By El Duende
Traducido del más allá por Max Lesnik
Esta noche es el tercer y último debate entre los candidatos a la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton y Donald Trump. Demócratas, Republicanos e Independientes tendrán la última oportunidad de ver encontrados frente a frente al que será el próximo inquilino de la Casa Blanca y de cómo se comporten y manifiesten en debate dependerá en gran medida el resultado de esta contienda presidencial que ha resultado ser la más costosa, agria y controvertida de toda la historia de la nación norteña.
Olvidémonos lo que dicen las encuestas porque esta noche un fallo garrafal de cualquiera de los dos contendientes, decide la elección. Es de esperar que en el debate de esta noche se discutan temas más sustanciales, tanto de política nacional como extranjera, que son más importantes para el pueblo norteamericano que los chismes sobre las actitudes machistas y abusivas contra las mujeres del señor Trump o las infidelidades conyugales del esposo de la señora Clinton.
Habría que ver si de nuevo sale a relucir el tema de las relaciones con Cuba en la que ya los Republicanos con Donald Trump a la cabeza, secundado por el Presidente de la Cámara de Representantes Paul Ryan se han pronunciado por el mantenimiento del Bloqueo a Cuba señalando además una posible ruptura o enfriamiento de las relaciones diplomáticas restablecidas por el Presidente Barack Obama y que la candidata Demócrata Hillary Clinton ha manifestado que apoya decididamente si llega a la Casa Blanca.
Para los votantes de origen cubano la elección es bien clara. Un voto para Hillary Clinton es un voto a favor del mejoramiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, es un voto contra el bloqueo, contra la división de la familia cubana y por la continuidad de los viajes a la isla, que de ser Trump y los Republicanos los ganadores de esta contienda electoral, todo lo logrado hasta ahora se vendría abajo, para volver a los negros tiempos de la “guerra fría” entre Washington y La Habana.
Para mí como cubano que soy, no podría jamás votar por Donald Trump. Ahí se las dejo y los pongo a pensar.
Y hasta mañana jueves amigos de El Duende que con mi gallo me voy cantando a mi tumba fría. Bambarambay.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por opinar