Miles de manifestantes se oponen al presidente estadounidense y abogan por el uso de energías limpias
Dentro y fuera del Foro de Davos, Donald Trump es el protagonista. Decenas de personas han salido a las calles de la localidad suiza para mostrar su rechazo al presidente estadounidense y a sus políticas. La policía ha intervenido para impedir que los manifestantes se aproximaran a los vehículos de las personalidades que acuden al encuentro.
"En realidad esto no es una protesta porque aquí en Davos no somos capaces de hacer una protesta, dicen las autoridades que por la nieve, así que lo único que estamos haciendo es marchar, cantar con pequeñas pancartas y dando un pequeño paseo nocturno, ironizaba uno de los participantes en la concentración.
Las manifestaciones se han repetido en otras partes del país como Zurich. Allí unas 2.000 personas, según la policía y con el permiso de las autoridades, han mostrado su oposición a Trump y también a las energías contaminantes. Los bancos de la distrito financiero de la ciudad, por donde pasaba las protesta, habían sido prevenidos.
Publicado: 24 ene 2018 18:40 GMT | Última actualización: 24 ene 2018 20:33 GMT
El líder del Partido de los Trabajadores de Brasil y candidato a la presidencia fue encontrado culpable de corrupción.
En el marco de una importante movilización en las afueras de la sede de la Justicia Federal de Porto Alegre, el Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF4) ratificó la condena al expresidente de Brasil y candidato del Partido de los Trabajadores (PT) Lula da Silva.
De esta forma se confirma la sentencia de primera instancia del juez de la 13ª Corte Federal de Curitiba, Sergio Moro, quién está a cargo de la mega causa conocida como Lava Jato ('lavado a presión', en español).
Esta investigación reveló una trama de corrupción alrededor de la empresa estatal brasileña de petróleos Petrobras y una larga lista de sobornos pagados a dirigentes políticos por el gigante de la construcción Odebrecht.
¿Qué implica la condena?
Si bien la legislación contempla la posibilidad de que Lula sea puesto en prisión de manera inmediata, resulta poco probable debido a los distintos recursos de apelación que puede presentar. No obstante, la sentencia supone -de hecho- una inhabilitación para presentarse a las elecciones.
Esto debe ser confirmado por el Tribunal Electoral pero la ley del país sudamericano establece que los condenados por corrupción no pueden aspirar a cargos públicos. De allí la campaña de distintas organizaciones populares que sostienen la consigna de que "Sin Lula, es fraude", en alusión a los comicios presidenciales de este año.
¿Cómo sigue el proceso?
Con el fallo unánime de los tres jueces, ahora Lula puede exigir una revisión y esclarecimiento del fallo. Esto impediría que sea puesto inmediatamente en prisión.
Si hubiera habido un voto en disidencia el expresidente podría haber apelado ante la Corte Suprema de Justicia y llevado la causa a una nueva instancia.
La acusación contra Lula
En el juicio celebrado en julio de 2017 el expresidente fue condenado por aceptar un lujoso departamento a cambio de beneficiar a la constructora OAS, con contratos de la estatal Petrobras.
La adjudicación del inmueble, frente a la playa en el Condominio Solaris en Guarujá (municipio del estado de San Pablo), se habría llevado a cabo a través de familiares de Lula. En la denuncia recibida por el juez Moro y avalada por este, se acusó a la empresa OAS de haber pagado a otra compañía para resguardar bienes de Da Silva mientras estuvo en la presidencia.
Sin embargo a lo largo de juicio no se logró demostrar que sea el propietario y mucho menos se identificó cuál fue el acto o la omisión (delito de "corrupción pasiva") que habría dado origen al recibimiento del inmueble.
Protestas en todo el país
A la manifestación que aguardó la sentencia en Porto Alegre se sumaron otras en distintos puntos del país como Fortaleza, Belem y Rio de Janeiro.
En esta última, organizaciones políticas y sociales ocuparon la sede del grupo mediático O'Globo, para denunciar la complicidad de esa empresa con el golpe de Estado contra Dilma Rousseff y el proceso judicial contra Lula.
Quienes se movilizaron en defensa del líder del PT sostienen que este juicio busca, en realidad, impedir que el dirigente se presente a las elecciones presidenciales de este año.
La crisis múltiple que afecta al régimen de Donald Trump desde el día de la llegada del multibillonario empresario inmobiliario al salón oval de la Casa Blanca no ha perdonado al Departamento de Estado.
Un artículo del periodista Gardiner Harris, corresponsal del diario The New York Times en la sede del gobierno estadounidense, en Washington D.C., refleja la grave situación por la que atraviesa la diplomacia de la superpotencia desde aquel día y cómo ésta tiende a agravarse a tono con los vicios inherentes al trumpismo, aunque en este caso sea Rex W. Tillerson, el Secretario de Estado, la primera figura actuante.
El periodista califica de desfile de despidos y tempranos retiros lo que ha estado ocurriendo en las filas superiores del State Department.
Cada oficina del Departamento ha sido convocada a contribuir al objetivo en un esfuerzo por vaciar la cancillería como centro de la intensa campaña a que ha convocado Tillerson.
El discreto optimismo que saludó la llegada de Rex Tillerson al cargo de Secretario de Estado pronto tomó forma de preocupación por la incomunicación entre el jefe y sus subordinados. A mediados de año, la frecuencia con que el canciller reiteraba asuntos como la ineficiencia y la necesidad de reorganizar la política exterior fue motivo, cada vez mayor, para el enojo y la preocupación por la actuación de Tillerson en el Departamento.
En la actualidad el distanciamiento se ha hecho público en la medida que los diplomáticos separados o retirados de sus cargos divulgan sus sentimientos y un número de congresistas comienza a interesarse por el impacto de tales dimisiones en la política exterior.
En un reciente mensaje dirigido al canciller Rex Tillerson, los miembros demócratas del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes mencionaban el “éxodo de más de 100 funcionarios superiores del Departamento de Estado desde enero”, y expresaban su preocupación por lo que “parece ser un vaciado intencional de nuestras filas diplomáticas”.
Tillerson, ex alto ejecutivo del consorcio EXXON y partidario del capitalismo fundamentalista, nunca se ha escondido para declarar que el Departamento de Estado no es más que una burocracia inflada y que él valora a la diplomacia cotidiana de Estados Unidos (que ahora él encabeza) como un conjunto de funcionarios de bajo nivel y conducta improductiva.
Aun antes de ser confirmado por el Senado el nombramiento de Tillerson, su equipo de asistentes despidió a 6 altos funcionarios de carrera del Departamento de Estado, incluyendo a algunos nombrados durante gobiernos encabezados por presidentes republicanos. A ninguno le fue comunicada la razón del despido.
El canciller Tillerson anunció una reorganización a realizarse en los meses subsiguientes, subrayando que esa sería la acción más importante que habría de llevar a cabo durante el ejercicio de su cargo. Para ello contrató a dos compañías consultoras que encabezarían el procedimiento.
Comoquiera que él había anunciado antes de asumir las funciones de Secretario de Estado que reduciría el presupuesto del Departamento en un 31 %, muchos vieron la reorganización como una cortina de humo para drásticos recortes.
Tillerson congeló todas las contrataciones y ofreció $25,000 de recompensa a quienes presentaran sus renuncias, con el objetivo de lograr que unos 2,000 diplomáticos de carrera y funcionarios públicos dejasen sus cargos en octubre de 2018. Su reducido grupo de asistentes ha logrado dejar sin asignación de misiones a algunos diplomáticos y ha motivado a otros al retiro, fundamentalmente bloqueándoles la asignación de las misiones a que aspiraban o denegándoles cualquier otro trabajo.
Entre los despedidos sobresale la elevada proporción de diplomáticos latinos y afroamericanos, así como de mujeres, perfiles que son de suma importancia para mostrar la diversidad de géneros que siempre resulta difícil lograr con cifras verídicas en EE.UU.
Gardiner Harris cita a Nancy McEldowney, diplomática de carrera y ex embajadora jubilada en junio último tras 30 años como funcionaria del servicio exterior estadounidense: “Hay un vacío en el Departamento de Estado y los jóvenes que ahora desempeñan los altos cargos carecen de la confiabilidad y credibilidad que confiere una nominación presidencial y una confirmación senatorial”.
Un reflejo de la orientación que se está aplicando en el Departamento de Estado se observó durante la farsa contra Cuba de los ataques sónicos (que nunca existieron y probablemente fueron resultado de una iniciativa del senador Marco Rubio para promover su imagen como probable futuro presidente republicano), uno de cuyos primeros efectos fue la reducción del personal en la Embajada en La Habana hasta un extremo que prácticamente imposibilitó las relaciones consulares entre ambos lados del estrecho de Florida.
*Manuel E. Yepe, periodista cubano especializado en política internacional, profesor asociado del Instituto de Relaciones Internacionales Raúl Roa de La Habana, miembro del Secretariado del Movimiento Cubano por la Paz.
En esta ocasión el autor es Howard Kutz, periodista del canal cons
ervador Fox News, quien retrata el ambiente caótico del Despacho Oval
A las pocas semanas de que Fire and Fury (Fuego y Furia) agitara la Casa Blanca, un nuevo libro también ofrece un retrato caótico de la Administración de Donald Trump, informa el diario español El País.
Los primeros extractos de Media Madness: Donald Trump, the Press, and the War over the Truth (Locura Mediática: Donald Trump, la prensa y la lucha por la verdad), de Howard Kurtz, obtenidos por The Washington Post, revelan un sinfín de anécdotas sobre cómo se toman decisiones en el Despacho Oval y el llamado “trastorno desafiante” del presidente, la expresión que utilizan sus asesores para referirse a los arrebatos impulsivos de Trump.
El libro, escrito por un presentador del canal pro Trump, Fox News, detalla situaciones en las que el presidente, que llegó a la Casa Blanca sin experiencia en la política, toma decisiones por sí solo, contradice a sus asesores públicamente —vía Twitter— y desoye sus consejos.
Kurtz es más suave que Michael Wolff, el autor de Fuego y Furia, cuyas descripciones tan negativas de Trump llevaron al presidente a tacharlo de libro falso y habla bien de asesores como Ivanka Trump y su marido, Jared Kushner, o la portavoz Kellyanne Conway.
El texto confirma la imprevisibilidad con la que opera esta Casa Blanca. “Oh Dios mío”, dijo Reince Priebus, exjefe de Gabinete de Trump, cuando el presidente tuiteó su decisión de prohibir a los transgénero en el Ejército, minutos ante de reunirse con él para repasar las opciones. “La reunión fue cancelada”, escribe Kurtz en el libro que saldrá a la venta a partir del 29 de enero.
Cuando una mañana de sábado en marzo, el presidente acusó falsamente a Barack Obama de haberle pinchado el teléfono y espiado durante la campaña electoral, Priebus y otros asesores se despertaron por las alertas de las redes sociales. Ajenos a sus motivos para levantar tal polvareda, los más cercanos a Trump tuvieron que trazar de cero una estrategia para defender algo que nunca han podido demostrar. “Nadie sabía qué tenían que hacer. Los asesores estaban confundidos y sorprendidos”, anota el veterano periodista.
Las malas relaciones entre el exestratega radical, Stephen Bannon, y otros como Kushner o Ivanka, de posturas más moderadas, también se hacen hueco en las páginas de Kurtz. Un ambiente tenso —aparentemente suavizado tras la llegada del jefe de gabinete, John Kelly, y la destitución de Bannon y otros— caracterizó los primeros meses de Administración. Las filtraciones a la prensa eran frecuentes y el presidente ordenó una inspección interna para determinar quiénes eran los culpables. En una discusión, Bannon acusó a Ivanka de ser una de las filtradoras. “Bebé, creo que Steve tiene razón en esta”, afirmó Trump en una reunión, defendiendo al estratega frente a su hija.
Pero ni Kelly ni los meses de experiencia han logrado que el presidente se convierta en “presidencial”: que abandone los tuits erráticos, las decisiones sin consultar, o las referencias a países africanos como “países de mierda”. Las filtraciones siguen continuando y la percepción es la de un ala oeste plagado de carencias. Por más que busque culpables, el presidente es, según sus críticos, el problema.
“El presidente también filtra información a periodistas, según creen sus asesores. A veces sin querer: Trump habla con tantos amigos y conocidos que informaciones clave se divulgan rápidamente a los reporteros”.
La marginación en varias formas, la desesperación e impotencia ante un crimen, la transición a la adultez, el peso de la guerra y de la responsabilidad de reportar lo que de verdad sucedió en una, la discriminación racial y por nivel socioeconómico: estos son algunos de los temas con los que lidian las películas nominadas hoy al Oscar.
Esta mañana se anunció quiénes competirán en las veinticuatro categorías galardonadas cada año por la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas y, aunque hubo algunas sorpresas, muchos de los nominados ya se perfilaban debido a que fueron reconocidos por los sindicatos –cuyos integrantes se solapan, en buena medida, con los de la academia– y en otras premiaciones.
Los aproximadamente 8.400 integrantes de la academia ahora tienen hasta el 21 de febrero para llenar sus boletas y los premios serán otorgados en la nonagésima ceremonia de los Oscar, el 4 de marzo a las 17:00, hora de Los Ángeles. El conductor de nueva cuenta será el comediante Jimmy Kimmel, pero hay algo que la academia ha buscado no repetir en esta ocasión: el error del año pasado cuando el presentador del galardón a mejor película, el actor y director Warren Beatty, leyó el sobre que no era. PricewaterhouseCoopers, la auditoría encargada de contabilizar los votos de los integrantes de la academia, acaba de establecer un protocolo para revisar por lo menos dos veces que quien va a dar el anuncio tenga el sobre correcto.
Mejor película
A continuación, te presentamos los nominados, algunos con comentario:
En esta categoría, desde un cambio de reglas en 2009, cada año pueden ser nominadas hasta diez películas; antes el límite eran cinco. Este año las elegidas fueron:
• La forma del agua
Un grupo de personas a quien el resto del mundo hace sentir menos por su otredad –ya sea la sordera, su orientación sexual o su raza– unen fuerzas en esta película de monstruos, uno amazónico y otro muy humano.
• Tres anuncios por un crimen
Una madre que personifica la ira tras el asesinato de su hija, un policía con conducta racista encargado del caso y un alguacil enfermo: la impotencia de los tres queda exhibida en espectaculares que todo el pueblo puede ver.
• Dunkerque
Por aire, mar y tierra, una exploración de la campaña de 1940 para rescatar a miles de soldados sitiados en una playa francesa, cuando los británicos civiles se sumaron a la guerra y con ello dieron esperanza a una nación.
• Lady Bird
El sentir de una adolescente combativa, segura de sí misma e ilusionada entre disputas maternales y amistosas en los años noventa.
• Los archivos del Pentágono
El gobierno estadounidense en los setenta hizo todo en su poder para mantener en secreto un documento que detalla los errores cometidos durante la guerra de Vietnam, incluyendo demandar a The New York Times para intentar prevenir que siguiera publicando al respecto. The Washington Post, con una nueva dueña al cargo, enfrenta una decisión: ¿asume la cobertura?
• ¡Huye! (Get Out)
Parte sátira, parte alegoría, parte película de terror y parte vida real sobre el racismo escondido en las profundidades —o los “lugares hundidos”— de muchas personas (con toques de comedia, eso sí).
• Llámame por tu nombre
La amargura y la dulzura –casi como el sabor de un durazno– del primer amor, una infatuación veraniega inolvidable entre Oliver y Elio, Elio y Oliver.
• Las horas más oscuras
1940 en un Reino Unido bajo asedio y bombardeos constantes por parte de la Alemania nazi. ¿Podrá el nuevo primer ministro reanimar a la población?
• El hilo fantasma
La obsesión hilvana esta historia de un costurero, su musa y su hermana, cuyo título proviene de la era preindustrial cuando las cosedoras en Inglaterra movían sus manos como si siguieran trabajando cuando ya estaban fuera de los talleres.
Actriz principal
• Frances McDormand – Tres anuncios por un crimen
Fue ganadora de esta estatuilla en 1997 por Fargo y nominada tres veces más como actriz de reparto. Ya se hizo con el premio del Sindicato de Actores el pasado 21 de enero, que suele ser presagio de una victoria en los Oscar.
• Saoirse Ronan – Ladybird
Esta es la tercera nominación para la irlandesa de 23 años, después de Expiación, deseo y pecado en 2008 y Brooklyn en 2016.
• Margot Robbie – Yo, Tonya
La australiana obtiene su primera nominación por un papel semibiográfico: la patinadora olímpica Tonya Harding, sospechosa de haber contratado a alguien para destrozarle la rodilla a una rival.
• Sally Hawkins – La forma del agua
En 2014 la británica fue nominada como actriz de reparto por hacer de la hermana de Jasmine en Blue Jasmine.
• Meryl Streep – Los archivos del Pentágono
La vigésima primera nominación para Streep, por su papel de Katharine Graham, la dueña del Washington Post durante algunos de los momentos clave del periódico, como la cobertura del escándalo de Watergate.
Actor principal
• Daniel-Day Lewis – El hilo fantasma
El actor británico-irlandés, quien ya ha ganado este premio en tres ocasiones, está nominado por la que ha dicho será su última actuación, como un obsesivo costurero y diseñador.
• Timothée Chalamet – Llámame por tu nombre
El joven actor (tiene 22 años) interpreta a Elio, un adolescente a punto de pasar a la adultez y de vivir su primer amor… y desamor.
• Gary Oldman – Las horas más oscuras
Con ayuda de prótesis y maquillaje, Oldman (antes nominado en 2012) se convierte en Winston Churchill. Es el favorito en las apuestas pues ya obtuvo el premio del Sindicato de Actores, y quienes son parte de ese gremio componen la mayor parte de la academia.
• Daniel Kaluuya – ¡Huye!
El actor británico pasó del teatro londinense a ser protagonista, centro y corazón de este filme.
• Denzel Washington – Roman J. Israel, Esq.
Ocho veces nominado (dos de ellas por mejor actor de reparto); dos veces ganador.
Mejor director
Los directores primerizos han conseguido nominaciones al Oscar apenas una veintena de veces; este año lo lograron dos personas. No solo eso, sino que todos los nominados en la categoría son también responsables del guion que dirigieron.
• Greta Gerwig – Lady Bird
La actriz famosa por películas independientes, para algunas de las cuales también ha escrito el guion, dio su primer salto detrás de la cámara. Es apenas la quinta directora en conseguir una nominación en la historia (solo una ha ganado, Kathryn Bigelow).
• Jordan Peele – ¡Huye!
El también comediante ha dicho que de ahora en adelante solo se dedicará a dirigir y ya no estará frente a las cámaras.
• Guillermo del Toro – La forma del agua
Continúa la racha de los directores mexicanos nominados, después de Alfonso Cuarón y Alejandro González Iñárritu, quienes ganaron. Del Toro ya había sido nominado antes por mejor guion original y mejor película extranjera con El laberinto del fauno.
• Paul Thomas Anderson – El hilo fantasma
Anderson ha sido nominado seis veces anteriormente: dos por mejor guion adaptado, dos por mejor director y dos por guion original.
• Christopher Nolan – Dunkerque
Anteriormente nominado en tres ocasiones: mejor guion original por Memento y El origen, por la cual también estuvo nominado como productor de mejor película.
Actriz de reparto
• Allison Janney – Yo, Tonya
Esta es su primera nominación al Oscar, aunque ya ha sido reconocida en múltiples ocasiones en los Emmy por su trabajo televisivo y nominada a los Tony por actuación teatral. Ganó el premio del Sindicato de Actores en esta categoría.
• Octavia Spencer – La forma del agua
Spencer ganó en 2012 por The Help y fue nominada el año pasado por Talentos ocultos.
• Laurie Metcalf – Lady Bird
Al igual que Janney, ha sido nominada varias veces a los Tony y Emmy, pero esta es su primera nominación al Oscar.
• Mary J. Blige – Mudbound: El color de la guerra
La cantautora de R&B, multipremiada en los Grammy, interpreta a la matriarca de una familia aparcera.
• Lesley Manville – El hilo fantasma
Como Metcalf y Janney, Manville es conocida principalmente por sus actuaciones en escenarios teatrales. También tiene entrenamiento como soprano.
Actor de reparto
• Sam Rockwell – Tres anuncios por un crimen
Rockwell nunca antes había sido nominado al Oscar. Ganó el premio del Sindicato de Actores.
• Willem Dafoe – El proyecto Florida
Es la primera nominación en más de quince años para Dafoe; antes nombrado en esta misma categoría por La sombra del vampiro, en 2001, y por Platoon, en 1987.
• Richard Jenkins – La forma del agua
Anteriormente nominado a mejor actor principal por El visitante, en 2009.
• Christopher Plummer – Todo el dinero del mundo
Ganó en esta categoría en 2012, por Beginners, así se siente el amor, y fue nominado también en 2010, por La última estación.
• Woody Harrelson – Tres anuncios por un crimen
Es su tercera nominación después de El escándalo de Larry Flynt(como actor principal) y The Messenger.
Mejor guion original
• Lady Bird – Greta Gerwig
• ¡Huye! Get Out – Jordan Peele
• Tres anuncios por un crimen – Martin McDonagh
• La forma del agua – Guillermo del Toro y Vanessa Taylor
• Un amor inseparable – Emily V. Gordon y Kumail Nanjiani
Mejor guion adaptado
• Logan – Scott Frank, James Mangold y Michael Green, basada en una historia por James Mangold
Basada en los personajes de Wolverine y Los X-Men desarrollados por Marvel; la primera vez que una película de cómics es considerada para esta categoría. Frank ya fue nominado en 1990 por Out of Sight; esta es la primera nominación tanto para Mangold como Green, quien el año pasado también hizo los guiones de Blade Runner 2049 y Alien: Covenant.
• Llámame por tu nombre – James Ivory
Inspirada en la novela del mismo nombre de André Aciman.
• Apuesta maestra – Aaron Sorkin
Basada en las memorias de Molly Bloom, quien organizaba juegos de póquer clandestinos con estrellas de Hollywood, atletas reconocidos y personas muy acaudaladas.
• The disaster artist: Obra maestra – Scott Neustadter y Michael H. Weber
Basado en el libro The Disaster Artist: My Life Inside The Room, The Greatest Bad Movie Ever Made.
• Mudbound: El color de la guerra – Virgil Williams y Dee Rees
A partir de una novela sobre dos familias en el sur estadounidense que dependen del cultivo y los cambios que trae a sus vidas la Segunda Guerra Mundial.
Es la primera vez en la historia del Oscar que una mujer es nominada para esta categoría.
• Roger Deakins – Blade Runner 2049
• Bruno Delbonnel – Las horas más oscuras
• Hoyte van Hoytema – Dunkerque
• Rachel Morrison – Mudbound
• Dan Laustsen – La forma del agua
Mejor documental
• Visages Villages
• Abacus: Small Enough to Jail
• Icarus
• Last Men in Aleppo
• Strong Island
Mejor documental corto
• Edith+Eddie
• Heaven is a Traffic Jam on the 405
• Heroin(e)
• Knife Skills
• Traffic Stop
Canción original
• “Recuérdame”, de Coco – Kristen Anderson-Lopez y Robert Lopez
Ambos ganadores por “Libre soy” de Frozen: una aventura congelada.
• “This Is Me”, de El gran showman – Benj Pasek y Justin Paul
Los compositores ganaron por La La Land el año pasado.
• “The Mystery of Love”, de Llámame por tu nombre – Sufjan Stevens
La primera nominación para este artista conocido por álbumes conceptuales.
• “Evermore”, de La bella y la bestia – música por Alan Menken y letras por Tim Rice
Menken, quien escribió la música original de la adaptación animada de Disney y tres canciones nuevas, unió fuerzas para esta con Rice –responsable de letras de Aladino, El rey león y más– pues el letrista original de Bella y bestia, Howard Ashman, falleció en 1991.
• “Stand Up for Something”, de Marshall – Common y Andra Day
Common ya ganó en esta categoría en 2015, por “Glory” de Selma.
• “Mighty River”, de Mudbound – Mary J. Blige y Raphael Saadiq
Con esta nominación, Mary J. Blige suma dos en este año y en categorías muy diversas.
Mejor banda sonora
• Alexandre Desplat – La forma del agua
El francés obtiene su novena nominación; ha ganado una vez, por El gran hotel Budapest.
• Hans Zimmer – Dunkerque
Esta es la onceava nominación para el alemán, y la tercera por una película con Christopher Nolan.
• Jonny Greenwood – El hilo fantasma
Greenwood, integrante de Radiohead, ha colaborado con Paul Thomas Anderson en tres ocasiones anteriores, aunque esta es su primera nominación.
• John Williams – La guerra de las galaxias: El último jedi
Esta película marcó el regreso de Williams a la saga, pues la banda sonora de Rogue One fue hecha por alguien más.
• Carter Burwell – Tres anuncios por un crimen
Fue nominado también en 2016 por la banda sonora de Carol.
Maquillaje y peinado
• Las horas más oscuras – Kazuhiro Tsuji, David Malinowski y Lucy Sibbick
• Victoria y Abdul – Daniel Phillips y Lou Sheppard