La Habana, 13 oct (AIN) El VI Festival Leo Brouwer de Música de Cámara dejó varios hitos como la participación de más de 300 artistas, 30 conciertos y 40 estrenos mundiales y nacionales antes de despedirse este domingo, en lo que será, según sus organizadores, un adiós definitivo.
Una partida que lamentaremos si se tiene en cuenta que este es uno de los mejores eventos de su tipo en el país, que evolucionó de una modesta celebración por los 70 años del Maestro Brouwer, leyenda viva de la música cubana, hasta llegar a ser uno de los más esperados sucesos en la vida cultura de la Isla, no sólo por la calidad de sus invitados sino por la cuidadosa selección del repertorio.
Sorpresa causó el anuncio de que esta sexta edición sería la última en los miles de seguidores de esta cita, quienes se consolaron con la idea de disfrutar de un programa de altura, que nos atrevemos a decir fue el mejor de los presentados en entregas anteriores de este Festival.
Si Leo quería una partida sonada, la tuvo.
Un cartel que reunió nombres como Yo-Yo Ma y Carlos Prieto, reconocidos entre los mejores cellistas del mundo, al cubano Pancho Céspedes, después de 24 años de ausencia de los escenarios, a Pablo Milanés en dos conciertos diferentes y a Fito Páez cantando canciones de Silvio y Pablo, y a Chucho Valdés tocando una pieza de Brouwer compuesta especialmente para él, no podía ser menos que único.
En 10 agitados días el público cubano tuvo el privilegio de asomarse a culturas y sonidos totalmente desconocidos como los de la viola da gamba, “despertada” de su letargo de más de un siglo por el español Jordi Savall, o los ritmos de la América precolombina con los que nos sorprendió la Orquesta de Instrumentos Autóctonos y Nuevas Tecnologías de Argentina.
Talleres, sesiones teóricas, flashmobs, noches blancas dedicadas a la trova, el humor, la rumba, el jazz, el flamenco y el son, funciones teatrales, muestras de fotografía y de pintura, demuestran el fallo del refrán popular que asegura que el que mucho abarca poco aprieta.
A sus 75 años el Maestro Brouwer dijo necesitar un descanso, aunque secretamente esperamos que se cumpla el vaticinio de Pancho Céspedes cuando sobre el escenario y tras agradecer a Leo por la invitación, agregó que de seguro se lanzará a otro proyecto muy pronto.
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