UNEAC
No pude asistir al Debate sobre las Ciencias Sociales, convocado en la Casa del ALBA, que tanto me habría gustado, porque tenía programada una conferencia que no debía cambiar.
Me gustó mucho lo que me informaron, dijo mi querido amigo Valdés Paz. Pero no pude estar.
Tal vez este sea mi muy modesto aporte al debate, que considero debe continuar infinitamente. Y por cuya iniciativa felicito a mi viejo amigo Bell Lara de FLACSO.
Quiero hablarles de algunos asuntos que me habría gustado plantear en la discusión. Los resumo, han sido estos un continuo “caballo de batalla” de mi modestas incursiones en ese campo durante los últimos 30años. Cuando me percaté de que no valía la pena quedar siempre atrapados por el análisis coyuntural, que realmente no permitía hacer ciencia. Son a continuación algunos de ellos.
1 .- Hemos tenido una gran tendencia de dogmatismo al absolutizar, como si solo el marxismo fuera la única ciencia. Negando los aportes de la ciencias burguesas. Lo cual es como negar al propio Marx, que muchos amamos y al que tanto respeto le debemos.
2 .- Creo que olvidamos que la ciencia es ciencia, venga del contexto ideológico de donde venga; lo demás es dogmatismo, o en el mejor de los casos, ideologización de la ciencia. El resto es también apología, en la cual no poco hemos caído; o simplemente en aportarle bases de justificación al quehacer de la política. Muchos políticos, aunque no lo piensen así, frecuentemente son impulsores de ese dogmatismo .La ciencia no se mide por de donde viene, sino los objetivos con que se le utiliza.
3.- No es posible despreciar y no apropiarse de los aportes de la ciencia burguesa. Porque en definitiva así también se niega a Marx. Que su Crítica de la Economía Política, fue extraída de la evaluación de todo lo que le precedió. Apropiándose de aquello que le era consustancial a sus propósitos científicos. Su obra cumbre “El Capital”, es una muestra palpable de ello.
4.- La ciencia, a su vez, tiene que ser predictiva. Ciencia que no predice no es ciencia. Y tratándose de nosotros, predecir, es cuestión de vida o muerte. Esto es muy difícil, siendo lo que llevo tratando de hacer en los últimos 30 años de mi vida; actitud con la que he logrado, al menos, la claridad de que no vale la pena recrear el conocimiento científico sino te sirve para proyectarte en el futuro No es simple futurología, ni actitud de “Notre Damus”, sino construir las herramientas que hacen falta para adelantarse a lo que va podría ocurrir, y tenerlo agarrado antes de que ocurra. Para lo cual no basta con el análisis de la coyuntura, sino que es necesario modelar la realidad, para lograr pronosticar su posible comportamiento.
5.- Otro asunto que me habría gustado discutir, es lo referente a que nuestras ciencias sociales no avanzan más por su falta de integralidad; que para mí es lograr la capacidad de apropiarse de los instrumentos de análisis que se desarrollan en otras ciencias. Ejemplo, muy importante, las Ciencias Matemáticas. Las ciencias sociales nuestras solo ganaran en integralidad, cuando sean capaces de apropiarse del instrumental que desarrollan otras ciencias y ponerlo a su servicio. En lo cual, en particular nuestras ciencias sociales están muy atrasadas, excepción tal vez de la Economía. Es hacer avanzar la dialéctica como método; que esta deje de ser un Espíritu Santo que un “Día de Pentecostés” le bajo a Marx, Engels a Lenin y a nadie más.
6.- Lo que nos lleva al análisis del papel de lo cuantitativo y lo cualitativo en el trabajo científico. Al papel, en particular, de las Ciencias Matemáticas; a la capacidad de definir variables, constantes y potenciales ecuaciones de comportamiento. Dentro de lo cual, en particular, nuestras ciencias políticas están muy atrasadas. Por eso nuestros análisis de las relaciones internacionales, complejas relaciones secundarias, son solo coyunturales, aferrados a un contexto, desde el cual no se pueden salir ni proyectar. Por eso a veces nuestros análisis, en tal campo, se limitan a la acumulación de “noticias” y extraer conclusiones. Lo cual plantea la sustancial diferencia entre el simple analista y un científico. Pues este último siempre está en capacidad de “tirar del hilo de la historia”; mientras que el otro por lo general, queda solo atrapado por el momento de ocurrencia de los fenómenos.
7.- Lo anterior tiene que ver con un mal endémico, cubano, tal vez no solo, que ha afectado a nuestras ciencias. La gente por lo general selecciona como campo de estudio a las Ciencias Sociales, porque las consideran las más fáciles, lo cual es un craso error. Además, porque lo hacen huyéndole a las Ciencias Matemáticas y a las Ciencias de la Información y otras. Lo cual es otro tremendo error. La ciencia es, en última instancia, una sola. Los demás no son más que planos de análisis de la realidad, el pensamiento y la naturaleza. Que además no son posibles de separar, más que como un convenio metodológico. Esa separación de las ciencias en compartimentos estancos, es una de las cosas que más nos ha afectado a nuestras Ciencias Sociales y a la preparación educacional y académica en Cuba. Por lo cual tenemos tantos graduados de Ciencias Sociales mediocres y mal preparados, que no logran desempeñar un papel en la investigación de los problemas. Y que apenas sirven para tratar de enseñar en la escuela secundaria.
8.- En resumen, hay que modelar, porque en definitiva, lo más importante que puede hacer la ciencia, en cualquier campo del conocimiento, es aportar algoritmos, leyes, métodos de comprensión de la realidad. Porque es lo único que nos permitiría ser predictivos, cuando te mueves en el campo de las ciencias sociales, en las que el factor subjetivo tiene tanta importancia. Ese factor subjetivo tan difícil de aprehender .Pero que desempeña un papel vital en estas ciencias. Las Ciencias Sociales en realidad son las más difíciles, por el papel del factor subjetivo en ellas, porque su laboratorio es la propia sociedad y porque este último solo puede ser construido a escala y de manera artificial, para lo cual hacen falta la selección de muestra, la Estadística Matemática y otros métodos. Razón por la cual, las ciencias sociales son las más complejas, difíciles y además, nuevas.
9.- Lo último a lo que me quiero referir es a la relación “incestuosa” de las Ciencias Sociales con la política y de los científicos sociales con los políticos. Lo que tanto nos ha abrumado y retrasado en estos años. Ha provocado tantas equivocaciones y tanto sufrimiento nos ha traído aparejado. Recordemos el Caso del Departamento de Filosofía y la desaparición del Departamento-escuela de Sociología. Ambos de la Universidad de La Habana. O la “Historia del Cubano logo sin Carnet”, cuando fueron desmembrados los Centros de Estudios de América y el Centro de Estudios Europeos. Lo que sin dudas provoco un retraso de más de 10 años en el desarrollo de nuestras Ciencias Sociales.[1]
10.- Hay políticos que creen que nos pueden ordenar, pedirnos nuestra opinión para justificar las políticas, monopolizar lo que hacemos, teniéndolo en una gaveta todo el tiempo que deseen; olvidándose continuamente de que la producción de la ciencia es también y en primer lugar para la sociedad. Criticándonos cuando no decimos lo que les gusta, o “sancionándonos” cuando decimos lo que no les gusta. Ese control de la Ciencias Sociales, heredado de los ex países socialistas y que tanto daño nos hizo en estos años. Porque en realidad la ciencia solo produce de verdad para hacer avanzar la política y todo lo demás, cuando lo hace dentro de un ambiente de confianza, libertad y democracia.
11.- Esa relación incestuosa tiene que terminar. Eso de que la ciencia sirve solo si soluciona algún problema práctico tiene que acabar. Las ciencias Sociales tienen que trabajar también para sí mismas .De lo contario como se van a desarrollar. Prestándole atención solo a las investigaciones para la práctica social. ¿Y las investigaciones fundamentales dónde quedan? Esto ha terminado entendiéndose bastante para el resto de las ciencias, pero en las Ciencias Sociales, aun es un problema, sin resolver, que compromete el desarrollo de nuestras ciencias.
12.- Tal vez se piensa por algunos, que manteniendo un férreo control sobre la producción científica de las Ciencias Sociales es como más se avanza. Lo cual es un absurdo. Si el científico social no tiene la libertad de producir y está siempre acosado por el miedo de decir algo que no sea del agrado de algunos políticos, o que contradiga la política, sus resultados no servirán para nada.
Me parece observar cierta superación de estos problemas planteados, pero aun a niveles insuficientes. Un ejemplo de lo cual es nuestra propia prensa, en la que la crítica está bastante ausente. No aprovechando para nada, el amplio y atractivo caudal de análisis crítico que posee nuestra intelectualidad revolucionaria.
La prensa nacional sigue sin publicarle a la inmensa mayoría de los intelectuales cubanos, desaprovechando también un extraordinario potencial para su propio mejoramiento y ampliación del interés de nuestra población por ella.
Adjunto algunos trabajos míos, para que sepan mejor del marco de mis preocupaciones en este campo.
Creo que solo para discutir estas últimas cosas, valdría la pena volver a convocar la reunión y cientos de reuniones más. Porque me parece que son vitales, si queremos que nuestras ciencias sociales avancen.
La Habana, Junio 13 del 2015
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[1] Lo de los 10 años, viene de haber comprobado en nuestra experiencia del CESEU, que solo después de ese periodo de preparación, es que un investigador adquiere la experiencia necesaria para comenzar a producir intelectualmente. ( Nota del Autor )
Bibliografía del Autor:
- Un modelo para el análisis del conflicto Cuba -Estados Unidos en los umbrales del siglo XXI.
- Algunos desafíos de las Ciencias Sociales cubanas. Página Moncada: (http://moncadalectores.blogspot.com/2011/09/algunos-desafios-de-las-ciencias.html)
- Ciencia y Política: un dúo complejo .Revista de la Sociedad económica de Amigos del País No.27
- Un modelo para el análisis de la problemática racial cubana contemporánea. Revista Catauro No. 6. Fundación Fernando Ortiz, 2002.
- Un Modelo para el análisis del proceso electoral presidencial en los Estados Unidos. Revista Cuaderno de Trabajo No.5.CESEU, Universidad de La Habana.