José Mujica: ¿es este presidente el más radical del mundo?

By Giles Tremlett,  The Guardian

De Uruguay, José Mujica, vive en una pequeña casa en lugar del palacio presidencial, y regala 90% de su sueldo. Él ha legalizado la marihuana y el matrimonio gay. Pero su mayor legado es gobernar sin renunciar a sus ideales revolucionarios

Emo Mannise tenía sólo 16 años cuando conoció el actual presidente de Uruguay, José Mujica. Un día de primavera en 1969, Mannise estaba en casa sola con su hermana, Beatriz, cuando el futuro presidente salió del ascensor fuera de su ático en Montevideo con una pistola en la mano. "Date la vuelta, cierra la boca y mantenga las manos encima de la cabeza!" Ladró. Mannise reconoció de inmediato los ojos pellizcados y espeso cabello castaño, ondulado de uno de los miembros más notorios de los audaces, los guerrilleros tupamaros violentos . Después de su sentido inicial de pánico disminuyó, recordó, se sentía extrañamente tranquilo. "Recuerdo haber dicho a la joven pistolero que estaba con él que no se preocupara, que yo no iba a hacer nada", el agente de viajes de 62 años de edad, me dijo cuando nos reunimos en su librería favorita Montevideo, a escasa distancia de la turbias aguas del río inmenso Plate. Su hermana, que sufrió de polio y usa una silla de ruedas, fue llevado a otra habitación."No te preocupes viejita", Mujica le dijo, "todo irá bien, esto no tiene nada que ver contigo." El coloquial, cariñoso viejita - "viejita" - era un toque típico Mujica.

El padrastro de Mannise, José Pedro Púrpura, era un juez famoso, con vínculos con la derecha lejos del Uruguay y un stock de pistolas. Después la banda se fue, tomando los documentos y armas, Mannise dijo a sus familiares que era sólo molesto que los Tupamaros habían robado una máquina de escribir que usaba para su trabajo escolar.Al día siguiente, el teléfono sonó. "Son, los mismos de ayer ", dijo una voz. De repente sintió miedo de nuevo. De alguna manera ellos sabían acerca de la máquina de escribir.Si él la quería de vuelta, la voz le dijo, que podía encontrarla en el vestíbulo de un edificio cercano. "Efectivamente, estaba allí", dijo. "Habían dejado un mensaje escrito en ella para mi padrastro. 'Doctor cuidadoso ", decía. 'Le estamos viendo. "" Al año siguiente, una unidad tupamaro roció su edificio con fuego de ametralladora en un intento de asesinar al médico Púrpura.
 

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Yo soy un viejo hecho de carne y hueso, con los nervios y el corazón.Puse mi pie en ella mucho, pero siempre de buena fe.

Hace cinco años, en la última elección presidencial de Uruguay, Mannise emitió su voto por Mujica y su partido Frente Amplio, una coalición de izquierdistas que primero desplazaron la dominante Colorado y el Partido Nacional en 2005, con la elección de predecesor moderada de Mujica, Tabaré Vázquez. "Yo era de esperar para sentirse amargado por él," manisse me dijo. "Pero él es el único que practica lo que predica." Un ex revolucionario que todavía profesa ideales anarquistas se ha quedado el gobierno de Uruguay y su economía en auge desde entonces. Mujica sigue siendo popular, pero los presidentes no puede servir términos consecutivos: las próximas elecciones, el 26 de octubre, sin embargo, representará un referéndum sobre su gobierno de izquierda pragmática.

Él ha ganado renombre internacional como una verdad bocinas truculento: discursos lambasting consumismo desenfrenado en la Conferencia Río + 20 en 2012, y en las Naciones Unidas en Nueva York el año siguiente, han ganado 3 millones de visitas en YouTube. "¿Qué le pasaría a este planeta si los indios tenían el mismo número de coches por familia como en Alemania?", Le preguntó a la audiencia en Río. "¿Cuánto oxígeno quedaría?" En la ONU, dijo a los delegados que dejar de ir a las cumbres derrochadores y costosos que logran nada. Algunos le llaman Nelson Mandela de Latinoamérica, recordando sus 13 años en la cárcel. Otros ven un liberal revolucionario social que ha introducido la legislación cannabis más innovadora del mundo , así como el matrimonio gay y el aborto legal. Mayormente, sin embargo, que es famoso por la forma en que vive. El hombre que la mayoría de los uruguayos llaman El Pepe conduce un 25-años de edad, Volkswagen Beetle, vive en una pequeña casa en una pequeña propiedad rural, y regala 90% de su sueldo. Su estilo deliberadamente tosco pero pragmático deleita Uruguay y a pobres del mundo, sino que también trabaja para la parte de sus clases medias - un truco que otros líderes populistas latinoamericanos, invocando el gran libertador Simón Bolívar , visiblemente no han podido acudir. Sus críticos afirman que Mujica es más estilo que sustancia - un viejo encantador que deja a un lado tanto su arma y sus ideales revolucionarios. En un continente que se ha convertido en el mayor laboratorio del mundo para los regímenes de izquierda alternativa, cada uno afirmando haber encontrado la fórmula mágica, muchos todavía no pueden decidir si él es un héroe, o un vendido.

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En el verano de 1969, un oficial de policía llamó a la puerta de un pequeño banco de inversión Montevideo, que fue parcialmente propiedad de un ministro del gobierno.Los empleados lo dejaron entrar, sólo para descubrir que era un tupamaro. Varios otros guerrilleros siguieron. Se llevaron el equivalente de 100.000 dólares en dinero de hoy, pero también exigieron libros de contabilidad del banco. Uno de los empleados, Lucía Topolansky, había avisado a la "Tupas" que el banco estaba haciendo ofertas monetarias ilegales; su hermana gemela, Maria Elia, fue uno de los guerrilleros que realizaron el allanamiento. Los Tupamaros dejó los libros en la casa de un fiscal - y algunos de los involucrados en el comercio ilegal fueron encarcelados posteriormente.Fue un ejemplo de su estilo de marca "propaganda armada": la violencia estaba bien, pero lo mejor cuando probado a hacer el bien.

Las hermanas Topolansky eran de una familia acomodada en el exclusivo barrio de Pocitos. "Uruguay tiene riquillos, no Ricos - la gente que está acomodada, no rica," Lucía me dijo en su oficina en el Parlamento, en Montevideo, donde ahora es el senador más antiguo. Con la emisión ojos marrones pelo de plata, ella tiene una nariz remodelada dado a ella por un cirujano tupamaro que intentó cambiar su aspecto después de que ella salió de la cárcel. Se casó con Mujica en 2005, después de 20 años de vivir juntos - y 13 años de separación, cuando fueron encarcelados en cárceles separadas. Cuando él llegó a la presidencia, que era su tarea el juramentar. "El regimiento del ejército que se había detenido a dos de nosotros está de guardia en el edificio de la asamblea legislativa", dijo. "Nuestros amigos estaban allí, riendo y gritando:" ¡Ya es hora de los honrados '"

Girlhood apodo de Topolansky fue la Flaca (el flaco), pero los Tupamaros llamó la Tronca (el registro) porque era muy difícil. Mujica fue criado por una mujer igualmente de carácter fuerte, su madre, Doña Lucy. Su padre murió en 1943, cuando Mujica sólo ocho años. Pronto estaba entregando por una panadería local en el Paso semi-rural de la zona de Arena, y la venta de los lirios de Arum recortadas desde el arroyo detrás de su casa para ayudar a la composición de la familia a fin de mes. Uruguay tuvo un comienzo deslumbrante para el siglo 20, el envío de la lana y la carne de hambre, Europa devastada por la guerra; en 1930 fue uno de docenas de naciones más ricas del mundo según su ingreso per cápita. Tiny Uruguay disfrutó de la legislación social iluminada, con jornadas laborales de ocho horas y la licencia de maternidad: algunos lo llamaron la Suiza de América Latina. Incluso ganó la Copa del Mundo en 1930 y 1950, aunque su población nunca ha ido por encima de 3,5 millones. Pero como Mujica creció, el milagro comenzó a derrumbarse.

 

El presidente de los motivos de su humilde minifundio Fotografía:. Ines Maria Hiriart

Como hombre joven, Mujica fue a trabajar para Enrique Erro, un político de izquierda popular, pero tenía una epifanía política cuando conoció a Che Guevara en Cuba post-revolucionaria. Como gran parte de América Latina fueron víctimas de crisis y decadencia, que fue un escritor uruguayo, Eduardo Galeano, quien escribió una nueva biblia para el ala izquierda del continente, Las venas abiertas de América Latina. "El asesinato humana por la pobreza en América Latina es secreto", escribió Galeano, en 1971 "Todos los años, sin hacer ruido, tres bombas de Hiroshima estallan sobre las comunidades que se han acostumbrado a sufrir con los dientes apretados." Con Uruguay sufre una inflación galopante y una economía estancada, Mujica y sus compañeros decidieron seguir el ejemplo de Cuba, destruyendo el viejo orden y probar algo nuevo - aunque nunca quedó claro lo que debería ser. Uruguay no tenía montañas para esconderse en, con la ciudad de Montevideo que domina una fértil llanura llena de ovejas y de cara blanca ganado Hereford, por lo que se convirtió en la guerrilla urbana, tomando su nombre de un rebelde peruano del siglo 18, Túpac Amaru II. Los Tupamaros fueron un movimiento amplio - una sección estaba dirigida por un sacerdote - y sin miedo de experimentos, aunque sean costosas. Ensayo y error, en vez de dogma, marcaría su historia. Todavía lo hace.

Pronto se ganó una reputación por atreverse teatralidad. Allanamiento de la ciudad de Pando vio a andar por la calle principal disfrazado de un cortejo fúnebre. Después de un atraco en el Casino San Rafael en Punta del Este, un centro turístico de lujo, que enviaron de vuelta de la piscina de consejos de los empleados. La revista Time los bautizó como "los guerrilleros Robin Hood". Pero las personas con armas terminan usándolos. Seis personas murieron en el ataque Pando. En marzo de 1970, Mujica fue identificado por un policía en un bar. El Pepe sacó su pistola: dos policías resultaron heridos, y Mujica le dispararon seis veces. Fue enviado a la cárcel de Punta Carretas - que más tarde se convirtió en un centro comercial ostentoso con vistas al Río de la Plata desde el punto más al sur de Montevideo. Mujica salió de dos veces. Adolescentes impresionables como Mannise unieron manifestaciones estudiantiles, lanzando piedras a la policía como protesta se extendió a través de lo que se había considerado durante mucho tiempo como el más tranquilo y moderado país de la región.

Entonces todo salió mal. Los secuestros, bombardeos y ejecuciones a sangre fría dejan reputación romántica los Tupamaros "por los suelos. El ejército fue llamado y, en menos de un año, el Tupas fueron aniquilados. Mujica fue uno de los últimos en ser capturado, en agosto de 1972, mientras que vivir en la calle con una ametralladora Uzi y una granada debajo de su abrigo. En junio de 1973, un presidente de los ganaderos del autoritario, Juan María Bordaberry del Partido Colorado, lideró un golpe de Estado cívico-militar, el cierre de la democracia. Muchos culparon los Tupamaros.

Nueve dirigentes tupamaros fueron retirados de sus celdas de prisión y enviados a campamentos militares como rehenes - para ser asesinados si el grupo surgió a la vida.El poeta, novelista, dramaturgo y Mauricio Rosencof pasó 11 años en una pequeña celda junto a Mujica. Durante muchos años, Rosencof me dijo, los rehenes sólo podían comunicarse tocando código morse en sus paredes celulares. Autorizado a utilizar el inodoro sólo una vez al día, se orinaron en sus botellas de agua, permitiendo que el sedimento se asiente y beber el resto - ya que el agua también era escasa. Y fue aún peor para Mujica, cuyas heridas de bala había dañado seriamente sus tripas. El régimen de aislamiento condujo a medio loco. Pepe se convenció de que un micrófono oculto estaba oculta en el techo. Su estática imaginario lo ensordeció. "Él pondría piedras en la boca para parar de gritar," Rosencof, ahora tiene 81 años, me dijo. Mujica luchó para obtener el elemento que más necesitaba - un baño. Rehenes se permitió las visitas familiares ocasionales, así que Doña Lucy le trajo uno, pero los guardias se negaron a dárselo. Un día, cuando sus carceleros celebraron una fiesta, Mujica comenzó a gritar por ella; el comandante, avergonzado delante de sus invitados, cedió. Mujica se aferraba a su única posesión, un símbolo de la victoria sobre sus carceleros, cada vez que fueron trasladados a un nuevo campamento del ejército. "Se negó a fregar limpio", Rosencof recordó. "Todos tenemos tics que quedan de esa época. Cuando Pepe salió, él vino con todo ese equipaje ".

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La carretera principal que sale de Montevideo hacia el chacra de Mujica, o minifundio, te lleva a través de los suburbios industriales, sobre un río contaminado y extensiones planas últimos de pequeñas casas, en cuclillas. Son pobres, pero no decrépito. Hay relativamente pocos signos de la pobreza dolorosa que afecta a otras partes de América Latina, a pesar de una crisis de deuda mundo en desarrollo llevó a muchos a la miseria a principios de este siglo. Nags viejas están atados a la orilla del camino, mordisqueando los amplios arcenes verdes. Una señal áspera, pintado a mano en una chabola junto a una carretera de asfalto con baches puntos a la pista de tierra que conduce a la granja. Un paquete emocionados de perros se precipita al encuentro de los visitantes, a continuación, se precipita de nuevo a perseguir una camioneta entrega de botellas de gas. Pollas cuervo y perdices se pavonean por los campos cercanos, comida para gatos de granja furtivos. Los hombres en botas de goma blancas cortan acelgas en un campo perteneciente a la granja.

Mujica en el día de su salida de la cárcel en 1985 Foto: Agencia Camaratres / AFP

Mujica salió de su pequeña casa vestida con una chaqueta beige y pantalones grises con sandalias sobre pies socked. La lana es una mejora, lo que puede ser acreditado a su equipo de campaña de 2009, que lo destetó off puentes andrajosos. La edad ha hecho que sus características tanto más pellizcados alrededor de los ojos y carnosas en los bordes; su espesa mata de pelo canoso estaba cuidadosamente cepillado - otro hábito que adquirió durante su campaña presidencial. Manuela, un perro callejero de tres patas, saltó valientemente junto. La casa de un piso se encuentra medio-oculto por la vegetación, su metal corrugado techo que descansa sobre pilares en torno a un estrecho pasillo de cemento llena de cajas polvorientas y tarros. Lluvia de invierno había puesto de relieve las yeserías irregular. "Cuidado con el barro!", El presidente advirtió a modo de saludo. La habitación frente estrecho, alargado contiene una silla barata oficina y escritorio, estanterías, una mesa pequeña con dos sillas de respaldo de madera incómodos, una estufa de leña y una antigua, bicicleta Peugeot inmaculadamente restaurada. "He tenido esa bicicleta durante 60 años", dijo con orgullo, recordando sus días como piloto amateur. Las otras dos habitaciones de la casa son familiares para los uruguayos, que los han visto en YouTube: el presidente una vez que mostró un equipo de televisión de Corea su cama más o menos hecho y el contenido de un viejo refrigerador antes de invitarlos a tiros de Johnny Walker y Aguardiente uruguayo . Telarañas, cargado de moscas muertas, pendía sobre nuestras cabezas. Mujica, se sentó con las piernas rígidas sobre la silla de la oficina, aliviando las articulaciones y listo para el combate verbal.

Mujica podría vivir en el palacio presidencial, una mansión de cien años de edad, en el antiguo barrio de Prado-dinero, pero él preferiría estar aquí. "Pensamos en ello como una manera de luchar por nuestra libertad personal", dijo. "Si te complicas la vida demasiado en el sentido material, una gran parte de su tiempo va a tender eso. Es por eso que todavía vivimos hoy en día como lo hicimos hace 40 años, en el mismo barrio, con la misma gente y las mismas cosas. No dejas de ser un hombre común sólo porque usted es el presidente ".

Mujica tiene una boca para que coincida con su rusticidad. En un discurso a los sindicalistas en Montevideo el día anterior, el público colgado en la quickfire, frases crudo que él afirma haber recogido en la cárcel. "Es la joda!" - "¿Qué mierda!" - Provocó un chillido de placer de una mujer detrás de mí. "Yo sé lo que nuestra gente son como," me dijo Mujica. "Algunas personas más cultivadas tienen un estereotipo y pensar el señor presidente tiene que ser como una estatua, totalmente inerte. Él no puede ser como cualquier otra persona. Pero yo soy un hombre viejo de carne y huesos, los nervios y el corazón. Sí, puse mi pie en ella mucho, pero siempre de buena fe. "

Todavía vivimos hoy como hace 40 años. No deja de ser un hombre común sólo porque usted es presidente

"Yo no estaba votado presidente porque había sido un tupamaro", dijo. "Pero yo no hice esto a escondidas, ocultando mi pasado." Incluso en sus días de guerrilla, insiste, él trató de mantener la violencia a un mínimo. Él ahora profesa un odio hacia la guerra moderna, sino también desprecia "pacifismo beatífica", y se niega a expresar remordimiento por su pasado violento. "Las únicas cosas que lamento son las que yo podría haber hecho, pero no lo hice", dijo. No aferrarse a viejos rencores - los hombres que encarcelado y torturado a él, a su juicio, fueron instrumentos en las manos de otras personas. En una de esas contradicciones que se producen por la democracia participativa, los uruguayos votaron a favor de mantener una ley de amnistía proteger muchos involucrados en la represión del Estado en el mismo día que recogió Mujica a la presidencia. "Sufrí, pero no puedo aguantar al odio", dijo. "Yo no sería la persona que soy si no hubiera vivido esos años."

Otros catorce personas viven en pequeñas casas repartidas por toda la chacra, muchos de ellos ancianos. Él no cobra alquiler. "Somos un poco como un asilo de ancianos", dijo. En el fondo, él sigue siendo un anarquista - o, como él dice, un libertario de izquierda. "Yo soy la mitad, o incluso mucho, libertario - como un sueño, como una utopía. Si el hombre antiguo podría gobernarse a sí mismo, entonces tal vez un día, en el futuro, los hombres pueden gobernarse a sí mismos de nuevo. "Después de toda una vida de militancia, a la edad de 79 que ha encontrado una manera de equilibrar su idealismo con el pragmatismo, para consternación de sus críticos de la izquierda. "Una visión de izquierda del mundo requiere que imaginar una utopía futura, pero uno no tiene el derecho a olvidar que lo más importante para todo ser humano es la vida que llevan ahora", dijo. "La lucha para hacer mejor hoy debe ser su tarea central."

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Una banda presidencial con las rayas azules y blancas pálidas de Uruguay se encuentra en una caja con tapa de cristal en el forrado de libros, estudio sombrío de Julio María Sanguinetti en una casa en una calle tranquila, cerca de Punta Carretas. Gemelos, los botones de la chaqueta brillantes y una corbata de seda de color verde pastel refuerzan una imagen de silenciado, sofisticación patricio. "Me siento uno de los tres presidentes uruguayos de haber servido dos términos," me informó como retenedor nos trajo café. Su partido Colorado ha perdido votantes Frente Amplio de Mujica - que reúne a ex-Tupamaros, socialistas, comunistas y de izquierda demócrata-cristianos del país.Sanguinetti es perpleja e indignada. "La dictadura volvió a los autores en víctimas", dijo. "Sin embargo, la dictadura fue provocada por los Tupamaros ... todos los tiros Mujica disparó estaban en contra de la democracia." Sanguinetti fue prohibido de la política durante la dictadura, a pesar de que finalmente ayudó a negociar su fin en 1984 Los rehenes fueron liberados el año siguiente, durante su primera presidencia. Para entonces Mujica había dado la bacinica en un pequeño jardín caléndula. Rosencof recuerda verlo salir de la cárcel, con orgullo lleva su orinal, y desaparecer en un mar de banderas agitadas por los partidarios.

José Mujica emite su voto durante las elecciones presidenciales en 2009Fotografía: Migual Rojo / AFP / Getty Images

En la década de 1980 y 90 los gobiernos encabezados por el partido de Sanguinetti Colorado, y sus rivales tradicionales, el Partido Nacional, siguieron una versión suavizada de las reformas neoliberales. Uruguayos moderados no querían empresas estatales privatizadas, al menos no sin las debidas garantías, y así lo dijo a referéndum;que todavía están en manos públicas. Los Tupamaros, experimental como siempre, vio ninguna razón para volver a la violencia, por lo que se unió al Frente Amplio en 1989 y Tiré las cosas desde la izquierda, advirtiendo contra los males del centrismo. Pero muchos de ellos aún creían que la estructura podrida de neoliberal de América Latina se derrumbaría, y brazos se necesitaría una vez más. Adolfo Garcé, politólogo que ha estudiado la transición notable los Tupamaros "en la política electoral, me dijo que los viejos revolucionarios jugado un doble juego - la participación en la democracia mientras se preparaba para volver bajo tierra si es necesario. "Se puede ser mejor descrito como una organización que siempre estaba dispuesto a sumergirse y ser clandestina", dijo Garcé.

Elecciones uruguayas son complejas: los votantes no sólo tienen que seleccionar una de las partes, pero elegir una facción dentro de ese partido. Eligen las dos cámaras del Parlamento, un presidente y, a menudo, el voto en referéndum al mismo tiempo. En 1994, cuando el Frente Amplio llegó a los pocos puntos de ganar una elección, la facción liderada por tupamaro seguía siendo un jugador menor de edad, con sólo dos diputados en el parlamento de 99 escaños. Pero uno de ellos fue Mujica. Cabalgó al parlamento en una Vespa maltratada, llevaba ropa de diario y salpicó su discurso con el argot. ("Piensa frases ingeniosas", dijo Sanguinetti. "Pero él ha destruido el idioma.") La gente aprendió que vivía en una pequeña casa en una chacra, que creció flores y no se preocupan por su apariencia, sus posesiones , o si su voz sonaba como si estuviera teniendo una fila en el mostrador de un bar de Montevideo. Mujica el héroe popular nació.

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El día Lucía se debió jurar Pepe como presidente, su publicista Pancho Vernazza había dispuesto a reunirse con él a las 8 am para repasar el discurso. Vernazza, un ejecutivo de publicidad de alta potencia Montevideo, era un poco tarde, y encontró que un Mujica impaciente ya se había alejado. "Había ido a dar una vuelta en su tractor," me dijo Vernazza. Mujica lo contrató para una campaña presidencial que empezó con una pelea para ganar la nominación del Frente Amplio en contra de un socialdemócrata moderado, Danilo Astori - que se convertiría en vicepresidente de Mujica, asegurando que el suyo sería un gobierno de negocios. Era, Vernazza, bromea, la reunión de un izquierdista y anarquista derechista. Conocidos de negocios amenazaron con abandonar el país si Mujica ganaba. "En 40 años de trabajo profesional, nunca he conocido a nadie con su capacidad para aprender y ser flexible", dijo. "Él es el menos autoritario de todos los políticos que he conocido." Vernazza también encontró lo caótico, desorganizado y metedura de pata-montado. Pero la inteligencia política nativa y un talento para la improvisación, viéndole mutar rápidamente de un rebelde con camisetas rasgadas a un candidato presidencial serio. Trataron de hacer que dudan menos miedo de un hombre conocido por su vocabulario moretones y salidas de televisión de pelo alborotado y sin la dentadura postiza. Por encima de todo, Pepe se vendió. Los Tupamaros siempre tenía un sentido agudo de marketing, y los flashes de Mujica de ingenio roughhouse hizo soundbites perfectos. "Él fue atrapado en su propio estereotipo", dijo Vernazza. "Así que cambió su personalidad, demostrando que era políticamente mucho más flexible que la gente había pensado." El cabello estaba peinado, y los dientes se quedaron igual. Mujica asumió la presidencia, y su facción, liderada por Topolansky, se convirtió en el mayor componente del Frente Amplio.

Las niñ0s pobres no están bien tratados por nuestra sociedad. Para mí esa es una de las batallas más importantes para la equidad

Reformas sociales progresistas de Mujica han impulsado su fama mundial, pero está menos impresionado por ellos que sus admiradores. "Se adaptan nuestro sentido de la libertad y los derechos humanos, pero no resuelven el problema de fondo, que es la diferencia de clase," dijo. Los activistas dicen que él no es una persona física progresiva social. "Es un poco de Cro-Magnon, de verdad", dijo un activista de la salud sexual, que es, sin embargo, agradecido por una ley que legaliza el aborto en las primeras 12 semanas de embarazo; Vázquez, un católico devoto, había vetado una ley similar durante la anterior presidencia del Frente Amplio. Sergio Miranda y Rodrigo Borda, la primera pareja gay que se casan el año pasado, no se dé Mujica mayor parte del crédito."Mucha gente luchado por esto durante muchos años," Miranda me dijo a las pequeñas oficinas de su negocio del turismo gay. Por su parte, el presidente todavía se refiere a los gays y lesbianas como "sexualmente ambivalente".

"Todo lo que estamos haciendo es reconocer algo tan antiguo como la humanidad", dijo Mujica. "Lo mejor es que la gente pueda vivir como quieren vivir." Él ve las dos veces castigados por la pobreza y la intolerancia como las verdaderas víctimas. "Los que son sexualmente ambivalente tienen un verdadero problema si son pobres. Si son ricos son tolerados. Eso suena crudo, pero es la verdad como yo lo veo, "dijo. "Y las mujeres más discriminadas son las de la pobreza. El machismo afecta más duramente a los niveles más bajos. Las niñas pobres no están bien tratados por nuestra sociedad. Hay mujeres que terminan abandonadas con un montón de niños. Para mí esa es una de las batallas más importantes para la equidad. "Durante la campaña presidencial fue sorprendido quejándose de" las mujeres intelectuales que piensan que son oprimidas ", o que hablan de su" compañera "señora de la limpieza," cuando ella es realmente la siervo ". Casi todo el 90% de su sueldo que Mujica regala destina a las madres solteras.

Mujica nunca ha fumado marihuana, pero él es adicto al tabaco: los visitantes a menudo se han visto a escondidas un cigarrillo con el presidente, que se apresura a apagar su cigarrillo en el sonido del coche de Lucía. "La prohibición ha demostrado ser un espléndido fracaso", dijo. "Si usted quiere el cambio, no se puede seguir haciendo las mismas cosas. Hemos optado por la regulación de la venta de marihuana y que, naturalmente, tiene que ser hecho por el Estado. Queremos llevar a los usuarios de su escondite y crear una situación en la que podemos decir: 'Usted está exagerando. Tienes que lidiar con eso '. Es una cuestión de límites ", dijo. Los partidos de oposición ven un experimento que estallar en la cara del Frente Amplio en época de elecciones. La mayoría de los uruguayos no les gusta la ley, y se ponchó si Vázquez, que está de pie de nuevo como candidato, no gana la votación del próximo mes.

La verdadera razón de la legislación sobre la marihuana se puede encontrar cerca de la casa natal de Mujica en Paso de la Arena, donde el asfalto se convierte en tierra y las casas son pequeñas y pobres. Bandas de jóvenes de pie alrededor en la penumbra. "Esto es cuando aparecen los niños pasta base", Walter Pernas, periodista de investigación y el hijo de trabajador de la construcción, explicó que nos topamos por carreteras secundarias. Base de pasta, un producto tóxico del proceso de la cocaína-purificación, con efectos similares a la cocaína, se estropeando el intento de Mujica para sacar a la gente de la miseria. Podría decirse que es el mayor problema social de Uruguay, lo que agrava la pobreza y alimentando el crimen. Más del 1% de montevideanos son usuarios.Ese número se eleva en estos pobres, barrios marginales - donde la bocas, o los mercados de drogas, empezar a operar después del anochecer. Mujica quiere tomar ganancias de marihuana lejos de los traficantes, al tiempo de liberar recursos policiales.En un país con un crecimiento económico tan dramático, preocupación popular ya no es sobre el empleo, la pobreza o la economía es, sino de la violencia, la inseguridad y lapasta base.

 

 El presidente y su 25 años de edad, Volkswagen Escarabajo Fotografía:. Ricardo Ceppi / Corbis

"Es una generación perdida. Son tan dañados del cerebro que ni siquiera pueden entender lo suficiente para mantener un puesto de trabajo ", dijo Pernas. El miedo a la violencia es real y creciente. Las personas que utilizan para llevar la basura a los contenedores de la calle en la noche ahora esperan hasta mañana. Una vez, la pobreza llevó a la gente a los contenedores para comer, y las amas de casa colocó cuidadosamente los restos de comida en bolsas separadas. Ahora los adictos a la pasta-base los toman. Juan Abbate, el dueño de la panadería de la familia donde Mujica trabajó como muchacho, describió cómo una vez había sido impedido de hacer una entrega por una banda de matones adolescentes de pasta-base. "Ellos arrojaron mi coche con piedras, así que tuve que irme", dijo. En las próximas elecciones de octubre, los uruguayos votarán en un referéndum para reducir la edad de responsabilidad penal de los adultos de 18 a 16 Cuando Mujica vuelve aquí, él ve una sociedad que es a la vez más rico y más débil. Esto es en parte el lamento de un anciano de días inocentes de la niñez pasó recogiendo leña, venta de flores, y persiguiendo a los peces en el arroyo, sino también parte de su discurso contra el consumismo, el egoísmo y lo que él llama "la pobreza mental». "Nuestra vida se ha hecho más fácil", dijo. "Pero eso es la eliminación de la creatividad."

Un busto del Che Guevara se asoma por debajo de una estantería en la granja de Mujica. "Fue inolvidable, un molde automático", dijo el presidente. "Él marcó toda nuestra juventud." Sin embargo, el hombre que, inspirado en Guevara, una vez que estalló fábricas propiedad de extranjeros ahora les ofrece exenciones fiscales. "Necesito capitalismo al trabajo, porque tengo que cobrar impuestos para atender los graves problemas que tenemos. Tratando de superar todo demasiado abruptamente condena a las personas que están luchando por el sufrimiento, por lo que en lugar de más pan, tiene menos pan ", dijo. No todos los Tupamaros han acompañado Mujica en su viaje hacia el socialismo blando, pragmático. "Dejaron sus ideales en sus celdas de la prisión", el ex rehén Jorge Zabalza proclamó recientemente. "Algunos compañeros de edad no van a entender", dijo Mujica. "Ellos no ven nuestra batalla contra los problemas cotidianos de la gente, que la vida no es una utopía."

Al igual que en otros países de la región, un auge económico en gran parte impulsado por la creciente necesidad de China de alimentos ha levantado un gran número de la pobreza, por 40 a 12% en una década. Pobreza aguda ha disminuido diez veces en el mismo período. El auge ha coincidido con las presidencias de Mujica y Vázquez, cuando la economía ha crecido en un 75%, y el gasto público se incrementó en casi un 50%.Brecha de la riqueza del Uruguay también ha cerrado, sobre todo porque el gobierno de Vázquez introdujo por primera vez el impuesto de ingresos del país. El gasto social ha aumentado, apuntando a los más pobres. Todos los escolares uruguayos incluyen ordenadores portátiles, aunque partes del sistema escolar siguen siendo disfuncional.Pero no ha habido un cambio radical en la estructura social o política básica de Uruguay, en parte debido a un sistema institucional complejo desalienta. Un impuesto a la tierra propuesto por Mujica, por ejemplo, fue golpeado por los tribunales. La democracia de Uruguay tiene tantos controles y equilibrios, el politólogo Garcé dijo que los presidentes deben gobernar a través del diálogo, la inoculación del país contra el populismo que ha causado estragos en otras partes del continente.

El recién pragmático Mujica ya no combate la globalización que, mediante la vinculación de las mesas chinas a granjas uruguayos, financia esta transformación notable. "Es como cuando me miro en el espejo y veo mis arrugas," me dijo. "No siento simpatía hacia ellos, pero son inevitables. Tengo que luchar para administrar lo mejor que puede, porque si empiezo gimiendo como un bebé no voy a cambiarlo. "Fracaso flagrante de la Globalización, Mujica dijo, es la falta de control político. "Es malo, ya que sólo se rige por el mercado. No tiene ninguna política o el gobierno. Los gobiernos nacionales son sólo preocupado por sus próximas elecciones, pero hay una serie de problemas globales que nadie trata. "Eso no significa que el capitalismo ha ganado por completo. "Yo no creo que sea inevitable que el mundo debe vivir en el capitalismo", me dijo. "Eso es lo mismo que no creer en el hombre, y el hombre es un animal con muchos defectos, pero también con capacidades sorprendentes."

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Mujica todavía cree en la lucha de clases. ("Y sí," dijo. "Esta es definitivamente la guerra.") Pero esa guerra, despojado de la revolución y llovió por la realidad, ahora se libra en un campo de batalla muy estrecho. Los salarios y los derechos sindicales le excita más. Garcé me dijo que Mujica ha sido paralizado por la condición de minoría de su facción dentro de la coalición Frente Amplio. "Lo extraordinario es que tenemos un grupo de socialistas revolucionarios que no creían en la democracia, a continuación, se entregaron a voto de asilo expertos pero finalmente hacemos sólo reformas mínimas para el sistema", dijo. Sin embargo, el salario mínimo ha aumentado un 50% durante el mandato de Mujica, lo que sugiere que la reforma radical no puede haber sido necesaria para dar grandes pasos en el camino hacia su utopía imposible. De hecho, cuando le pregunté cuánto uruguayos Mujica había cambiado su país, algunos contestaron que era Uruguay - y sus tradiciones de la moderación y el diálogo - que lo había cambiado."Su transformación", el economista Ernesto Talvi me dijo, "es, básicamente, un triunfo de la democracia liberal."

El ex Tupamaros que conocí a menudo mencionaa  Don Quijote. Mujica me dijo que el Che Guevara encarnó el espíritu de loco, caballero de honor-obsesionado de Cervantes errante. Un joven escritor incluso sugirió que el presidente había sido comercializado deliberadamente como una versión moderna de Quijote. La negativa a comprometer el honor personal - ejemplificada por su estilo de vida sencillo chacra - ciertamente encaja esa narrativa. Con sus sueños utópicos y su amor más allá de "solo", pero la violencia en última instancia inútil, los Tupamaros sé todo sobre molinos de viento. Pero la determinación de Mujica a seguir experimentando lo ha visto idealismo plaza con pragmatismo. Y donde la austeridad está dentro de la casa del presidente, en lugar de fuera de ella, las acusaciones de venderse sólo puede suenan huecas.

Después de nuestra charla, el presidente se puso botas llenas de barro y me mostró los edificios de la granja. El azul pálido VW Beetle sentado en un garaje polvoriento con puertas de oxidación, de chapa. "Rara vez se rompe, que prácticamente regalan piezas de repuesto, y su seguro es barato", dijo. Su sueño post-presidencia es la creación de una escuela de agricultura para los jóvenes en un granero vacío al lado de la chacra."Desde que me dediqué a arreglar el mundo cuando yo era joven, no tenía hijos", explicó. Cuando nos fuimos, le pregunté a un cardo-picker sobre el presidente. "Él es un hombre común", dijo. Sonaba como un elogio.