La Habana, 17 may.- Tras el anuncio de los presidentes de Cuba y Estados Unidos del restablecimiento de relaciones entre ambos países, no solo se han intensificado los contactos diplomáticos sino también los intercambios culturales como el protagonizado aquí por la Orquesta Sinfónica de Minnesota.
Invitada por el Ministerio de Cultura de la nación caribeña, la agrupación de más de un centenar de músicos culminó la víspera un apretado programa que incluyó dos actuaciones en el Teatro Nacional como parte de la XIX Feria Internacional de la industria discográfica Cubadisco 2015.
Su director Osmo Vänskä ha seleccionó para la ocasión obras de Beethoven, Bernstein y Prokofiev que forman parte del repertorio de la orquesta, pero también insertó la pieza “Danzón”, de uno de los compositores más representativos de la música cubana, Alejandro García Caturla (1906-1940).
El interés de los artistas de Minnesota por encontrar conexiones con la cultura de este país va más allá de la inclusión de temas cubanos en el espectáculo, pues se ha abierto a la colaboración con creadores locales como el pianista Frank Fernández, el Coro Nacional de Cuba y la agrupación coral Vocal Leo.
Además, la visita ha sido concebida con un marcado componente educativo, pues una parte de los músicos encargados de los metales, la sección de cuerdas, la percusión y los instrumentos de viento de madera ofrecieron clases magistrales y actuaciones breves en la Escuela Nacional de Arte.
Al mismo tiempo, una representación de todos los instrumentos impartió conferencias y talleres en la Universidad de las Artes.
Para la Directora de Actuaciones en Vivo de la Sinfónica, Marilyn Nelson, estos encuentros constituyen una oportunidad para representar la “maravillosa e inclusiva comunidad” norteamericana.
Varias figuras dentro de la orquesta han expresado su orgullo por formar parte del proceso de restablecimiento de relaciones entre los Estados Unidos y Cuba, y sobre todo de aportar al propósito de estrechar los lazos culturales entre ambas naciones.
Así lo consideró el maestro de conciertos Erin Keefe, quien catalogó la ocasión como un momento único para unir a los creadores de los países vecinos.
La Orquesta de Minnesota, antes conocida como Minneapolis Symphony, actuó por última vez para un auditorio cubano hace 85 años.
En 1929 la agrupación salió por primera vez de la zona continental de Estados Unidos para presentarse en La Habana, donde en lugar de ofrecer dos conciertos como estaba programado, debieron dar tres dado el éxito de público.
Con la nueva visita de la Sinfónica a La Habana arribó a este archipiélago caribeño un grupo de estadounidenses que participan en el intercambio “people to people” (pueblo a pueblo), que permite que los ciudadanos de ese país viajen a Cuba a pesar de las restricciones que mantiene aún vigentes el gobierno del país norteño. (2015)
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