Me llama por teléfono un amigo de este Duende que siempre anda detrás de cuanta teoría conspirativa circula por ahí y me dice:
“Señor Duende ¿se ha creído Ud. ese “cuento chino” de que un intruso violó tres anillos de la seguridad de la Casa Blanca brincando la cerca de hierro de la residencia presidencial logrando llegar por sorpresa a poca distancia donde se encontraba el Presidente Trump hasta que el Servicio Secreto lo interceptó en su intento de hacer sabe Dios qué?
La misma historia pasó con Obama cuando otro intruso hizo lo mismo que éste y a pesar de que se dijo que se tomarían medidas extremas de seguridad para evitar situaciones parecidas, ahora con Trump ocurrió de nuevo algo igual.
No es que yo crea todo lo que se dice en la Internet pero para mí – me dice el amigo por teléfono- es que hay una mano misteriosa que maneja a estos “intrusos” que con sus incursiones sorpresivas de penetración en la Casa Blanca sirven para advertir al Presidente de turno, ya sea un “liberal “Demócrata como Barack Obama o un “conservador” Republicano como Donald Trump cuan vulnerables pueden ser los mandatarios norteamericanos en su existencia física si se atreven a salirse de la raya. Es nada más que una advertencia. El último que se pasó de la línea fue Kennedy y ya sabemos lo que le ocurrió. Yo no creo en brujas señor Duende pero de que las hay las hay”.
El teléfono hizo clic y se cortó la comunicación- ¿Estaría el “Gran Hermano” escuchando la conversación? Ahí se las dejo y los pongo pensar.
Y hasta la próxima entrega de El Duende que con mi gallo me voy cantando a mi tumba fría. Bambarambay.
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