizador del evento Luis Ernesto Ruiz informó a Prensa Latina que el encuentro de blogueros se coordinó desde 2013 en el Festival Mundial de Juventudes Artísticas , del 2 al 8 de mayo, en Holguín, a más de 700 kilómetros al este de La Habana.
Explicó que los blogueros participarán en el desfile inaugural y en las actividades programadas de las Romerias de Mayo, mientras que el 4 estarán en las coberturas de las sesiones post-congreso de la Asociación Hermanos Saiz, que agrupa a los jóvenes artistas cubanos.
Se prevé además, la conferencia Red de redes En Defensa de la Humanidad: la importancia de mirar hacia adentro a cargo de Omar González (Red en Defensa de la Humanidad) y el panel Las redes sociales como escenario para la lucha ideológica y la transformación social. Experiencias y lecciones.
También los blogueros intercambiarán en el panel: Blogs y redes sociales como espacios para socializar en red. Por dónde andamos y hacia dónde vamos en Cuba.
Ruiz adelantó que del 2 al 8 de mayo las redes sociales contarán con la presencia de los jóvenes artistas que asistan a esta edición de las Romerías de 2014 que marcan el 20 aniversario del evento.
Putin llama a abrir cadenas de comida rápida rusa que compitan con McDonald´s
EFE - "Tenemos una comida fantástica. La cuestión radica en cómo compaginar la producción industrial con una buena calidad, digamos que mejor que los posibles competidores, incluido McDonald´s", dijo Putin, citado por las agencias locales.
El presidente subrayó que la comida rusa "debe ser fresca como la casera, pero elaborada según los principios de la producción industrial".
"A día de hoy, seguro que podremos hacerlo y, en gran medida, depende de ustedes. Hay que crear las condiciones. Ustedes pueden crear condiciones beneficiosas para la pequeña y mediana empresa", dijo a un grupo de diputados locales durante una visita al noroeste del país.
En los últimos años han aparecido en las grandes ciudades rusas establecimientos de comida rápida, pero en las regiones no hay tradición de restaurantes, que suelen ser caros y de baja calidad.
Ante la ola de sanciones internacionales por el papel ruso en la crisis ucraniana, Putin ha anunciado medidas como la creación de un sistema de cambio alternativo al Occidental, mientras algunos políticos han apostado por la reorientación de las exportaciones, en particular las energéticas, hacia Asia.
El presidente subrayó que la comida rusa "debe ser fresca como la casera, pero elaborada según los principios de la producción industrial".
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