Surge como parte de la campaña ÚNETE del secretario general de Naciones Unidas para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas.
La Habana, 16 abr.- Pensada para ellas y con mensajes en cada página sobre empoderamiento femenino, violencia de género, salud, medio ambiente, racialidad, nutrición, familia y derechos, entre otros, Cuba tiene en 2014 su primera Agenda de las Mujeres.
Esta iniciativa ofrece herramientas útiles en el proceso de empoderamiento, promueve la reflexión sobre su vida cotidiana y brinda informaciones sobre autonomía, diversidad sexual, masculinidades, dijo a la Redacción de IPS Cuba Dixie Edith Trinquete, periodista y consultora del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA).
La agenda forma parte de los materiales elaborados por el Sistema de Naciones Unidas en Cuba dentro de la campaña ÚNETE del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas, que se desarrolla en el país con el mensaje personalizado Yo digo No.
Según explicó la consultora, para seleccionar los temas que serían incorporados, su colectivo de autoras acudió a la experiencia acumulada por cubanas diversas, transgresoras y feministas, además de consultar una amplia bibliografía “con el fin de regalarnos a cada una de nosotras, esta propuesta”.
Tampoco imágenes y colores fueron escogidos al azar. El morado y el naranja hacen alusión al feminismo y al activismo por la no violencia hacia las mujeres, respectivamente.
Un espacio importante dedica este producto a la violencia de género, con la inclusión de un autodiagnóstico de violencia en la pareja incluye preguntas como ¿has perdido contacto con amigas, amigos, familiares y colegas de trabajo para evitar que tu pareja se disguste?; y ¿has tenido que llamar a la policía o lo has intentado al sentir que tu vida o la de los tuyos ha sido puesta en peligro por tu pareja?, entre otras.
También se inserta un gráfico que ilustra el ciclo de la violencia, así como los teléfonos de lugares adónde llamar para buscar información u orientación en todas las provincias del país, así como las líneas rápidas libres de costo.
Cada mes, el 25, se destaca el Día Naranja, reconocido así por Naciones Unidas, con la visualización de buenas prácticas para poner fin a la violencia hacia las mujeres y las niñas.
La primera agenda cubana de las mujeres, incluye además herramientas mensuales para promover la reflexión sobre el tiempo libre –a partir de resultados de una encuesta nacional sobre el tema que arrojó que las mujeres trabajan 120 horas por cada 100 que laboran los hombres-, la valoración que deben hacer las mujeres sobre sus trabajos y autonomía económica, con recomendaciones para cada caso.
Por ejemplo, la página dedicada al uso del tiempo libre en abril, señala que “la mejor manera de enfrentar el exceso de trabajo es organizando sistemáticamente las prioridades y definiendo cuándo se puede delegar en otras personas, ya que “el exceso de pendientes es una importante causa de estrés”.
En el acápite dedicado mensualmente al control de las finanzas se recomienda contabilizar los ingresos salariales y de otras fuentes y controlar los gastos; dedicar cada mes un fondo a necesidades personales y a momentos de disfrute, invertir en equipos que faciliten el trabajo y sirvan para aumentar los ingresos, y planificar el ahorro para necesidades, inversiones, vacaciones e imprevistos.
En las páginas finales, la agenda inserta un calendario menstrual y un esquema del ciclo menstrual, orientaciones sobre cómo realizarse un autoexamen de mamás; ideas para vivir la menopausia y recomendaciones nutricionales. El libro alerta sobre las vulnerabilidades de las mujeres ante el VIH/sida y brinda consejos básicos para evitar el contagio.
Presente en Cuba desde hace seis décadas, el Sistema de Naciones Unidas promueve el empoderamiento y la igualdad de las mujeres a través de las transversalización del enfoque de género a todas sus áreas de intervención.
Las agencias de Naciones Unidas, indicó Trinquete, trabajan con sus contrapartes nacionales para garantizar, en cada programa o iniciativa, esa mirada diferenciadora que nos permite discernir cómo un problema afecta a mujeres y hombres, cuáles son las necesidades de unas y otros, y cómo cada persona puede contribuir a las prioridades del desarrollo.
La aparición de la agenda coincide con los 200 años del natalicio de Gertrudis Gómez de Avellaneda, poeta, ensayista y dramaturga, quien a mediados del siglo XIX retó, si no todos, buena parte de las normas sociales de la época.
“Mujer transgresora, antecesora del intenso movimiento feminista de las primeras décadas del siglo XX cubano, la Avellaneda, como se le conoce en su país, está en la esencia de esta agenda de las Mujeres, elaborada por el Sistema de Naciones Unidas (SNU) en Cuba”, indica la introducción. (2014)
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