Nuevas cooperativas en Cuba: logros y desaciertos

La Habana, (AIN) Sobre los logros y limitaciones actuales de las cooperativas no agropecuarias, debatieron este miércoles varios integrantes de este modelo de gestión, durante el primer Taller Provincial de Cooperativismo, convocado por la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (ANEC), en la capital.
En presencia de miembros del Comité Nacional y Provincial de esa organización, los participantes intercambiaron acerca de sus experiencias en el emergente sector, reunidos en el Karabalí Café, establecimiento que se gestiona desde hace seis meses por 21 socios, en la céntrica calle de 23 de El Vedado, municipio de Plaza de la Revolución. 

De forma general, los cooperativistas provenientes de unidades estatales señalaron como aspectos positivos, luego de ser parte de la nueva figura económica, el hecho de poseer mayor sentido de pertenencia por el lugar donde laboran.

Hoy todos se preocupan por la limpieza del local, el cuidado de los equipos, por los gastos a ejecutar en el mes, así como están conscientes de que mientras más produzcan más ingresos obtendrán, dijo Exiquio Ramírez, presidente de la cooperativa Confecciones de Marianao, taller que antes pertenecía a la empresa Gala, del Ministerio de la Industria Ligera.

Ramírez subrayó que la principal dificultad hasta ahora ha sido en la obtención de los suministros, pues “existen entidades que desconocen nuestro derecho de comprar los insumos a un 20 por ciento menos de su valor en la red minorista, obviando así la personalidad jurídica que por ley poseen estas formas de gestión”.

Con similar preocupación, Héctor García, quien está al frente de la cooperativa Karabalí Café, comentó que ellos también han afrontado situaciones similares, aunque hasta el momento ello no ha provocado la subida de precios de los productos.

Resulta vital insitir en el funcionamiento interno de las cooperativas, en tanto estas deben ser un elemento movilizador donde se promueva la solidaridad entre los asociados, así como también el compromiso y la responsabilidad con la sociedad, resaltó Jesús Cruz, presidente de la Sociedad de Cooperativismo en La Habana. 

Resulta vital insitir en el funcionamiento interno de las cooperativas, en tanto estas deben ser un elemento movilizador donde se promueva la solidaridad entre los asociados, así como también el compromiso y la responsabilidad con la sociedad, resaltó Jesús Cruz, presidente de la Sociedad de Cooperativismo en La Habana. 

Nicolás Valladares, presidente de la ANEC en la capital, señaló la importancia de estos espacios de intercambio, con el objetivo de contribuir al buen funcionamiento y desarrollo de esas nuevas formas de gestión que nacen en medio de un contexto marcado por profundas transformaciones económicas.
Acotó que con tal propósito se organizarán próximamente otros talleres en la provincia, donde los cooperativistas podrán ofrecer, a su vez, posibles soluciones ante determinadas dificultades que les aquejan.