Por Mayra Pardillo Gómez*
Sancti Spíritus, Cuba (PL) El longevo y majestuoso puente sobre el río Yayabo, ubicado en esta central ciudad de Cuba y próxima a celebrar 500 años de fundada, es único de su tipo en el país y está rodeado por singulares leyendas.Posee la condición de Monumento Nacional y es considerado un símbolo sociocultural de Sancti Spíritus, la cuarta de las siete primeras villas fundadas en 1514 en la isla por el Adelantado Diego Velázquez de Cuéllar.
Está situado en un sitio clave, ya que muy cerca tiene al Teatro Principal, una de las joyas de la arquitectura espirituana, así como a la Quinta Santa Elena -hasta donde se llega por calles empedradas y desde donde la visión del puente es maravillosa- y al Museo de Arte Colonial, conocido además como Palacio de Valle y Casa de las Cien Puertas.
Cada 4 de junio la ciudad celebra su fundación, pero este año lo hará con mayor orgullo porque podrá presentar a sus habitantes e incluso al mundo una ciudad con medio milenio de vida, que aún conserva rasgos característicos de una villa colonial.
Lugares como el céntrico parque del patriota cubano Serafín Sánchez, paseos y otros sitios públicos han sido o están siendo remozados para recibir la efeméride con una ciudad renovada, sin que esta pierda su especial antigüedad.
ENTRE DOS ORILLAS
Es el enlace entre una orilla, la más antigua, donde se halla el Centro Histórico Urbano de la ciudad, y otra de rasgos constructivos diferentes, en su mayoría más cercanos a la actualidad.
En esta última se alza el populoso barrio de Colón, un punto de referencia en celebraciones festivas de arraigo en la localidad como es el Santiago Espirituano, además de que allí se ubican centros económicos importantes.
María Antonieta Jiménez Margolles, Historiadora de la Ciudad, argumenta en el libro Monumentos nacionales y locales de Sancti Spíritus que el puente "Está compuesto por ladrillos asentados con el mortero tradicional de cal y arena, cuya calidad, según la tradición oral, se atribuye a estar mezclado con leche de burra".
"Consta en documentos que estuvo empedrado y que fue pintado de blanco y verde", afirman otras investigadoras.
Otros textos indican que la fortaleza de este puente se debe a la leche de vaca y No a la de burra empleada en la argamasa.
En 1522, ocho años después de fundada, se traslada la villa del Espíritu Santo a orillas del Yayabo, donde permanece.
RODEADO POR LEYENDAS
Acerca de su construcción los expertos apuntan que la primera piedra se colocó en 1817 y la obra finalizó en 1831, donde sobresalió el aporte desinteresado de los vecinos y de ciertas personalidades.
Disímiles textos dan por sentado que este legendario puente, de cinco arcadas, se inauguró oficialmente el 12 de julio de 1825, pero estudios más recientes indican que se concluyó el 6 de mayo de 1831, aunque existen evidencias de que el Yayabo era transitable desde mucho antes.
Al frente de la obra -de estilo románico- estuvieron los maestros andaluces Domingo Valverde y Blas Cabrera, quienes dirigieron a una fuerza de trabajo compuesta por presos de la localidad y algunos esclavos.
Una antigua leyenda rodea a este río y su puente, relacionada con el traslado de la villa, en 1522, hacia las márgenes del río Yayabo, a causa de una plaga de hormigas que horrorizó a sus habitantes.
Duendes y güijes se dan la mano en esta ronda de fantasías, que componen el patrimonio inmaterial de esta ciudad, a unos 350 kilómetros al este de La Habana, cercana ya a su medio milenio de fundada.
En la actualidad está pintado de verde y ya pocos saben distinguir si la leyenda asegura que se usó leche de burra o de vaca en la mezcla, pero haya sido o no aquel su color original lo cierto es que el puente sobre el río Yayabo es una obra de la arquitectura colonial digna de ver y preservar para la posteridad.
*Corresponsal de Prensa Latina en la provincia cubana de Sancti Spiritus
Sancti Spíritus, Cuba (PL) El longevo y majestuoso puente sobre el río Yayabo, ubicado en esta central ciudad de Cuba y próxima a celebrar 500 años de fundada, es único de su tipo en el país y está rodeado por singulares leyendas.Posee la condición de Monumento Nacional y es considerado un símbolo sociocultural de Sancti Spíritus, la cuarta de las siete primeras villas fundadas en 1514 en la isla por el Adelantado Diego Velázquez de Cuéllar.
Está situado en un sitio clave, ya que muy cerca tiene al Teatro Principal, una de las joyas de la arquitectura espirituana, así como a la Quinta Santa Elena -hasta donde se llega por calles empedradas y desde donde la visión del puente es maravillosa- y al Museo de Arte Colonial, conocido además como Palacio de Valle y Casa de las Cien Puertas.
Cada 4 de junio la ciudad celebra su fundación, pero este año lo hará con mayor orgullo porque podrá presentar a sus habitantes e incluso al mundo una ciudad con medio milenio de vida, que aún conserva rasgos característicos de una villa colonial.
Lugares como el céntrico parque del patriota cubano Serafín Sánchez, paseos y otros sitios públicos han sido o están siendo remozados para recibir la efeméride con una ciudad renovada, sin que esta pierda su especial antigüedad.
ENTRE DOS ORILLAS
Es el enlace entre una orilla, la más antigua, donde se halla el Centro Histórico Urbano de la ciudad, y otra de rasgos constructivos diferentes, en su mayoría más cercanos a la actualidad.
En esta última se alza el populoso barrio de Colón, un punto de referencia en celebraciones festivas de arraigo en la localidad como es el Santiago Espirituano, además de que allí se ubican centros económicos importantes.
María Antonieta Jiménez Margolles, Historiadora de la Ciudad, argumenta en el libro Monumentos nacionales y locales de Sancti Spíritus que el puente "Está compuesto por ladrillos asentados con el mortero tradicional de cal y arena, cuya calidad, según la tradición oral, se atribuye a estar mezclado con leche de burra".
"Consta en documentos que estuvo empedrado y que fue pintado de blanco y verde", afirman otras investigadoras.
Otros textos indican que la fortaleza de este puente se debe a la leche de vaca y No a la de burra empleada en la argamasa.
En 1522, ocho años después de fundada, se traslada la villa del Espíritu Santo a orillas del Yayabo, donde permanece.
RODEADO POR LEYENDAS
Acerca de su construcción los expertos apuntan que la primera piedra se colocó en 1817 y la obra finalizó en 1831, donde sobresalió el aporte desinteresado de los vecinos y de ciertas personalidades.
Disímiles textos dan por sentado que este legendario puente, de cinco arcadas, se inauguró oficialmente el 12 de julio de 1825, pero estudios más recientes indican que se concluyó el 6 de mayo de 1831, aunque existen evidencias de que el Yayabo era transitable desde mucho antes.
Al frente de la obra -de estilo románico- estuvieron los maestros andaluces Domingo Valverde y Blas Cabrera, quienes dirigieron a una fuerza de trabajo compuesta por presos de la localidad y algunos esclavos.
Una antigua leyenda rodea a este río y su puente, relacionada con el traslado de la villa, en 1522, hacia las márgenes del río Yayabo, a causa de una plaga de hormigas que horrorizó a sus habitantes.
Duendes y güijes se dan la mano en esta ronda de fantasías, que componen el patrimonio inmaterial de esta ciudad, a unos 350 kilómetros al este de La Habana, cercana ya a su medio milenio de fundada.
En la actualidad está pintado de verde y ya pocos saben distinguir si la leyenda asegura que se usó leche de burra o de vaca en la mezcla, pero haya sido o no aquel su color original lo cierto es que el puente sobre el río Yayabo es una obra de la arquitectura colonial digna de ver y preservar para la posteridad.
*Corresponsal de Prensa Latina en la provincia cubana de Sancti Spiritus
Sancti Spiritus es la tierra mas linda del mundo porque es la mía. He estado en varios lugares del mundo y vivo en la Habana. Pero sinceramente no puedo estar muy alejada de mi ciudad natal. Quizás la familia, quizás que soy muy romántica, el asunto es que tengo que ir al menos dos veces al año allí. Saludos a mi gente...
ResponderEliminarCaridad.