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Bebida de amplio consumo
en el planeta, el café constituye el principal producto de las montañas
cubanas, aunque en los últimos tiempos, diversos factores han provocado pobres
rendimientos de los cafetales, la mayoría de notoria antigüedad.
Sin
embargo, un resultado estimulante, aunque lejano aún de las potencialidades y
necesidades del país, experimentó la producción cafetalera en la zafra
2011-2012, luego de proponerse acopiar 6 443 toneladas del grano y obtener 7
100, con lo cual superó 10 % su plan y creció 24 % respecto a la zafra
precedente.
Entre
los aspectos positivos sobresalió su mejor organización, mayor eficiencia y el
incremento cualitativo de la recolección y el despulpe, lo cual posibilitó que
85 % de todo el grano recogido fuera de primera o segunda calidad.
Otra
tarea desarrollada con éxito durante 2011 fue la siembra de 7 100 hectáreas de
cafetos, cantidad que supera ampliamente a la lograda en años recientes, y las
8 500 hectáreas previstas el pasado año.
Hoy
el principal reto de los colectivos cafetaleros presentes en ocho de las 15
provincias del país es el de trazarse planes sólidos, que se cumplan sobre la
base del esfuerzo real y no, como aconteció en la pasada zafra, en la cual hubo
territorios, empresas y otros grupos que excedieron su meta con una amplitud
desmesurada, reflejo de la escasa seriedad en sus estimados de cosecha, en
muchos casos por deficiencias en la aplicación del clásico método de conteo
estadístico-matemático.
De
ejecutarse cabalmente lo previsto en el desarrollo cafetalero, el país espera
duplicar para 2016 la baja producción de café y alcanzar las 15 000 toneladas,
aunque todavía esa cifra resulta insuficiente comparada con las 24 000
necesarias para cubrir el consumo y la exportación.
Oportunamente,
el presidente cubano Raúl Castro anunció ante la Asamblea Nacional que la Isla
no podía seguir erogando sumas millonarias destinadas anualmente para importar
el grano y cubrir el consumo local, como sucedió entre 2010 y 2011 cuando tuvo
que comprar 18 000 toneladas de café para satisfacer el consumo interno.
A
causa de los altos precios de los alimentos en el mercado internacional y el
genocida bloqueo de Estados Unidos, hoy el café Robusta le cuesta a Cuba
alrededor de 2 300 dólares por tonelada, ubicado en puertos nacionales,
mientras que en el caso de la variedad Arábiga, la otra mundialmente
comercializada y de mucha más calidad, el costo actual para la Isla sobrepasa
los 4 560 dólares por tonelada.
Por
donde nace el Sol
La
cosecha cafetalera 2011-2012 en la provincia Santiago de Cuba nuevamente
cumplió el estimado de acopio del cerezo y hasta creció casi 4 %, en relación
con la campaña anterior; los más integrales al completar sus planes en acopio,
despulpe y toneladas, fueron los municipios Songo-La Maya y Guamá.
Para
los especialistas esa tuvo matices diferentes, que influyeron directamente en
una mayor eficiencia como por ejemplo, los preparativos y la organización en el
período de precosecha desde la base hasta la Comisión Provincial de Café; el
emplantillado y disposición de la fuerza recogedora; la entrada a tiempo de más
de 90 % de los recursos; el incremento del precio del café recogido, así como
mayor control y exigencia que disminuyeron el desvío del grano.
Resulta
alentador conocer que en esta ocasión más de 70 % del café recogido en la zafra
santiaguera se concretó con la fuerza interna -los cooperativistas, campesinos,
recogedores habituales y sus familiares, los pobladores serranos en general-,
disminuyendo así las tradicionales movilizaciones de los estudiantes al Plan la
escuela al campo, con ahorro de recursos materiales y combustible. Mención
especial merecen los beneficiados por el Decreto Ley No. 259, relacionado con
la entrega de tierras ociosas en usufructo, quienes realizaron significativos
aportes en los macizos cafetaleros de Segundo Frente, San Luis, Songo-La Maya y
Tercer Frente.
Sergio
Castillo Hechavarría, jefe de café del Grupo Provincial en Santiago de Cuba,
anunció que la zafra cafetalera reportó más de 3 020 toneladas (52 % de la
producción total del país), y que el compromiso para 2015 es producir 7 000
toneladas.
"Con
ese fin -dijo Castillo Hechavarría- se tiene previsto sembrar 2 600 hectáreas
de café, y ya se encuentren en etapa de viveros más de 7 000 000 de posturas de
las especies Arábigo y Robusta, además de tener en cuenta otras 300 hectáreas
que serán rehabilitadas.
"Este
es un proceso paulatino, añadió el especialista, que se extiende hasta el año
2015. Por el momento vamos cumpliendo para continuar creciendo progresivamente,
no obstante los retos que tenemos con la preparación de la industria -en
búsqueda de mayor capacidad de secado del grano- y la disminución del índice de
broca para garantizar calidad en la producción".
Mientras,
durante la cosecha 2011-2012, los caficultores granmenses cumplieron sus planes
de siembra de posturas y de acopio del grano, "pero el rendimiento
agrícola promedio no llegó a 30 % del que deben alcanzar los cosecheros de la
vanguardia a partir de 2015", precisó William Chávez, subdelegado de la
Agricultura en el territorio, quien agregó que en las zonas cafetaleras se
acometen, como labor básica, la sustitución de plantaciones viejas, pues 60 %
tiene más de dos décadas de explotación.
"Todavía
no se alcanza el ritmo necesario -reconoció- ya que las acciones comenzaron en
2006 y hoy solo está renovado 42 % de las áreas". El funcionario recordó
que cuando la provincia obtuvo sus mayores producciones, hace más de tres
décadas, reportaba alrededor de 0,22 tonelada por hectárea. En Granma se
trabaja con el ánimo de cosechar 0,29 tonelada del grano por hectárea, a partir
del año 2015, lo cual implicará triplicar el rendimiento promedio actual de la
oriental provincia.
Asimismo,
William Chávez dijo que se propician beneficios financieros y crediticios con
la aplicación de resoluciones que incentivan la producción mediante ingresos
monetarios; "la más reciente, la 14/2010 en vigor desde el 16 de enero de
2010 -dijo-, amplía los precios en 2,5 veces por la compra del grano".
Vale recordar que la producción histórica del actual territorio de la provincia
Granma fue de 4 014 000 latas, registrada en 1968, y desde entonces siempre ha
estado por debajo del millón de latas de café.
Otro
tanto ocurre en Las Tunas, donde los cosecheros se han incorporado con buen pie
al programa encaminado a lograr la recuperación cafetalera cubana. Al efecto
los trabajadores de la Empresa Integral Forestal dejaron plantadas 21 hectáreas
de ese tipo de cultivo, una más que las previstas, luego de garantizarse las 92
000 posturas en diversos viveros de los ocho municipios tuneros, lo cual
permitió contar con un excedente y venderles plántulas a campesinos interesados
en producir el grano.
La
variedad seleccionada en la provincia es la Robusta, que, a diferencia de la
Arábiga, es más resistente a las altas temperaturas, exige menor cantidad de
agua y se adapta mejor a las condiciones de Las Tunas, cuyo territorio es
completamente llano. Asimismo, la Robusta también requiere humedad; por eso los
sitios escogidos para las plantaciones están próximos a fuentes acuíferas, y
bajo árboles de diversas especies capaces de proporcionar sombra todo el año.
El
ingeniero Pablo César Ávila, director de la Empresa Forestal tunera, comentó
que debido a los altos precios de los alimentos y el bloqueo estadounidense,
las autoridades cubanas le conceden notoria importancia a la recuperación
cafetalera del país, otrora alto productor, y que año tras año fue haciéndose
cada vez más dependiente del mercado exterior, como consecuencia del crítico
estado de las plantaciones y la infraestructura de esa importante
agroindustria.
Café
en el llano
Desde
su aparición en la Isla, en el siglo XVIII, los cafetales cubanos han
proliferado en las serranías, casi siempre a partir de 500 y hasta 800 metros
sobre el nivel del mar. Las áreas de la Sierra Maestra y el macizo montañoso
Sagua-Baracoa registraron desde entonces los mayores volúmenes del grano,
seguido del complejo montañoso de Guamuhaya, al centro de la Isla, y de las
sierras del Rosario y de los Órganos, en Pinar del Río. Empero, con vista a
elevar la producción cafetalera también se trabaja hoy en recuperar las
plantaciones existentes en zonas llanas del país con variedades más productivas
y resistentes a las condiciones climáticas.
Al
efecto Daniel Balmaceda, especialista del Instituto Nacional de Investigaciones
Fundamentales de Agricultura Tropical (INIFAT), reveló que en las provincias de
Cienfuegos y Villa Clara se lleva a cabo la siembra de la variedad Robusta, a
la cual se le injertan yemas de Arábico.
Explicó
que esta metodología persigue elevar la calidad de los frutos en las jóvenes
plantaciones atendidas por cooperativistas vinculados a los programas de la
Agricultura Urbana y Suburbana.
"La
estrategia del programa de recuperación del cerezo -dijo Balmaceda- comenzó por
áreas montañosas hace aproximadamente un quinquenio con el objetivo de
reemplazar las plantas envejecidas por otras jóvenes, de mayor vigor y
capacidad genética. En este proyecto se incluye un mayor control de los
cultivos y sus manejos, además de la capacitación técnica de trabajadores y el
uso del extensionismo, para difundir y apoyar las mejores prácticas
agrícolas".
Acotó
que se labora en la creación de semilleros para darle respuesta al incremento
de áreas y de productores en el territorio nacional, muchos de los cuales están
acogidos al Decreto Ley 259 de entrega de tierras en usufructo.
Por
su parte Elexis Legrá Calderín, director Nacional de Café y Cacao en el
Ministerio de la Agricultura, señaló que las provincias centrales garantizan
solo 7 % del total aportado nacionalmente, pero sobresalen por su calidad.
"La necesidad de producir más café, con el fin de que disminuyan las
importaciones y poder, en un futuro, crecer en las ventas al extranjero, ha
llevado a la agricultura cubana a aumentar el cultivo de ese cerezo",
aseguró.
¿Lloverá
café en el mundo?
A
principios del año en curso, el precio del café se había recuperado a
consecuencia de que Guatemala detectó una enfermedad denominada roya que
destruyó 15 % de la cosecha de 2012-2013 y hasta 40 % de la próxima. Pese a
ello, el anuncio de la CONAB (Compañía Nacional de Abastecimiento) en Brasil de
que se obtendrá una cosecha récord en 2013-2014, está ejerciendo una presión
muy fuerte en el mercado y es lo que mantiene los precios a la baja,
especialmente en el café de alta calidad.
De
acuerdo con los especialistas, la producción total estimada para la temporada
2012-2013 asciende a 144,5 millones de sacos, lo que supone un aumento de 7,3 %
frente a los resultados de 2011-2012. Estas previsiones muestran que la oferta
se mantiene firme y, por lo tanto, que los precios seguirán estando afectados
de forma negativa.
Hoy
la oferta de café se concentra en Brasil, con 35 %, Vietnam con 15 % (donde se
produce todo el Robusta), Colombia con 10 % (Arábica premium), Indonesia y
África Occidental. Vale recordar que el café es un producto que necesita casi
cuatro años desde que se siembra hasta que está apto para la cosecha, y como
promedio solo se obtiene al año un kilo de cerezo consumible por árbol.
Desde
hace tiempo su evolución está marcada por altibajos, pero a partir de la
cosecha 2010-2011 la tendencia bajista se ha agudizado. Sin embargo, al menos
las autoridades de Brasil esperan una cosecha nunca vista de más de 50 millones
de sacos de 60 kilogramos, y Colombia entre ocho y 10 millones de sacos,
dejando la escena lista para unos precios bajos.
La
oferta cafetalera está ya desbordada por estos días, y las existencias del
grano en el mercado de Nueva York subieron a más de 2,75 millones de sacos de
60 kilogramos, el más alto volumen en tres años. Por tanto, todo indica que a
nivel mundial ya está lloviendo café, aunque los agricultores brasileños
hicieron y hacen "maravillas" para limitar sus ventas con el objetivo
de aumentar los precios, con tendencia a ir en picada.
La
producción mundial podría llegar a 160 millones de sacos en la temporada 2012-13
según estimaciones de bloomberg. Ya en el mes de noviembre de 2012 la
producción llegó a 147 975 000 sacos con un consumo inferior en 141
millones, es decir una sobre producción mundial.
A
pesar de que ambas producciones, Arábica y Robusta, han aumentado de 1978 a
noviembre de 2012 de 59 084 000 a 88 008 000 de sacos de café tipo
Arábica y de 18 077 000 a 59 082 000 en producción de café tipo Robusta.
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