Redacción IPS Cuba
El turismo sostenible parece ser la opción económica para la población de Ciénaga de Zapata.Crédito: Jorge Luis Baños/IPS
Investigadores de varios países debatieron sobre el impacto del cambio climático y la necesidad del manejo del agua en esos ecosistemas.
Ciénaga de Zapata, Cuba, 16 nov.- Los manglares, hierbazales y bosques de ciénaga son los primeros escudos protectores de la vida en Cuba, una pequeña isla –que como todas en el Caribe- está amenazada por los pronósticos de grandes marejadas y ciclones causados por el sobrecalentamiento global.
“Los investigadores tenemos ya información para mostrarle a la sociedad la importancia de los bienes y servicios ambientales de los humedales”, reveló Ángel Alfonso, presidente del comité organizador del IX Simposio Internacional sobre Humedales y Manejo del Agua, desarrollado en la Ciénaga de Zapata, el mayor y mejor conservado del Caribe insular.
Para Alfonso, se necesita “declarar qué estamos protegiendo y qué se puede usar en cada territorio”, además de evidenciar el valor económico de los servicios que ofrecen a las personas la conservación de sitios naturales y costeros como Zapata, ubicada en Matanzas, a 87 kilómetros al este de La Habana.
En tanto, el ingeniero argentino Luis E. Basterra complementó que no basta con calcular los valores económicos. “Si algo tiene un valor monetario, tal vez alguien piense que lo puede vender y no es así”, continuó el diputado nacional del país cono sureño. “Perder una especie endémica no tiene precio”, ejemplificó.
“Mientras más nos demoremos en adaptarnos y mitigar los efectos del cambio climático, un por ciento mayor del producto interno bruto (PIB) tendremos que dedicar a la recuperación”, aportó el biólogo cubano Carlos Alberto Martínez, que participó en la cita, comprendida entre el 12 y 15 de noviembre.
Por ello, en lugares como la Ciénaga de Zapata, que posee las categorías de Sitio Ramsar, Reserva de la Biosfera y Parque Nacional, se trazan estrategias para que las personas adopten formas de relación con la naturaleza y de subsistencia en consonancia con los nuevos escenarios impuestos por el cambio climático.
Los manglares y la franja de bosque que les siguen detienen el avance de las inundaciones, bajan la intensidad de los huracanes y evitan la erosión costera y la pérdida de terreno, según especialistas. De ahí la importancia de fortalecer estos ecosistemas.
El gran humedal cubano es hoy el refugio de más de 165 especies de aves migratorias y autóctonas como el cocodrilo cubano (Crocodylus rhombifer). Tiene con una superficie de 4. 322 kilómetros cuadrados, de los cuales 1.670 constituyen terrenos cenagosos.
En la Ciénaga de Zapata habitan 9.300 personas en 18 comunidades, por lo que constituye el municipio más despoblado del país. La escasez de agua dulce es uno de los problemas más padecidos por la población local, debido al avance de la intrusión salina por malos manejos realizados durante años.
El impacto negativo de especies exóticas invasoras, expansión agrícola, incendios forestales, tala de los bosques y la intrusión salina figuran entre los factores que dejan un saldo muy negativo para el ambiente de la ciénaga.
“Los humedales son espacios cruciales también para equilibrar otros ecosistemas y la vida en sociedad de los seres humanos”, expresó Marisol Gil, la delegada en Matanzas del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, durante la clausura del simposio.
Según la funcionaria, los entornos naturales, como pantanos, manglares y ciénagas, son muy frágiles, por lo que requieren de investigaciones más profundas y constantes, donde se integren todas las ramas de la ciencia.
La novena edición del encuentro internacional, que se realiza cada dos años, acogió a alrededor de 80 participantes de Cuba, Estados Unidos, República Dominicana, México, Argentina, Perú, Brasil, Colombia y Guatemala.
Entre otros temas, se revisó el estado de conservación de los humedales en países del Caribe y Latinoamérica, alternativas de ordenamiento ambiental, servicios ambientales y su valoración económica, desarrollo sostenible de las localidades, estrategias de adaptación y mitigación del cambio climático, control de las especies exóticas invasoras y estudios de peligro y vulnerabilidad
El turismo sostenible parece ser la opción económica para la población de Ciénaga de Zapata.Crédito: Jorge Luis Baños/IPS
Investigadores de varios países debatieron sobre el impacto del cambio climático y la necesidad del manejo del agua en esos ecosistemas.
Ciénaga de Zapata, Cuba, 16 nov.- Los manglares, hierbazales y bosques de ciénaga son los primeros escudos protectores de la vida en Cuba, una pequeña isla –que como todas en el Caribe- está amenazada por los pronósticos de grandes marejadas y ciclones causados por el sobrecalentamiento global.
“Los investigadores tenemos ya información para mostrarle a la sociedad la importancia de los bienes y servicios ambientales de los humedales”, reveló Ángel Alfonso, presidente del comité organizador del IX Simposio Internacional sobre Humedales y Manejo del Agua, desarrollado en la Ciénaga de Zapata, el mayor y mejor conservado del Caribe insular.
Para Alfonso, se necesita “declarar qué estamos protegiendo y qué se puede usar en cada territorio”, además de evidenciar el valor económico de los servicios que ofrecen a las personas la conservación de sitios naturales y costeros como Zapata, ubicada en Matanzas, a 87 kilómetros al este de La Habana.
En tanto, el ingeniero argentino Luis E. Basterra complementó que no basta con calcular los valores económicos. “Si algo tiene un valor monetario, tal vez alguien piense que lo puede vender y no es así”, continuó el diputado nacional del país cono sureño. “Perder una especie endémica no tiene precio”, ejemplificó.
“Mientras más nos demoremos en adaptarnos y mitigar los efectos del cambio climático, un por ciento mayor del producto interno bruto (PIB) tendremos que dedicar a la recuperación”, aportó el biólogo cubano Carlos Alberto Martínez, que participó en la cita, comprendida entre el 12 y 15 de noviembre.
Por ello, en lugares como la Ciénaga de Zapata, que posee las categorías de Sitio Ramsar, Reserva de la Biosfera y Parque Nacional, se trazan estrategias para que las personas adopten formas de relación con la naturaleza y de subsistencia en consonancia con los nuevos escenarios impuestos por el cambio climático.
Los manglares y la franja de bosque que les siguen detienen el avance de las inundaciones, bajan la intensidad de los huracanes y evitan la erosión costera y la pérdida de terreno, según especialistas. De ahí la importancia de fortalecer estos ecosistemas.
El gran humedal cubano es hoy el refugio de más de 165 especies de aves migratorias y autóctonas como el cocodrilo cubano (Crocodylus rhombifer). Tiene con una superficie de 4. 322 kilómetros cuadrados, de los cuales 1.670 constituyen terrenos cenagosos.
En la Ciénaga de Zapata habitan 9.300 personas en 18 comunidades, por lo que constituye el municipio más despoblado del país. La escasez de agua dulce es uno de los problemas más padecidos por la población local, debido al avance de la intrusión salina por malos manejos realizados durante años.
El impacto negativo de especies exóticas invasoras, expansión agrícola, incendios forestales, tala de los bosques y la intrusión salina figuran entre los factores que dejan un saldo muy negativo para el ambiente de la ciénaga.
“Los humedales son espacios cruciales también para equilibrar otros ecosistemas y la vida en sociedad de los seres humanos”, expresó Marisol Gil, la delegada en Matanzas del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, durante la clausura del simposio.
Según la funcionaria, los entornos naturales, como pantanos, manglares y ciénagas, son muy frágiles, por lo que requieren de investigaciones más profundas y constantes, donde se integren todas las ramas de la ciencia.
La novena edición del encuentro internacional, que se realiza cada dos años, acogió a alrededor de 80 participantes de Cuba, Estados Unidos, República Dominicana, México, Argentina, Perú, Brasil, Colombia y Guatemala.
Entre otros temas, se revisó el estado de conservación de los humedales en países del Caribe y Latinoamérica, alternativas de ordenamiento ambiental, servicios ambientales y su valoración económica, desarrollo sostenible de las localidades, estrategias de adaptación y mitigación del cambio climático, control de las especies exóticas invasoras y estudios de peligro y vulnerabilidad
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por opinar