"De pensamiento es la guerra mayor que se nos hace: ganémosla a pensamiento" José Martí

sábado, 9 de febrero de 2013

La prensa y los riesgos del consenso

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“Falta todavía el paso de dar forma a una concepción de la prensa que se avenga al socialismo que queremos crear”, opina el sociólogo Aurelio Alonso.
“Falta todavía el paso de dar forma a una concepción de la prensa que se avenga al socialismo que queremos crear”, opina el sociólogo Aurelio Alonso. Jorge Luis Baños - IPS
 “Debe permitirse a otros medios que desempeñen un papel más activo e independiente en el contexto del debate político que vive actualmente el país”, consideró el intelectual cubano Esteban Morales en un intercambio sobre la prensa en Cuba publicado este mes por la revista católica Espacio Laical.
En el dossier “Propuestas para una refundación de la prensa”, varios especialistas y profesionales del ámbito periodístico opinan sobre la necesidad de un cambio profundo en la política de medios, que comprenda una descentralización del control estatal sobre lo que se publica y una participación más plural de la ciudadanía.

Las transformaciones llegan tarde a la prensa

Los participantes en el diálogo coinciden en que mientras el país se vuelca hacia la reforma económica y social en busca de una mayor productividad y desarrollo, los medios de comunicación oficiales parecen quedarse a la zaga de los cambios.
“Es reiterativo afirmar que los patrones por los que se rige la prensa cubana, importados de la Unión Soviética, presentan deficiencias estructurales que los hacen ineficaces y anacrónicos”, señaló el investigador y exfuncionario de la esfera ideológica del Partido Comunista de Cuba (Pcc), Jorge Gómez Barata.
A juicio del Premio Nacional de Periodismo Luis Sexto “los medios impresos, incluso las secciones informativas de la radio y la televisión, son objeto de un mayor control por parte de lo que llamamos aparato oficial”.
Si bien el joven periodista Justo Planas considera que las llamadas publicaciones alternativas continúan aportando debates en la periferia de la realidad mediática nacional por el limitado acceso de la población a Internet, el corresponsal de la BBC en La Habana Fernando Ravsberg aclara que el discurso crítico en la Web es a menudo blanco de la censura.
“Frente a Cuba -anota- se eleva una enorme pared de páginas web, blogs, etc. que hacen del anticastrismo su razón de ser. Paradójicamente, y como contrapartida, en el interior de la Isla se produce un “desarme unilateral” y se elimina de la blogosfera a los que defienden la Revolución con mayor lucidez”.

¿Medios públicos o partidistas?

La regulación del Pcc sobre los medios de prensa puede constatarse -al decir de los especialistas- en la homogeneidad que caracteriza a los periódicos, telediarios e informativos radiales de alcance nacional.
Aurelio Alonso, sociólogo y editor de la revista Casa de las Américas, considera que la política informativa en vigor busca el “contra” en cualquier disenso; al tiempo que Morales recuerda que “nadie puede tomarse la iniciativa de informar si previamente no recibe la orden desde `arriba´”.
Esta realidad, que en los recientes debates sobre las líneas estratégicas del trabajo del Pcc ha sido analizada como un frente urgido de cambios, “se desvía, y donde se ha de abrir, se cierra”, estima por su parte Luis Sexto.
Los implicados en el debate advirtieron que las críticas recibidas por la prensa cubana a menudo recaen en los periodistas, sin que se tengan en cuenta los mecanismos burocráticos que enlentecen el trabajo de los medios, distorsionan los criterios de verdad, frenan la creatividad y los vuelven ineficientes.
Aunque suscita opiniones encontradas, el establecimiento de un marco legal parece configurarse como vía para regular la relación prensa-sociedad. El propio Sexto entiende que “también esa ley tendría que dictar, con derechos y deberes, la posibilidad de existir de medios alternativos en instituciones cuya relevancia e influencia social necesiten de constituirse en voz”.
Un instrumento legal que reconozca la capacidad autorreguladora de las instituciones mediáticas, no descarta, para estos especialistas, la misión de servicio público y la defensa de los intereses colectivos de la nación.
Criterios como estos habían aparecido en 2011 en las páginas de Espacio Laical con la intervención del investigador Armando Chaguaceda y el escritor Guillermo Rodríguez Rivera. Por su parte, Sexto y Morales polemizaron sobre estos temas en sus bitácoras personales a mediados del año pasado.
El nuevo debate tiene lugar mientras las delegaciones de base de la Unión de Periodistas de Cuba analizan su funcionamiento, de cara a su IX Congreso, a celebrarse en julio próximo
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